Clínica Sancal

Dra. Sánchez

Estética dental

Gingivectomía estética: solución rápida, sencilla y eficaz para la sonrisa gingival

Hay algunas personas que al sonreír muestran una cantidad de encía que resulta antiestética, ya que es mayor de lo habitual. Es decir, la encía tiene un protagonismo excesivo y el diente parece muy corto o pequeño. Esto es lo que se conoce con el nombre de sonrisa gingival. Dado que para muchas personas dicho exceso de encía supone un problema complejo, existe una pequeña intervención quirúrgica que permite disminuir la cantidad de encía que mostramos cuando sonreímos. Dicha operación es la gingivectomía estética. ¿Qué es la gingivectomía estética? La gingivectomía es un sencillo procedimiento quirúrgico que consiste en recortar ligeramente la encía que rodea el diente. De esta manera, se descubrirá más la pieza dental y se conseguirá una mejora notable en la sonrisa, que será más proporcionada y estética. Con ello, los dientes parecerán más grandes, más largos y menos cuadrados. La gingivectomía estética es un tratamiento muy agradecido: rápido, previsible e indoloro. Además, consigue unos resultados muy visibles y satisfactorios ¿Cuándo se realiza una gingivectomía estética? Se puede recurrir a la gingivectomía estética cuando la causa del exceso de encía se debe a alguno de los tres supuestos siguientes: 1. Erupción pasiva alterada (EPA) La erupción pasiva alterada (EPA) es un trastorno que se produce cuando tiene lugar el crecimiento natural de los dientes, el cual termina entre los 14 y los 16 años de edad. La EPA provoca una alteración en la erupción de las encías, que hace que éstas no se retiren lo suficiente y, por tanto, cubran demasiado esmalte dental. 2. Sobrecrecimiento del maxilar superior   SOBRECRECIMIENTO DEL MAXILAR SUPERIOR  Otra de las causas dela sonrisa gingival es el sobrecrecimiento del maxilar superior. Dicha alteración en el crecimiento de los huesos maxilares va acompañada, habitualmente, de una erupción pasiva alterada a menor escala. Dicho esto, una gingivectomía estética serviría para mejorar, en parte, la estética de la sonrisa. Sin embargo, para conseguir la mejor solución estética tendríamos que recurrir a la cirugía ortognática. Esto sucede porque la causa principal del exceso de encía es un crecimiento óseo mayor de lo normal. Por tanto, dicho hueso debe ser reducido y la única forma de hacerlo es recortándolo mediante una intervención quirúrgica que realiza el cirujano maxilofacial. La cirugía ortognática siempre se combina con ortodoncia. Primero se lleva a cabo una fase de ortodoncia para colocar los dientes en la posición adecuada. Esto se hace porque el sobrecrecimiento del maxilar superior va acompañado de una clase II, en la que los dientes superiores están adelantados. Por tanto, la ortodoncia servirá para solucionar la posición de las piezas dentales. 3. Bruxismo Las personas bruxistas tienen el hábito de apretar los dientes, lo que provoca en los mismos un desgaste. Este desgaste continuado en el tiempo hace que los dientes se vayan erosionando y haciendo más pequeños. Y, por tanto, que se exponga la encía. Además de esto, los dientes superiores tienen una tendencia natural a buscar el contacto con los de la arcada inferior para poder realizar una correcta oclusión. Al ser cada vez más pequeñas, las piezas dentales de la arcada superior tienden a erupcionar llevando consigo la encía. En estos casos, y debido a que se ha producido un desgaste irreversible del diente, será necesario cubrir la pieza dental con carillas o coronas de porcelana. Antes BRUXISMO (ANTES DE LA GINGIVECTOMÍA) Después   BRUXISMO (DESPUÉS DE LA GINGIVECTOMÍA) La técnica quirúrgica En la Clínica Dental SanCal realizamos la gingivectomía estética mediante un bisturí eléctrico. Dicha intervención también puede llevarse a cabo con un bisturí láser. Sin embargo, nuestros periodoncistas utilizan el bisturí eléctrico ya que hace que el procedimiento sea más preciso, indoloro y cause menor sangrado. Además, consigue algo muy importante: evitar el retorno de la encía. Este tratamiento de cirugía gingival se realiza con anestesia local, por lo que el paciente no siente ningún tipo de dolor. Por otro lado, conlleva unos puntos de sutura muy finos (utilizados comúnmente en oftalmología) que se quitarán al cabo de una semana. En ocasiones, además de recontornear el tejido blando (encía), es necesario realizar una osteotomía, es decir, un recontorneado del hueso. Esto se realiza en aquellos casos en los que el periodoncista considera que se puede producir una recidiva, es decir, que con el tiempo la encía volviera a ocupar la posición previa a la intervención. En cambio, realizando un recorte tanto del tejido gingival como del hueso -de unos 2 milímetros- se conseguirá que los resultados sean siempre permanentes. Animación 3D de una gingivectomía Postoperatorio de la gingivectomía estética El tratamiento de gingivectomía tiene uno de los mejores postoperatorios de todas las cirugías orales que pueden realizarse. Al día siguiente de la intervención el paciente ya puede cepillarse los dientes con un cepillo quirúrgico que ayudará a deshacer el coágulo de sangre que tiende a formarse en el margen gingival. Y, a pesar de que la operación produce un hematoma y una inflamación en las encías, estas señales empiezan a desaparecer en una semana. Así, en el plazo de dos semanas, se conseguirá una recuperación total de las encías. Además de esto, podemos decir que el postoperatorio no resulta doloroso para el paciente, ya que las molestias que pueda padecer podrá paliarlas simplemente con un analgésico. Posibles complicaciones La gingivectomía estética es una cirugía muy predecible por lo que resulta muy poco común que surja algún tipo de complicación. Además, no existen importantes contraindicaciones que impidan a un paciente someterse a esta intervención estética. Por ello, decimos que es un tratamiento muy agradecido. Por un lado, es sencillo, rápido, predecible y no presenta complicaciones importantes. Por otro lado, ofrece unos resultados altamente visibles y satisfactorios. Es por todo lo anterior por lo que someterse a una gingivectomía compensa claramente debido a que presenta grandes ventajas. Su única desventaja pasa por tener la zona de las encías amoratada. Sin embargo, este pequeño inconveniente se solventa en aproximadamente dos semanas. Gingivectomía como solución a problemas de salud Hay algunas ocasiones en las que se produce una excesiva inflamación de las encías por acumulación de sarro. En estos casos, además de tomar cierta medicación, es posible tratarse con una gingivectomía. Esto suele realizarse en aquellos pacientes que llevan brackets y cuya salud de las encías hace peligrar el tratamiento de ortodoncia.   Gingivectomía estética: antes y después En nuestra clínica dental, la doctora

Ortodoncia

Tengo sobremordida: ¿qué problemas genera y cómo puedo corregirla?

Dentro de los problemas de maloclusión dental por los que cada día tratamos a nuestros pacientes, la sobremordida es uno de los más comunes. Aunque depende de su grado, la sobremordida no es una de las maloclusiones más visibles, ya que no tiene por qué percibirse al sonreír debido a que no siempre mostramos los dientes inferiores cuando lo hacemos. Y es que se considera que una persona tiene sobremordida cuando sus dientes superiores están más adelantados que los inferiores e, incluso, llegan a cubrirlos -ya sea total o parcialmente-. Por tanto, depende cómo afecte esta posición incorrecta al aspecto estético y funcional del paciente se debe determinar si la sobremordida se soluciona con un tratamiento de ortodoncia o con una combinación de ortodoncia y cirugía ortognática. ¿Qué es la sobremordida? Como acabamos de avanzar, la sobremordida se caracteriza porque los dientes superiores llegan a cubrir verticalmente los dientes inferiores. Ésta suele ser consecuencia de una maloclusión de clase II, en la que el maxilar se encuentra adelantado respecto a la mandíbula. Dado que puede estar presente en diferentes grados, en algunas ocasiones la sobremordida es muy leve y apenas se aprecia. Sin embargo, hay casos de sobremordida profunda en los que, al morder, los dientes superiores tapan totalmente los inferiores. De hecho, se considera sobremordida profunda cuando los incisivos superiores cubren un tercio de los inferiores. SOBREMORDIDA PROFUNDA ¿Qué problemas genera? Ya que existen diferentes grados de sobremordida, cuanto mayor sea éste más importantes serán los problemas que provoque o que lleve aparejados: Apiñamiento en incisivos y/o caninos (colmillos) superiores Mayor probabilidad de caries debido al apiñamiento, que dificulta la higiene bucodental Mayor probabilidad de padecer una enfermedad periodontal debido a la dificultad para mantener la higiene Tensión excesiva en la mandíbula, lo que se traduce en bruxismo y desgastes en los dientes ¿Cómo puedo evitar la sobremordida? Antes de comenzar a detallar en qué consisten los tratamientos para solucionar la sobremordida, es importante destacar que, en muchas ocasiones, la sobremordida no se puede evitar. Esto se debe a que en, en este caso, la herencia genética juega un papel fundamental. De hecho, la mayoría de personas con este tipo de maloclusión tienen antecedentes familiares de sobremordida. Dicho esto, también es verdad que hay hábitos que tienen lugar en la infancia y que pueden contribuir a que los niños desarrollen sobremordida. Estos son la succión del dedo pulgar o el uso del chupete durante un tiempo prolongado. NIÑO SUCCIONANDO EL PULGAR ¿Cómo se puede corregir? En función de la edad del paciente y del grado de sobremordida podemos aplicar diferentes soluciones: Ortodoncia interceptiva (niños): Llamamos ortodoncia interceptiva a aquellos aparatos que colocamos en niños con edades comprendidas entre los 6 y los 11 años aproximadamente y que sirven para guiar el desarrollo de sus huesos maxilares cuando aún están en fase de crecimiento. Dadas las edades tempranas con las que se coloca la ortodoncia interceptiva, con estos aparatos nos centramos únicamente en los huesos. Es decir, no realizamos ninguna corrección en la posición de los dientes. Esto se debe a que entre los 6 y los 11 años por lo general no han erupcionado aún todos los dientes definitivos. Una vez que este proceso ha concluido se podrá comenzar un tratamiento de ortodoncia para corregir la posición dentaria. Ortodoncia (adolescentes y adultos): La diferencia fundamental entre la ortodoncia interceptiva y la que llevamos a cabo en adolescentes y adultos es que con esta última solamente podemos corregir la posición de los dientes. Es decir, ya no podemos realizar modificaciones en los huesos. Los tratamientos de ortodoncia que se pueden llevar a cabo para solucionar la sobremordida son mediante brackets (metálicos, de zafiro o linguales Incognito) o a través de los alineadores Invisalign. Como hemos mencionado anteriormente, cuando existe sobremordida es muy frecuente que también haya apiñamiento. Debido a las diferentes opciones de tratamiento ortodóncico y a que cada problemática debe estudiarse de manera personalizada, el ortodoncista es el profesional adecuado para determinar cuál es la alternativa más indicada.   INVISALIGN: ORTODONCIA SIN BRACKETS Cirugía ortognática (adultos): Aunque lo más frecuente es que la sobremordida pueda ser corregida únicamente mediante ortodoncia, existen casos en los que la causa de esta maloclusión es esquelética. Esto significa que dicha causa se debe a la posición de los huesos maxilares, es decir, a que el problema de mordida no se ha tratado adecuadamente durante la infancia. En los casos en los que la ortodoncia con brackets o con Invisalign no sea suficiente para corregir la mordida, se deberá recurrir a un tratamiento que combine la ortodoncia (normalmente con brackets) y la cirugía ortognática. La cirugía ortognática es una especialidad dentro de la Medicina que tiene como objetivo realizar correcciones en los huesos maxilares de pacientes adultos. Es decir, permite realizar cortes en los huesos para modificar su tamaño o posición. De esta manera, podemos adelantar la mandíbula o retrasar el maxilar superior. En cualquier caso, nuestra recomendación es la de acudir al ortodoncista en cuanto se aprecien los primeros síntomas de sobremordida. De hecho, nunca es demasiado pronto para acudir al ortodoncista, aunque no se haya advertido ningún síntoma. En caso de no advertir ninguna señal, mi consejo personal es llevar a los niños al ortodoncista a los seis años de edad. Si el desarrollo de los huesos es el adecuado, se podrá pautar una revisión un tiempo después para valorar si sigue siéndolo. Y, si se aprecian anomalías en el crecimiento, siempre será más sencillo solucionar cualquier problema de mordida en niños que en adultos, cuando sus maxilares están en fase de crecimiento. Como acabamos de ver, también es posible solucionar la sobremordida en adultos, pero la duración y la complejidad del tratamiento serán siempre mayores.

Cultura y curiosidades, Prevención

¿Cuál es el tratamiento para un flemón dental?

 El flemón o absceso dental es uno de los problemas bucales más comunes entre la población. De hecho, si has tenido la suerte de no padecerlo seguro que conoces a alguien que sí que lo ha sufrido. A pesar de la relativa frecuencia con la que se presenta, no deja de ser una de las afecciones más molestas y dolorosas para cualquier paciente. Dicho esto, ¿sabes cuáles son sus causas y qué debes hacer para evitar  que aparezca? ¿Qué es un flemón dental? Un flemón dental es una inflamación localizada en la encía producida por una infección bacteriana que se origina en un diente, accede a la pulpa y llega hasta su raíz. Cuando esto sucede, se forma un depósito de pus y se inflama el tejido blando de la zona. La importancia de eliminar la infección con un tratamiento odontológico adecuado reside en la capacidad de las bacterias de llegar hasta los huesos que soportan el diente. Lo más habitual es que el flemón tenga su origen en una caries no tratada, una periodontitis o un traumatismo. ¿Cuáles son sus causas? Las principales causas por las que puede aparecer un flemón son las siguientes: Caries no tratadas Enfermedad periodontal (periodontitis) Traumatismos que provocan la fractura del diente Para evitar la aparición de un absceso lo primero que debemos hacer es extremar nuestra higiene bucodental, lo que incluye el cepillado después de cada comida así como el uso de seda dental y enjuague. Además, es importante realizar visitas periódicas al dentista (una o dos veces al año) y estar atentos a cada señal que nos dé nuestra boca en forma de molestia o dolor. Ante cualquier indicio que tengamos, lo mejor es ser revisados por un profesional lo antes posible. Por ejemplo, es más sencillo y económico realizar un empaste que eliminar un flemón, ya que además de ser muy doloroso, suele conllevar un tratamiento farmacológico y una endodoncia.   COMO ES FLEMON DENTAL ¿Qué síntomas presenta un flemón? Aunque los síntomas pueden variar según la gravedad y el caso de cada persona, los más habituales son: Dolor intenso y punzante: normalmente aparece de forma repentina y puede manifestarse tanto en reposo como al morder o tocar la zona afectada Sensibilidad al ingerir bebidas o alimentos fríos o calientes Mal sabor de boca o halitosis Inflamación en la cara o las mejillas Malestar general Fiebre Dificultades al comer o abrir la boca ¿Qué tratamiento debo seguir? Si crees que tienes un flemón y padeces alguno de los síntomas anteriormente mencionados, lo más recomendable es que acudas a la consulta del odontólogo general lo antes posible. Te interesará »  Tengo infección de muela: ¿cómo la curo y qué complicaciones puede dar? Solamente de esta manera el profesional podrá determinar cuál es el origen del absceso y curar la infección mediante un tratamiento específico. De cualquier otra manera, no se eliminará definitivamente y volverá a aparecer reiteradamente. Lo más habitual es que el dentista actúe en dos fases para tratar el flemón: 1. En una primera consulta, el odontólogo receta antibióticos (para eliminar la infección) y antiinflamatorios (para quitar el dolor y la hinchazón) 2. En una segunda consulta, el dentista valora el efecto conseguido con el tratamiento pautado y determina si es necesario llevar a cabo un procedimiento adicional para tratar la causa que originó el flemón. En muchas ocasiones, es necesario realizar una endodoncia. Como puedes ver, el tratamiento para eliminar un flemón dental no es únicamente farmacológico sino que complementariamente se debe atacar la causa directa que provocó su aparición. Sin embargo, también es importante señalar que la infección debe haber remitido para cuando se realice dicho procedimiento adicional. Tratamiento para un flemón en la Clínica Dental SanCal Si necesitas tratamiento para un flemón dental puedes acudir a nuestra consulta para que valoremos tu caso. La Dra. Sánchez,  profesional especializada en Odontología General estudiará tu estado de salud bucodental y podrá poner solución al problema. Pide tu cita

Buenos hábitos, cirugía e implantes, Cultura y curiosidades, Prevención

¿Qué es la clorhexidina y para qué se usa?

¿La Dra. Sánchez, tu  odontóloga te ha recetado clorhexidina y no sabes muy bien qué es ni para qué se utiliza? Si es así sigue leyendo porque en el siguiente artículo te detallaremos los usos más importantes de un componente que se encuentra en múltiples enjuagues bucales, pastas de dientes, geles o sprays. La clorhexidina es una sustancia antiséptica muy utilizada en diferentes especialidades de la Odontología. Aunque este componente se encuentre en diversos productos, lo más habitual es que se presente en enjuagues bucales o colutorios. Entre sus múltiples usos, sirve para tratar enfermedades periodontales (gingivitis y periodontitis), prevenir las posibles infecciones derivadas de una cirugía bucal o curar pequeñas lesiones en los tejidos blandos de la cavidad oral. Su objetivo es eliminar e inhibir el crecimiento bacteriano presente en los tejidos vivos de nuestra boca. En otras palabras, podríamos decir que la clorhexidina funciona igual que cualquier otro desinfectante que conozcamos: reduce el riesgo de infección de una herida sin dañar la superficie sobre la que se aplica –encía y dientes en este caso-. La particularidad más importante en este caso es que en vez de actuar sobre una superficie inerte, como puede ser la mesa de una cocina, lo hace sobre el tejido vivo de nuestra boca. ¿En qué casos se utiliza este antiséptico? La clorhexidina puede ser pautada por tu odontólogo en diferentes casos. Lo más habitual es que sea recetada por este profesional para complementar o aumentar la tasa de éxito de tratamientos  llevados a cabo en las especialidades de Periodoncia e Implantología: Tratamiento de enfermedades periodontales Actúa como coadyuvante en los tratamientos para combatir la gingivitis o la periodontitis, así como en los programas de mantenimiento para evitar una nueva aparición de la enfermedad (recidiva) Cirugía periodontal, implantes o extracciones Se receta cuando el paciente se va a someter a una intervención quirúrgica que conlleve un alto riesgo de infección (cirugía periodontal, colocación de implantes o extracciones) Lesiones leves en la mucosa bucal Se utiliza para curar aftas, llagas o heridas que aparecen en los tejidos blandos de la cavidad oral La misión de la clorhexidina es actuar contra el crecimiento bacteriano presente en la cavidad oral ¿Cómo se usa la clorhexidina? La clorhexidina es un antiséptico de uso tópico, por lo que se aplica de manera externa y local. Además, dado que dicha aplicación debe estar pautada y controlada, es imprescindible que el tratamiento sea prescrito por un odontólogo. Aunque esta sustancia parezca inofensiva a primera vista y no tenga apenas contraindicaciones, un uso excesivo puede ocasiones efectos adversos. Entre otras cosas, puede dar lugar a una pigmentación u oscurecimiento superficial en dientes y encías o incluso a alteraciones en el sentido del gusto. Sin embargo, el aspecto positivo de estos efectos adversos es que son reversibles y cesan al dejar de utilizar la clorhexidina. Por ejemplo, la pigmentación puede desaparecer con una limpieza bucodental profesional. CLORHEXIDINA PARA IMPLANTES Y PERIODONCIA De hecho, el tratamiento con este tipo de antiséptico suele durar un máximo de 15 días y consiste sencillamente en aplicar la cantidad indicada por tu odontólogo o periodoncista. Ten en cuenta que si utilizas un enjuague con clorhexidina no debes rebajarlo con agua, ya que los colutorios están preparados con la proporción adecuada. Por lo general, se debe aplicar dos veces al día, durante un tiempo que varía desde los 30 segundos hasta un minuto. Su efecto permanece durante alrededor de 12 horas. De todas formas, las mencionadas son consideraciones generales. Las indicaciones más adecuadas para tu caso podrán ser proporcionadas por tu odontólogo. ¿Dónde comprar productos con clorhexidina? Si te han recetado clorhexidina, puedes comprarla en cualquier farmacia. Hoy en día existen multitud de marcas comerciales que cuentan con productos específicos que contienen esta sustancia. Por lo general, la clorhexidina se administra como enjuague bucal o colutorio. Sin embargo, también puede presentarse en gel, spray o pasta dental. Si después de haber leído este artículo tienes más dudas sobre la clorhexidina o su forma de administrarla puedes ponerte en contacto con nosotros en cualquier momento. Resolveremos todas tus preguntas sin compromiso. Pide tu cita

Ortodoncia

Las 7 fases o etapas de la ortodoncia

Todo tratamiento de ortodoncia tiene un proceso desde que acudes al dentista, hasta que tu problema dentario queda solucionado. Vamos a ver dichas etapas cómo y cuáles son: ¿A qué nos referimos con fases de ortodoncia? El proceso de ortodoncia es el conjunto de movimientos dentarios que se realizan para mejorar la estética, función y masticación de tu boca. Éste se divide en varias etapas hasta lograr la sonrisa deseada. ¿Cuáles son las etapas de la ortodoncia? En total la ortodoncia tiene 7 fases, una fase 0 en la que se realiza un estudio y otras 6 fases de ortodoncia activa. Fase cero de la ortodoncia, el estudio de ortodoncia Una vez realizada la primera consulta y elegido el tratamiento mas adecuado para el paciente, ya sean brackets metálicos u ortodoncia invisible como Invisalign. Lo primero que hay que confeccionar es un estudio de ortodoncia para determinar el diagnóstico preciso y poder elaborar el plan de tratamiento. Para ello el ortodoncista realizará: Evaluación del caso: la ortodoncista determina los problemas bucales que puedas tener: mordida, mandibulares, líneas medias… Radiografías: de los laterales del cráneo y panorámicas con las que podrá ver si hay infecciones, el estado de las raíces, y ausencia de muelas entre otras cosas.   RADIOGRAFIA PANORAMICA MORDIDA   Fotografías extraorales e intraorales: para analizar la simetría facial y malposiciones dentarias entre otras cosas.   EXTRAORALES ORTODONCIA Modelos de estudio: con la realización de impresiones con las que se realizará la aparatología, para tratamientos como incógnito o Invisalign. IMPRESIONES ORTODONCIA Una vez hemos colocado la aparatología (sea Invisalign, incógnito, brackets transparentes o brackets metálicos) se empieza a producir el movimiento de los dientes. Esto es lo que se conoce cómo fase activa del proceso de ortodoncia. La fase activa 1 – Alineamiento y nivelación El objetivo de esta fase es corregir las discrepancias verticales y el apiñamiento dentario. Para ello se utilizan fuerzas ligeras. Se corrige la mordida cruzada dentaria y se tracciona de dientes que no hayan salido. Esta etapa suele durar de 6 a 8 meses y tras su finalización las arcadas estarán niveladas y los dientes en línea. NIVELAR MORDIDA 2 – Corrección de la mordida y relación molar En esta fase se corrige la oclusión o mordida y se empiezan a encajar los dientes en su posición correcta en sentido anteroposterior y vertical. A veces es necesario utilizar elásticos (o gomas) como fuerzas externas para ayudarnos a corregir la mordida.   PROCEDIMENTO ORTODONCIA 3 –  Cierre de espacios Esta es la siguiente fase en la que se deben cerrar los espacios que hay entre los dientes una vez todo está alineado y colocado.   DIASTEMAS TRATAMIENTO ORTODONCIA 4 – Acabado y terminación Al comenzar esta fase los dientes deben estar alineados, los espacios deberán estar cerrados y la mordida debe estar en una relación correcta. En esta fase haremos pequeños ajustes de perfeccionamiento de la posición dentaria: Igualar las raíces y comprobar que todas queden paralelas. Ajustar pequeñas posiciones dentales individuales (pequeñas versiones o rotaciones que puedan quedar) Corregir pequeñas discrepancias de línea media para que la línea media superior e inferior coincidan. Realizamos el asentamiento final de los dientes. QUITAR BRACKETS 5 – Retirada de los aparatos Una vez consideramos que todos los objetivos se han conseguido: los dientes están alineados, no hay espacios entre los dientes, la mordida está corregida y la estética es correcta quitaremos los aparatos para pasar a la fase de retención. RETIRADA-ORTODONCIA 6 – Etapa de retención Es una fase muy importante ya que gracias a ella mantendremos los resultados conseguidos ya que los dientes tienen memoria y querrán volver a su posición anterior. Para ello pondremos retenedores fijos arriba y abajo y unas fundas transparentes que se utilizarán para dormir.   RETENCION ETAPA ORTODONCIA ¡Así los dientes se mantendrán perfectos para siempre! Si necesitas más información sobre todos nuestros tratamientos de ortodoncia, no olvides solicitar una primera cita, donde nuestros especialistas en ortodoncia el Dr. Arias estudiará tu caso y te ofrecerán la solución que mejor se adapte a tus necesidades, sin ningún tipo de compromiso. Pide tu cita

Buenos hábitos, Cultura y curiosidades

7 efectos de la menopausia en tu salud bucodental

Con una esperanza media de vida de 85 años, a las mujeres españolas no les queda otra opción que afrontar las consecuencias de la menopausia durante, aproximadamente, el 40% de su vida. Pero, a su vez, el aumento de dicha esperanza de vida provoca un incremento en la incidencia de enfermedades asociadas a esta etapa. El descenso en la producción de hormonas comienza a producirse entre los 45 y 55 añosde edad. Con ello, suelen aparecer los primeros síntomas de la menopausia: los conocidos sofocos, dolores de cabeza y la irritabilidad. Pero, además, esta época provoca una mayor propensión a sufrir problemas bucodentales. Esto sucede con la bajada de los niveles de estrógenos, que afecta directamente a las encías. De la misma manera, la reducción de progesterona provoca una disminución de la densidad ósea de la mandíbula, poniendo en riesgo el sustento de nuestros dientes. A pesar de todo, y gracias a los avances de la tecnología y la concienciación social, hoy en día las mujeres pueden disfrutar de unos dientes sanos hasta la ancianidad. Para ello, será necesario tener un cuidado especial con la higiene y visitar con regularidad al dentista. De esta manera, evitaremos muchos de los problemas que pueden aparecer con la llegada de la menopausia. Una gingivitis descamativa que no se trata deriva en una enfermedad más grave y que causa la caída de los dientes: la periodontitis Consecuencias de la menopausia en la boca A continuación, te vamos a detallar los efectos más frecuentes que tiene la menopausia en nuestra cavidad oral, especialmente en dientes y encías: 1. Gingivitis descamativa Se caracteriza por la separación de las capas externas de las encías hasta el punto de dejar la raíz del diente expuesta, provocando sensibilidad ante agentes externos como bebidas o comida caliente o fría. Además, la gingivitis descamativa provoca que el tejido gingival se enrojezca, duela y pueda aparecer sangrado, ya sea espontáneo o al cepillarnos los dientes. Si no se trata a tiempo, esta patología puede derivar en una periodontitis, que es una enfermedad más grave y más difícil de curar que provoca la caída de los dientes. En último lugar, y dejando a un lado los efectos sobre la salud, la gingivitis descamativa resulta antiestética, ya que al dejar la raíz del diente expuesta, se aprecia un diente demasiado largo. Por todos estos motivos, es recomendable mantener un control del estado de las encías, lo que implica acudir al dentista en cuanto observemos los síntomas que acabamos de mencionar.   SÍNTOMAS DE LA MENOPAUSIA 2. Xerostomía o sequedad bucal La secreción salival es importante debido a que ayuda a mantener húmedos los tejidos de la boca , lo que favorece que ésta esté más limpia y que se regule la cantidad de bacterias presentes en dicha zona del cuerpo. Sin embargo, durante la menopausia, las glándulas salivales segregan menos cantidad de saliva, lo que produce sequedad bucal. El hecho de tener la boca seca conlleva, por tanto, mayor probabilidad de desarrollar caries -o cualquier otro tipo de infección-. Además, genera distintas incomodidades tales como: dificultades a la hora de saborear alimentos, tragar o incluso al hablar; boca pastosa; sequedad de garganta; labios agrietados; lengua áspera, etc. Y, por último, ocasiona uno de los problemas bucales que más nos acomplejan: el mal aliento. 3. Síndrome de la boca ardiente El ardor bucal es uno de los problemas postmenopáusicos más comunes. Se caracteriza por provocar síntomas como un fuerte ardor, sensación de quemazón, escozor, hormigueo o adormecimiento de la lengua principalmente, aunque también puede darse en las encías y los labios. 4. Adelgazamiento de la mucosa bucal Como consecuencia de la reducción en la producción de hormonas, las mucosas de la boca, al igual que las de todo el cuerpo, se vuelven más frágiles y se debilitan. Para prevenir las alteraciones de la mucosa oral podemos llevar a cabo hábitos saludables tales como: cepillarnos los dientes después de cada comida, acudir regularmente al dentista (al menos una vez al año), evitar el consumo de tabaco y alcohol, etc. 5. Caries radiculares Las caries en la raíz del diente aparecen por un cúmulo de circunstancias que tienen lugar durante la menopausia. En primer lugar, contribuye a esto la gingivitis descamativa, ya que deja la raíz del diente expuesta a agentes externos, como restos de alimentos que se depositan en la zona y generan bacterias. En segundo lugar, la caries también encuentra en la sequedad bucal el ambiente propicio para desarrollarse. La escasez de saliva es perjudicial ya que la producción de ésta hace que la boca esté hidratada, más limpia y arrastre las bacterias, de manera que no se acumulan.     FUMAR AMARILLEA LOS DIENTES 6. Deterioro dental En general, el envejecimiento de las personas va unido a una pérdida del brillo y del blanco original de los dientes, que se vuelven más opacos y amarillos. Si, además, los dientes presentan desgastes y/o apiñamiento, la sonrisa da una sensación de mayor deterioro. 7. Periodontitis y pérdida de hueso Existen numerosos estudios que demuestran la relación directa que existe entre las enfermedades periodontales y la osteoporosis. Te interesará »  Tengo la boca seca, ¿cuáles son sus causas y cómo puedo evitarlo? Y es, precisamente, durante la menopausia cuando estos problemas se agravan, ya que la reabsorción de hueso que suele afectar a todo el organismo, afecta de igual modo a la boca. Al mermarse el hueso maxilar, se pone en riesgo la supervivencia de los dientes, ya que éstos pierden el soporte sobre el que se sostienen. Es por ello que si se padece una enfermedad periodontal o se tiene tendencia a padecerla, es necesario que un odontólogo especializado en Periodoncia lleve nuestro control. De esta manera, evitaremos, en la medida de lo posible, las complicaciones asociadas a estas enfermedades. Recomendaciones: importancia de la prevención Dado que la menopausia es una etapa inevitable en la vida de una mujer, también es muy probable que tengamos que experimentar algunos de los efectos asociados a este periodo. Sin embargo, no es menos cierto que está en nuestra mano disminuir parte de dichas consecuencias mediante determinados cuidados y rutinas saludables. Es decir, aunque no podamos prevenir por completo la aparición de todos los problemas mencionados, sí que podremos hacer esta época mucho más llevadera.   HIGIENE DENTAL DURANTE LA MENOPAUSIA Para que así sea, te ofrecemos los siguientes consejos: Lleva a cabo

Buenos hábitos, Prevención

Cómo solucionar la sensibilidad dental en 4 pasos

Estamos casi seguros de que la has sufrido alguna vez. Ya sea por una caries, por tener las encías retraídas, o por cualquier otro motivo, es probable que hayas experimentado sensibilidad dental. Y es que la sensibilidad en los dientes es una dolencia muy común entre la población general. Afecta a 7 de cada 10 personas adultas y suele aparecer entre los 18 y 40 años de edad, con una prevalencia mayor entre las mujeres.   ¿Qué es la sensibilidad dental? Esta dolencia -también  llamada hipersensibilidad dentaria- es un dolor breve aunque muy agudo que se produce en un diente concreto o en una zona de la boca que entra en contacto con un estímulo externo. Para ser más exactos, se produce cuando la dentina -parte interna del diente- queda expuesta y entra en contacto con estímulos térmicos (bebidas o alimentos muy fríos o calientes), químicos (sustancias dulces o ácidas) o táctiles (presión con los dedos, cepillado de dientes, uso de instrumentos odontológicos…).   ¿Cuáles son los síntomas de la sensibilidad en los dientes? El dolor producido por la sensibilidad dental es fácilmente reconocible y, a la vez, muy desagradable para quien lo experimenta. Podríamos decir que sus síntomas -y características- son los siguientes: Dolor muy intenso y localizado Responde a una reacción externa Desaparece en cuanto el estímulo deja de tener contacto con el diente o la zona sensible Si esta sensibilidad excesiva no fuera transitoria y persistiera tras el cese del estímulo externo, o no estuviese muy localizada, mi consejo sería que acudieras cuanto antes a la consulta de tu dentista. Esto se debe a que existiría la posibilidad de que padecieras algún tipo de enfermedad bucodental y, en dicho caso, tendrías que ser valorado por un odontólogo. De esta manera, podría realizar un diagnóstico adecuado.   ¿Cuál es el origen de la hipersensibilidad dentaria? El motivo por el cual padecemos sensibilidad en los dientes es porque la dentina -habitualmente protegida por la encía, el cemento radicular y el esmalte del diente- pierde dicha protección natural y queda expuesta a los estímulos externos. La dentina está compuesta por miles de tubos microscópicos, denominados túbulos dentinarios, cuya función es conectar la parte externa de los dientes con las terminaciones nerviosas de éstos. Por lo tanto, cuando la dentina queda al descubierto, los túbulos permiten que el calor, el frío o los ácidos de los elementos externos mencionados se reflejen en los nervios y células del diente, provocando los síntomas antes descritos.   Uno de los motivos más frecuentes de sensibilidad dental es la existencia de caries. Acude al dentista si notas molestias cuando te cepillas los dientes o comes alimentos y bebidas muy fríos o calientes ¿Qué causas provocan dientes sensibles? Ahora que hemos explicado el origen de la sensibilidad dental, vamos a detallar las causas por las que la dentina puede quedar expuesta a los estímulos externos. En la mayoría de ocasiones, esto puede darse debido al estilo de vida y los hábitos de higiene de las personas. Dicho esto, las causas de los dientes sensibles son las siguientes: Te interesará »  Los tres peores efectos del tabaco en tu salud bucodental 1. Caries Cuando una caries atraviesa el esmalte y llega hasta la dentina, sentiremos una gran sensibilidad ante los alimentos fríos, calientes o ácidos. Solución: realizar un empaste dental tan pronto como advirtamos la caries. 2. Dientes rotos o astillados Al igual que en el caso de la caries, cuando un diente se rompe, y la fractura alcanza la dentina, aparecerá la sensibilidad dental. Solución: colocar una corona. 3. Empastes desgastados Cuando un diente que ha tenido caries se empasta, puede suceder que con el tiempo el empaste se vea desgastado por un cepillado agresivo o por la erosión causada por productos particularmente ácidos. En esos casos, la dentina vuelve a verse expuesta provocando la sensación de dientes sensibles. Solución: será necesario que el dentista revise el empaste antiguo y vuelva a realizarlo. 4. Encías retraídas La retracción de encías puede deberse a un cepillado agresivo o a una enfermedad periodontal (periodontitis). En cualquier de los casos, la retracción deja expuesta la raíz del diente, que es muy sensible y habitualmente está protegida por la encía. Sin embargo, la solución a la sensibilidad dental provocada por las encías retraídas dependerá de cada caso. Solución: si se debe a un cepillado agresivo, se podrá realizar un injerto de encía. Sin embargo, si la causa es una periodontitis, lo primero que habrá que hacer es ponerse en manos de un periodoncista para que paute un tratamiento periodontal que frene la enfermedad. 5. Esmalte dental desgastado El esmalte dental puede desgastarse debido a varios factores: el uso de una pasta muy abrasiva combinado con un cepillado muy agresivo, el hábito de apretar o rechinar los dientes (bruxismo) o la costumbre de ejercer demasiada fuerza durante la masticación. Solución: dado que el esmalte de los dientes no se regenera, será necesario realizar una restauración sencilla con composite, colocar una carilla de porcelana o composite o poner una corona (si el desgaste es muy agresivo). En el caso de las personas bruxistas, será fundamental fabricar, además, una férula de descarga -tipo Michigan- para que el paciente la utilice por las noches. 6. Erosión dental por ácidos El consumo habitual de alimentos y bebidas muy ácidas (zumos de cítricos, refrescos…) puede provocar la erosión del diente o la descalcificación del mismo dejando vía libre a los túbulos dentinarios. Solución: para evitar que la sensibilidad dental aumente será muy útil restringir el consumo de comidas ácidas. Y, además de esto, el dentista deberá valorar el grado de erosión, para determinar si hay que llevar a cabo algún tipo de restauración. 7. Tras un empaste dental Una vez retirada la caries y realizado el empaste, el diente empastado podrá sufrir una sensibilidad excesiva. Esto se debe a que el relleno que se utiliza produce una pequeña contracción al solidificarse, lo que, a su vez, provoca una tensión en el diente que se refleja en el nervio. Solución: la hipersensibilidad cesa con el paso de los días. 8. Después de un blanqueamiento dental Los productos que se utilizan a la hora de realizar un blanqueamiento dental pueden hacer que los dientes se vuelvan sensibles durante un periodo de unas dos semanas. Solución: el dolor después de un blanqueamiento dental se calma por sí mismo. Pero, si no lo puedes aguantar, te recomiendo que consultes con tu dentista, médico o farmacéutico el uso de un analgésico. 9.

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¿Qué pasa si pierdo un diente y no lo repongo?

Has perdido alguna pieza dental? Pues ten en cuenta que… Es necesario reponer el diente perdido… …para evitar que se descoloquen los dientes… Tras el proceso de cicatrización de la encía (unos 2-4 meses) tras la extracción de un diente o muela, los dientes vecinos, lentamente van a empezar a moverse. Los dientes antagonistas (los de la arcada contraria) van también a moverse y salirse de su propio hueco, para ocupar el espacio que antes correspondía al diente ausente. Los dientes de los lados van a empezar a inclinarse hacia el hueco dejado. Cómo puedes ver la pérdida de una pieza dental no solo afecta al propio hueco que queda libre, sino también al resto de piezas que se localizan a su alrededor. …y evitar la pérdida de hueso Esto hace que engranemos de manera diferente, por lo que aceleramos el desgaste de los dientes que todavía quedan en boca, podemos provocar caries y periodontitis y pueden producirse incluso problemas no bucales, como por ejemplo problemas de articulación mandibular (aunque es menos frecuente). La encía también se ve afectada, perdiendo volumen debido al trabajo directo que se ejerce sobre ella al masticar. Lo ideal, para que no se desgasten los dientes y mantener la oclusión intacta es que, tras el período de cicatrización, se reponga el diente perdido con un implante. Consecuencias de la pérdida de un diente Existen diferentes posibilidades para reponer los dientes perdidos con implantes dentales Las posibilidades de colocación de implantes dentales son muchas, pudiendo incluso recuperar los dientes en el día: Implantes dentales con carga inmediata: dientes en el día. En la actualidad son el tratamiento más avanzado para la reposición de piezas dentales perdidas, no sólo por su rapidez en la operación, sino por su facilidad de recuperación. Implantes dentales completos: Implante + Corona.  Los implantes dentales completos, son una variante de los anteriores, en este caso son más tradicionales, aunque igualmente efectivos. Implantes dentales en toda la boca: en este caso, los implantes dentales en toda la boca, son aquellas prótesis dentales, que se hacen en pacientes que han perdido todas las piezas dentales de su boca. Reponer un diente es aún más fácil teniendo en cuenta las facilidades de pago que ofrecemos a nuestros pacientes en la Clínica Dental SanCal en Tres Cantos (Madrid). Solicita una consulta con la Dra. Sánchez, nuestra especialista en implantes dentales y periodoncia. Pide tu cita

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¿Sabes cuál es la enfermedad bucodental más común y cómo prevenirla?

Al igual que ocurre con otras partes de nuestro cuerpo, debemos proporcionar a la boca unos cuidados específicos con el objetivo de mantener unos dientes y encías sanos de por vida. Sin embargo, también es verdad que hay determinadas enfermedades que tienen una gran prevalencia entre la población y tienen más posibilidades que otras de aparecer en algún momento de nuestra vida. Este es el caso de la caries: no solamente es el problema bucodental más común, sino que además es la segunda enfermedad más habitual en España, por detrás del resfriado.   ¿Cuáles son las enfermedades bucodentales más comunes? 1. Caries Como acabamos de mencionar, de todas las enfermedades que comprometen nuestra salud en general, la caries es la segunda más común.  Se estima que afecta al 90% de la población mundial, por lo que es probable que la padezcas o hayas padecido. En la mayoría de ocasiones, la caries aparece en niños y adultos jóvenes, aunque puede desarrollarse a cualquier edad. El origen de la caries está en la destrucción de tejidos del diente, que tiene lugar como consecuencia de diferentes factores. Estos desencadenantes están relacionados fundamentalmente con los hábitos de higiene y nutrición: acumulación de placa bacteriana, consumo de azúcares y ácidos presentes en muchos alimentos y bebidas, higiene bucodental deficiente… Además, hay algunas personas que tienen mayor predisposición genética a padecer caries. Sin embargo, éste es un factor que influye en menor medida. De la misma manera que la enfermedad aparece de manera muy frecuente, el tratamiento para combatirla es sencillo: el empaste u obturación. Este procedimiento consiste en limpiar la cavidad del diente en el que se encuentra la caries para posteriormente rellenarla con composite. Dicho esto, es muy importante tratar la caries cuando muestra sus primeros síntomas: dolor o molestias en los dientes, especialmente al ingerir alimentos y bebidas dulces así como muy calientes o frías. Si la caries se deja avanzar, dañará más el diente y requerirá una endodoncia, que es un tratamiento más complejo que el empaste u obturación. Y, si no se trata, a la larga provoca la pérdida de dientes. No hay que olvidar que la caries es la primera causa de pérdida prematura de dientes en personas jóvenes. La caries es la enfermedad bucodental más común y la primera causa de pérdida prematura de dientes. 2. Gingivitis Al igual que en el caso de la caries, la higiene juega un papel fundamental en la aparición de la gingivitis. La gingivitis se caracteriza por la inflamación y el sangrado de las encías provocados por las bacterias que se desarrollan debido a la acumulación de placa bacteriana.     INFLAMACIÓN Y SANGRADO DE ENCÍAS Los síntomas que provoca esta enfermedad son, por tanto, muy claros. El sangrado que aparece durante el cepillado es la primera señal de alarma. Si te sucede, visita a tu dentista lo antes posible, ya que si la gingivitis es tratada a tiempo, es muy fácil de combatir. Su tratamiento consiste fundamentalmente en una limpieza bucodental profesional y en extremar las técnicas de higiene en casa. Sin embargo, si no se trata a tiempo, a la larga comienza a afectar al hueso y deriva en una periodontitis. Tal y como explicaremos en el punto siguiente, esta enfermedad bucodental es mucho más compleja. Como muestra de la prevalencia de la gingivitis entre la población, se estima que en España solamente el 14.8% de los adultos de entre 35 y 44 años tiene las encías sanas. Por su parte, el 59,8% tendría gingivitis y el 25,4% periodontitis. En individuos mayores de 65 años, el porcentaje de encías sanas es aún menor: 10,3%. El resto tiene una enfermedad periodontal: 51,6% tendría gingivitis y el 38% tendría periodontitis.   3. Periodontitis Tanto a la gingivitis como a la periodontitis se les conoce con el nombre de enfermedades periodontales. Como ya hemos mencionado en el punto anterior, la periodontitis es la consecuencia de una gingivitis que no ha sido tratada correctamente.     GINGIVITIS VS PERIODONTITIS Aunque la periodontitis también se puede curar, su tratamiento es más complejo que el de la gingivitis. Éste requiere, entre otros, mediciones para comprobar la profundidad del sarro acumulado en las encías, análisis microbiológico, raspado y alisado radicular, etc. Es precisamente por la mayor complejidad del tratamiento por lo que se recomienda acudir a un periodoncista nada más advertir los primeros síntomas de la gingivitis (inflamación y sangrado de las encías). Si se deja progresar la enfermedad, las bacterias causarán cada vez un daño más profundo y llegarán al hueso, que no hay que olvidar que actúa como soporte del diente. De esta manera, aparecerán otras señales de alarma: mal aliento, recesión de encías, aparición de triángulos negros entre los dientes, movilidad de piezas dentales… Todo esto llevará a consecuencias irreversibles: si se causa un daño progresivo en el hueso que soporta el diente, a la larga se producirá la pérdida de dientes.   4. Cáncer bucal El cáncer oral o bucal se produce con mayor frecuencia en los labios y la lengua. Sin embargo, también desarrollarse dentro de la boca y comprometer las encías, el paladar y la garganta. Aunque cualquier persona (de cualquier edad y sexo) puede padecer cáncer oral, éste afecta en mayor medida a los hombres mayores de 40 años. Bien es cierto que la genética juega un papel esencial en el desarrollo del cáncer. Sin embargo, existen otros factores de riesgo muy importantes. Estos son el tabaquismo y el alcohol. Como en cualquier otra enfermedad, la detección temprana es fundamental en el éxito del tratamiento. Por eso, es importante saber identificar los primeros síntomas y acudir a revisiones regulares con el dentista. Dichos síntomas pueden ser: Úlceras o llagas en la lengua, los labios o cualquier otra parte de la boca Manchas blancas o rojas en la lengua, en las encías o cualquier otra parte de la boca Problemas o dolor al masticar o deglutir Dificultades en el habla Dolor en alguna parte de la boca, sin explicación aparente No hay que olvidar que a pesar de que conozcamos determinados síntomas, el odontólogo es el profesional que cuenta con mayor experiencia y conocimientos para advertirlos.   5. Halitosis El mal aliento o la halitosis comprenden el conjunto de olores desagradables que se emiten a través de la boca. Existen dos tipos de halitosis: oral y extraoral. En el 90% de los casos, el mal aliento tiene su origen en la propia boca. En estos casos, el olor desagradable se debe fundamentalmente a una higiene deficiente, el tabaco o enfermedades periodontales (gingivitis y periodontitis).

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