Clínica Sancal

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Buenos hábitos

La importancia de la nutrición en la salud bucodental

La alimentación está muy relacionada con la salud bucodental. Hay alimentos que son muy saludables y también hay otros pueden perjudicar los dientes y las encías. Por ello la alimentación también tiene un papel destacado en la prevención de patologías como la caries dental. Mantener una dieta equilibrada es importante para la salud general. También para mantener la sonrisa sana. Del mismo modo también es fundamental mantener un estilo de vida sana. Es decir, de nada sirve una buena dieta si consumimos mucho alcohol o fumamos. Este tipo de hábitos perjudiciales están relacionados con las patologías orales más graves, como el cáncer oral. Nutrición y salud bucodental Hay algunos alimentos que son perjudiciales para la salud bucodental, como los que son azucarados y los ácidos. Este tipo de alimentos erosionan el esmalte y favorecen la acumulación de placa bacteriana. En el caso de los niños es fundamental moderar alimentos como los caramelos, los pasteles y demás dulces, ya que contribuyen al desarrollo de la caries dental. La caries es la patología oral más común a nivel mundial, según varios estudios. Algunas bebidas como el café, el té o el alcohol también son muy perjudiciales para dientes y encías, por lo que conviene evitarlos. Respecto los ácidos, se recomienda evitar en exceso los alimentos cítricos como algunos zumos. No obstante también hay alimentos saludables para la cavidad oral. Es el caso de las frutas, los lácteos, las hortalizas y los frutos secos. Las frutas y las verduras son ricas en agua y fibra, de modo que ayudan a equilibrar los azúcares y además estimulan la producción de saliva. La salivación es muy importante para eliminar algunas bacterias de la cavidad oral. Después de cada comida es muy importante eliminar los restos de los alimentos y las bacterias que se acumulan en la cavidad oral. Para ello conviene realizar una buena limpieza bucodental. Hablamos de un cepillado y también del uso del enjuague bucal y del hilo dental. Para una limpieza más profunda, también es recomendable el uso del irrigador bucal. También es importante que la pasta dental o el colutorio contengan flúor, ya que ayuda a remineralizar el esmalte. También recomendamos establecer una rutina clara de alimentación. El hábito de picar entre horas puede ser muy perjudicial para los dientes y las encías. Esto se debe a que los alimentos más consumidos entre horas son muy azucarados. El azúcar favorece la formación de sarro y la acumulación de placa bacteriana en la cavidad oral. Por ello también es recomendable acudir con regularidad a la consulta y someterse de vez en cuando a una limpieza dental profesional. En la clínica dental SanCal ofrecemos tratamientos personalizados, para obtener los mejores resultados con tu sonrisa.

Cultura y curiosidades, Ortodoncia

¿Cómo saber si los niños necesitan ortodoncia?

La ortodoncia permite corregir la posición defectuosa de los dientes. Este tratamiento persigue fines estéticos y funcionales para la sonrisa. Aunque es habitual comenzarlo en la adolescencia, hay muchos casos de ortodoncia durante la infancia. Hay diferentes tipos de ortodoncia, en función de diversos aspectos. Los aparatos pueden ser fijos o removibles. Los aparatos fijos sólo son manipulables por el odontólogo y suelen ser los brackets tradicionales. Los aparatos removibles pueden ser retirados para comer y para la higiene oral. en el caso de los niños, la ortodoncia más habitual suele el uso de brackets. Pero el odontopediatra valorará qué tipo de tratamiento es el más indicado en función de las necesidades del niño. Cómo saber si los niños necesitan llevar ortodoncia Pero, ¿Cómo saber si tu hijo necesita ortodoncia? Hay varias señales que indican la necesidad de realizar un examen de ortodoncia temprana: Pérdida de los dientes. Los dientes de leche comienzan a caer a partir de los 5 años. En general, a los 13 el niño ya tiene los dientes definitivos. La caída de los dientes demasiado pronto puede indicar la necesidad de llevar ortodoncia. También el retraso en la pérdida de las piezas dentales. Problemas bucodentales. Hablamos de problemas bucodentales a nivel funcional. Es necesario que el niño lleve ortodoncia si tiene dificultad para hablar, masticar y morder. Hábitos en la infancia. El uso del chupete o chuparse el dedo pueden interferir en la posición de los dientes. Estos hábitos están relacionados con la necesidad de llevar ortodoncia. Posición de los dientes. Los dientes demasiado espaciados favorecen la acumulación de placa bacteriana. También los dientes sin espacio o apiñados requieren aparatos. Mordida defectuosa. La mordida es defectuosa cuando los dientes de la arcada inferior sobresalen por delante de la arcada superior. En ese caso, la mordida no es funcional y debe ser corregida mediante la ortodoncia. Como padres siempre buscamos lo mejor para nuestros hijos y su salud es lo más importante para nosotros. Durante su crecimiento debemos dedicar especial atención a fijarnos en aquellas zonas de su cuerpo que podrían no desarrollarse adecuadamente: por ejemplo la vista, la espalda, los pies o, en el caso que nos ocupa, los dientes. Si el remedio para la vista son las gafas, el de la espalda el corsé y el de los pies son las plantillas, para arreglar la dentadura tenemos la ortodoncia. Actualmente la gran mayoría de niños la llevan, la han llevado o la llevarán y los avances han hecho los aparatos más cómodos y estéticos. Pero para llegar al tratamiento primero hace falta realizar el diagnóstico. Está claro que llevaremos a los niños a las revisiones pertinentes del dentista, pero desde casa podemos empezar a pensar en si existe la posibilidad de que necesiten brackets. Si tienes dudas, estas pistas te pueden decir si tu hijo o hija necesita aparato dental: 1. LOS DIENTES ESTÁN TORCIDOS O SUPERPUESTOS Hay varias razones por las que los dientes tienen estas características nocivas: puede ser que sean demasiado grandes para el espacio de la boca o la boca sea demasiado pequeña para los dientes. La mala formación de las encías y las mandíbulas también pueden perjudicar al correcto crecimiento de los dientes, así como los dientes que deberían haber salido pero todavía no lo han hecho. En muchas ocasiones se trata de causas hereditarias. 2. LA MANDÍBULA SUPERIOR E INFERIOR SON DE UN TAMAÑO DEMASIADO DIFERENTE El nombre científico para este caso es ‘maloclusión’: si la mandíbula superior es mayor que la inferior el término que se utiliza es ‘sobremordida’, y si es el caso contrario se llama ‘submordida’. Estos casos provocan el desgaste de los dientes frontales y algunas veces dolor en el paladar. Para corregir esta malformación será necesaria la colocación de la ortodoncia. 3. MOTIVOS HEREDITARIOS Muchos problemas dentales son hereditarios, por lo que si la madre o el padre del niño tiene necesidad de llevar aparato dental o lo ha llevado, es bastante probable que los hijos también lo necesiten. Los problemas que se pueden heredar son la incompleta formación del esmalte dental, la enfermedad de las encías o la falta de alguno de los dientes. Otros inconvenientes como las caries o el sarro también pueden ser hereditarias, pero son de fácil solución si se lleva una higiene buco-dental óptima. 4. EL NIÑO HA UTILIZADO DEMASIADO EL CHUPETE O SE CHUPA EL DEDO El repetido uso de accesorios como el chupete o la succión del dedo pulgar pueden llevar a la malformación de los dientes. Para que no se llegue al caso en el que sólo se pueda arreglar con aparato, hay que retirar el chupete antes de los 3 años de edad. Otra manera de evitar que los dientes se desarrollen de manera equivocada pero sin quitar el chupete es dejar que lo utilicen menos de 6 horas al día. A partir de los 7 u 8 años es cuando debemos consultar con el dentista la necesidad de aparato dental. La edad recomendada para visitar al dentista y consultarle sobre el aparato dental es alrededor de los 7 u 8 años. Esto no significa que el niño vaya a llevar brackets a partir de ese momento, simplemente es el primer paso en el posible plan para que los lleve en un futuro. Si estamos con la duda o si los especialistas ven durante una revisión que puede haber un problema en el desarrollo, también se puede tener en consideración la colocación de la ortodoncia cuando el niño aún tiene los dientes de leche. De esta forma se podrá prevenir la malformación de la dentadura. Una vez sepamos si nuestro hijo o hija necesita ortodoncia y si el caso es afirmativo, en qué edad, habrá que conocer cuál es el mejor tipo de aparato dental para él o ella. Después de la ortodoncia, es fundamental que los niños sigan la fase de retención. Esta fase posterior al tratamiento consiste en llevar los aparatos retenedores, que mantienen los resultados e impiden que los dientes vuelvan a su

Buenos hábitos

Trucos para evitar el sarro entre los dientes

Mantener una buena rutina de higiene bucodental es importante para mantener la boca sana. El cepillado, así como el colutorio o el hilo dental, son técnicas que permiten eliminar los restos de comidas y bacterias. Eliminar estos restos es fundamental para evitar el endurecimiento de la placa, que se puede pegar entre dientes y en la línea de las encías, lo que se conoce como sarro. ¿Cómo evitar la acumulación de sarro? El sarro se pega en los espacios entre dientes y puede dañar algunas restauraciones dentales. También altera la estética de la sonrisa. Si no se elimina con rapidez, el sarro cada vez se va endureciendo más. Esto favorece el desarrollo de complicaciones como la caries dental y las enfermedades periodontales. En este punto, sólo puede ser eliminado por el odontólogo. ¿Cómo evitar el sarro entre mis dientes? Te damos algunos trucos para evitar la formación de sarro entre los dientes. Frecuencia del cepillado. Cepillarse los dientes una vez al día es el primer paso para el desarrollo del sarro. A lo largo del día realizamos distintas comidas. También exponemos la cavidad oral a distintos ataques u objetos externos. Por ello es importante lavar los dientes un mínimo de dos veces al día, con una duración entre dos y tres minutos. Pastas dentales. En la actualidad hay mucha variedad de pastas dentales. También hay pastas dentales para combatir la formación de sarro. En este sentido conviene incorporar a la pasta o el colutorio la presencia de flúor. Este mineral contribuye a fortalecer el esmalte. Este tipo de pastas dentífricas ayudan a prevenir la formación de la placa y su transformación en sarro. Además, el flúor que contienen algunas pastas, reparan el daño del esmalte dañado de los dientes. Limpieza interproximal. Hablamos de la limpieza de zonas más difíciles que la superficie dental, como los espacios entre los dientes. También el espacio entre la encía y la pieza dental. Este tipo de espacios son susceptibles a la formación de sarro, especialmente si sólo se limpian con el cepillo. Por ello los profesionales de PropDental recomiendan limpiar este tipo de zonas con utensilios específicos, como el hilo dental. Limpiar las zonas difíciles es el primer paso para evitar la presencia de sarro en la cavidad oral. Vigilar la alimentación. Algunos alimentos, como los azucarados, influyen en la formación y acumulación de placa bacteriana de forma directa. Por ello conviene seguir una dieta equilibrada y una rutina de higiene bucodental adecuada. Hábitos perjudiciales. Uno de los hábitos perjudiciales que más se ha relacionado con el sarro es el tabaquismo. Fumar o mascar tabaco contribuye a su endurecimiento, de modo que sólo un odontólogo puede eliminarlo. El mejor modo de evitarlo es mantener un estilo de vida saludable.

Buenos hábitos

¿Cómo cuido mi boca si estoy de viaje?

¿Te vas de viaje durante este puente? No descuides tu salud bucodental. Cuando estamos de viaje a menudo probamos nuevos tipos de comida, alteramos nuestra rutina y esto puede provocar un descuido de la higiene oral… ¿Cómo cuidar la boca durante un viaje? El primer paso es realizar una buena prevención antes de irse. Una buena prevención no sólo se basa en cuidar los dientes a diario, también en acudir con regularidad al odontólogo. Por ello, los profesionales de la clínica dental SanCal recomiendan acudir a la consulta poco antes de ir de viaje. Mediante una exploración profunda de la cavidad oral, la Dra. Sánchez puede detectar los primeros síntomas de una patología bucodental, como la caries o la gingivitis. Detectar este tipo de patologías en sus primeras fases es fundamental para un tratamiento rápido y de éxito. No obstante, en caso de emergencia dental lejos de casa, puedes resolverlas por teléfono con tu dentista de confianza, para aclarar si puede esperar hasta el final del viaje. También se recomienda buscar una segunda opinión en el mismo lugar. También es muy importante llevar encima un pequeño kit de higiene oral, ya que muchas comidas se suelen hacer fuera del lugar de alojamiento. Existe una gran variedad de cepillos y pastas dentales portátiles, con un tamaño reducido para que sea cómodo llevarlas de viaje. Se recomienda llevar un cepillo y una pasta dental de calidad, ajustada a la situación de la boca, así como enjuagar el cepillo con agua antes de lavar los dientes. Además, es necesario transportar el equipo de limpieza en condiciones óptimas. Mantener el cepillo limpio y alejado de otros productos es muy importante para que la limpieza sea eficaz. Después de usarlo, se recomienda dejar que se seque al aire. En caso de que el destino del viaje sea un entorno natural o rural, es muy importante comprobar que el agua usada para la higiene oral es potable. En caso contrario se recomienda realizar la limpieza con agua embotellada. Si de forma accidental mojamos el cepillo en otra agua, se recomienda reponerlo. Rutina de higiene oral durante el viaje A pesar de no comer en casa, hay diversas pautas a seguir para mantener una buena higiene bucodental: Cepillado: Es muy importante que la base de la limpieza oral sea el cepillado, durante un mínimo de dos minutos. Después de cada comida se recomienda esperar unos 20 minutos para que la limpieza sea más profunda. No obstante, en caso de no disponer de mucho tiempo conviene insistir en zonas susceptibles de acumulación de biofilm oral o placa bacteriana. Mascar chicle: Para situaciones puntuales también es recomendable el uso del chicle sin azúcar. Varios estudios han demostrado que mascar chicle después de una comida puede ayudar a prevenir la caries, porque estimula el flujo de saliva. No obstante, la Dra. Sánchez recomiendan el cepillado como técnica principal de limpieza, siempre que sea posible. Vuelta a casa: después del viaje es importante retomar la rutina de higiene habitual. Además del cepillado, se recomienda usar a diario el hilo dental, interdentales y el enjuague bucal.

Buenos hábitos, Prevención

Qué es la halitosis y como prevenirla

¿Qué es la Halitosis? La halitosis más conocida como el mal aliento.  Lo suelen provocar bacterias. La producción de sustancias malolientes, los más frecuentes los Compuestos Volátiles de Sulfuro (CVS), se asocia a los productos resultantes de la degradación del metabolismo de las bacterias, generalmente las bacterias anaerobias gram-negativas, que se localizan principalmente en la zona posterior del dorso de la lengua y en otras localizaciones como bolsas periodontales.  Gran parte de la población casi el 60 % tiene halitosis oral el 15% tiene halitosis por problemas de fuera de la cavidad oral ( por enfermedades ) y un porcentaje del 25% tiene problemas de halitosis que necesitan tratamientos específicos. Podemos diferenciar dos tipos de halitosis: HALITOSIS ORAL por acumulación de placa bacteriana, caries, problemas periodontales, hábitos como el tabaco y que provoca mal olor y se podría solucionar con una buena higiene. Y acudiendo al dentista para que nos ayude a tener buena higiene y que desaparezca el mal olor. HALITOSIS que se encuentra fuera de la cavidad oral suele ser producida por el estrés/ansiedad , enfermedades renales , hepáticas, del aparato digestivo … Las causas de la halitosis: Hay diversidad de causas para el mal olor, en la mayoría de los casos con una buena higiene, con buena alimentación y acudiendo al dentista una vez al año se podrían evitar. El momento en el que hay mal aliento, más común en la población, es al levantarnos. Llevamos muchas horas con la boca cerrada se reduce la cantidad de saliva y aumentan las bacterias mal olientes. El cuidado de las prótesis dentales para que no produzcan mal olor; hay que limpiarlas correctamente. Hay medicamentos que nos provocan que la boca quede seca y eso hace que haya mal olor. ¿Cómo se puede evitar? Consejos El tratamiento de la Halitosis dependerá de la causa por la que se produzca, si no es por ninguna enfermedad algunos consejos para evitar el mal olor son: Evitar tabaco, alcohol, café. Evitar alimentos intensos como el ajo , cebolla … Beber mucha agua para ayudar a producir saliva. Tener una buena higiene bucal es muy importante. Los pasos para una correcta higiene bucodental. Utilizar seda dental para eliminar los restos de comida, después de cada comida. Lavarse los dientes después de cada comida. Utilizar colutorio durante 40 segundos y no tomar nada en unos 30 minutos. El masticar chicle sin azúcar ayuda a producir saliva , algunos chicles contienen Xilitol y tiene un efecto bacteriostático que hace que se neutralicen los ácidos y evita la formación de placa. Acudir al odontólogo para que limpie el sarro y arregle las piezas dentales en mal estado. La prevención y el tratamiento es muy beneficioso para la salud bucal, además de posibilitar una sonrisa sana y agradable. Mantener una boca sana es fundamental para prevenir las enfermedades periodontales. Los dientes definitivos son únicos y por ello aconsejamos mantenerlos en buen estado para lucir una sonrisa sana y bonita durante toda la vida.

Cultura y curiosidades, Prevención

Prevención de las enfermedades periodontales

Las enfermedades periodontales conllevan una infección en las encías y los huesos que sostienen los dientes. Aunque tienen un origen similar, sus consecuencias y tratamientos pueden variar en función del nivel de gravedad. ¿Cómo prevenir las enfermedades periodontales? Una detección a tiempo es fundamental para evitar el desarrollo de las enfermedades periodontales. No obstante, también es muy importante realizar una buena prevención de estas patologías. Esto ayudará a mantener la boca protegida. Las principales enfermedades periodontales son la gingivitis y la periodontitis. La gingivitis consiste en una inflamación y enrojecimiento de las encías. En la mayoría de los casos se debe a la acumulación de placa bacteriana entre las encías y las piezas dentales. Aunque es reversible, si no es detectada o tratada a tiempo puede evolucionar a la periodontitis. La periodontitis, también conocida como piorrea, suele ser irreversible. Además de la inflamación y el sangrado, el paciente puede notar halitosis e incluso movilidad de los dientes. En sus fases más avanzadas, la periodontitis conlleva la pérdida de la pieza dental. Hay varios factores que influyen en el desarrollo de las enfermedades periodontales. Además dela herencia genética, la alimentación y la rutina de higiene oral son decisivas para realizar una buena prevención. Claves para prevenir las enfermedades periodontales Existen diversas pautas para evitar el desarrollo de las enfermedades periodontales: Rutina de higiene bucodental. Mantener unos buenos hábitos de limpieza oral es imprescindible para prevenir las enfermedades periodontales. Esto consiste en cepillarse los dientes después de cada comida y durante dos minutos como mínimo. Alimentación sana. Mantener una dieta sana es importante para la salud general. También para la salud bucodental. Los alimentos que comemos influyen en el estado de nuestros dientes y encías. Por ello conviene evitar los alimentos muy azucarados y muy ácidos, ya que pueden erosionar las piezas dentales. Además el azúcar favorece la acumulación de biofilm oral, principal factor de desarrollo de las enfermedades periodontales. Cuidar la salud general. Varios estudios han demostrado la relación entre la periodontitis y la diabetes. Informar al odontólogo si se sufre diabetes. Mantener una buena salud general favorecerá una buena salud bucodental. Acudir con regularidad al odontólogo. Algunos síntomas de las enfermedades periodontales no son visibles a simple vista. Por ello conviene acudir a la consulta de forma frecuente. También se recomienda someterse a una limpieza dental profesional cada seis meses, aún si no se sintiera ninguna molestia en los dientes o encías. Utilizar un cepillo de dientes de cerdas suaves y redondeadas. Realizar un cepillado consciente y completo. Utilizar pastas dentales con fluoruro. Cepillarse la lengua. Usar hilo dental diariamente, si no sabe usarlo, pida a la Dra. Sánchez que le enseñe como hacerlo correctamente. No fumar. La prevención y el tratamiento es muy beneficioso para la salud bucal, además de posibilitar una sonrisa sana y agradable. Mantener una boca sana es fundamental para prevenir las enfermedades periodontales. Los dientes definitivos son únicos y por ello aconsejamos mantenerlos en buen estado para lucir una sonrisa sana y bonita durante toda la vida.

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Los beneficios de los selladores dentales para niños

La caries supone la enfermedad dental más habitual en aquellos niños que aún cuentan con las piezas temporales (dientes de leche). Si bien es cierto que estamos ante piezas que únicamente cuentan con una función temporal, no hay que olvidar que es imprescindible el buen cuidado de las mismas dada su labor estética y funcional durante la niñez así como también porque la pérdida prematura de estas piezas puede conllevar consecuencias negativas en la erupción de los dientes permanentes o definitivos. A continuación vamos a hablar del sellado dental en niños, considerada como una de las técnicas de prevención de la caries más eficaz y recomendable. ¿Te lo vas a perder? Caries | Sellado dental en niños Ya hemos advertido que la caries es la afección oral más popular entre los niños y esta situación se debe a diversos factores como la fragilidad de estas piezas o la falta de constancia relacionada con la rutina de higiene bucodental. Queda claro que extremar este hábito diario es la principal técnica de prevención de la caries y, en este sentido, hay que considerar la labor de los padres a la hora de instruir a sus hijos a practicar esta rutina diaria. Es momento ahora de mencionar el sellado dental como otra de las alternativas más útiles y eficaces a la hora de prevenir la caries, siendo este un proceso que se lleva realizando desde hace varias décadas y que consiste en sellar tanto las fosas como las fisuras que se localizan en las superficies masticatorias de los premolares y molares, con el fin de sellarlos de los alimentos y bacterias que producen la caries. De este sencillo modo estaremos protegiendo las zonas más propensas a desarrollar caries dado que es ahí donde se acumulan los restos de alimentos y placa bacteriana, causando el desgaste del esmalte y, posteriormente, la aparición de la caries dental. Según la Academia Americana de odontología pediátrica (AAPD), «la colocación de selladores en niños y adolescentes ha mostrado una reducción de la incidencia de caries del 86% después de un año y del 58% después de cuatro años.» Los selladores utilizados en conjunto con una rutina de cuidado dental integral, que incluye el correcto cepillado, hilo dental, tratamientos con flúor y una dieta saludable, ayudan a mantener la salud dental. Mientras que el cepillado y el hilo dental son componentes críticos de cualquier régimen de salud dental, los selladores proporcionan una protección adicional para las áreas de ranuras de dientes que se conoce como hoyo y caries de fisuras. ¿Cuáles son los dientes que deben estar sellados y cuándo? El número de dientes que deben sellarse depende de la incidencia de su hijo hacia la caries dental. La Asociación Dental Americana (ADA) recomienda que se sellen los dientes penetrantes primarios, que son los molares que erupcionan entre los 6 y los 12 años de edad. Cada diente, sin embargo, es susceptible a la caries. Para máxima protección, los selladores dentales deben aplicarse tan pronto como sea posible después de la erupción del diente permanente. Esto sería alrededor de los 6 años para la mayoría de los niños. ¿Quién aplica los selladores dentales? En cuanto al proceso podemos decir que estamos ante una intervención muy simple e indolora (no requiere el uso de anestesia local) donde se aplica una sustancia líquida en aquellas zonas del diente donde existe un riesgo elevado de caries, siendo necesario controlar el estado del sellado dental en las posteriores visitas al dentista. Una vez que se ha llevado a cabo la intervención no hay que olvidar continuar con las labores relacionadas con la higiene ya que la pieza tratada seguirá teniendo probabilidades de sufrir la caries. Problemas de salud La (ADA) publicó recientemente una declaración en respuesta a preocupaciones de los pacientes con respecto a la posibilidad de bisfenol A (BPA) en selladores dentales. La declaración de ADA refirió a un informe de 2008 preparado por el programa nacional de Toxicología que decía la exposición al BPA sellador dental «se considera un evento agudo y poco frecuente con poca importancia para estimar la exposición de la población en general”. La ADA indicó que los beneficios en la evitación de la caries resultante de los selladores, grandemente superan cualquier bajo nivel de exposición al BPA. Aun así, si usted está preocupado sobre la exposición a BPA, hable con la Dra. Sánchez antes de la aplicación de los selladores dentales. ¡Los selladores ayudan a prevenir la caries dental! Resumiendo podemos concluir diciendo que el sellado dental es una forma eficaz de prevenir la caries dental en niños, aunque también será de ayuda en pacientes adultos ya que el sellado se puede llevar a cabo en piezas definitivas. En Clínica dental SanCal aplicamos esta intervención a aquel colectivo de pacientes que tiene una mayor probabilidad de padecer caries.

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¿Puedo evitar el sangrado de las encías?

Pese a que mucha gente no lo sabe, unas encías sanas no tiene por qué sangrar. El sangrado de las encías suele ser, de hecho, el signo más evidente de que sufrimos enfermedad periodontal. Dicho de otra forma, esta es la principal evidencia de que el cuerpo está librando una batalla contra una infección en nuestras encías, que puede comprometer la salud de los tejidos periodontales. En el caso de sufrir sangrado de las encías, debes saber que no eres el único. Es más, existen algunos estudios que afirman que un porcentaje superior al 50% de la población general sufre algún tipo de infección en sus encías, pero esto no deja de ser preocupante, aquí el “mal de muchos, consuelo de tontos” deberá aplicarse. Para frenar el sangrado de las encías, vamos a darte diferentes formas de hacerlo. Allá van: Formas de frenar el sangrado de las encías Los dentistas recomiendan realizar una visita a la consulta del odontólogo de forma semestral, a fin de recibir un examen y una limpieza dental profesional. En caso de no acudir con esta regularidad al dentista y si sientes sangrado en tus encías, naturalmente es un signo inequívoco de que deberás aumentar la frecuencia con la que lo visitas. En estas visitas regulares, el dentista se encargarán de eliminar tanto la placa bacteriana como el sarro dental que es la que está causando esta infección en tus encías. El tratamiento periodontal es tu gran aliado. Debemos saber que las limpiezas dentales rutinarias han sido concebidas para aquellas personas que cuentan con una buena salud bucodental y gingival. Sin embargo, aquellas encías que estén infectadas necesitan un trato especial. Para este tipo de problemática, el curetaje y alisado radicular suele ser un procedimiento de elección a fin de lograr el ambiente idóneo para la recuperación, pese a que hay otros tratamientos para los casos que revisten una mayor complejidad, debido a la gravedad de su estadio. Cepillarte los dientes es también una necesidad indispensable que, por suerte, prácticamente todos hacemos a día de hoy. Pese a conocer la importancia, muchos de nosotros seguimos sin hacerlo durante el tiempo que esta rutina requiere, o las dos veces al día que debería hacerse. Un correcto cepillado dental necesita de dos minutos a fin de eliminar todas las partículas de comida y los restos de placa, y deberemos también limpiar nuestra lengua. Una buena técnica de cepillado dental es muy importante, y es que la técnica resulta indispensable para limpiar correctamente nuestra dentición y evitar el dañarla. Contar con un cepillo de dientes que tenga las cerdas blandas, así como emplear una pasta dental que contenga flúor y una técnica de limpieza oral que consista en limpiar los dientes mediante movimientos circulares, alcanzando dientes encías, es fundamental. En el caso de tener dudas, tu dentista de confianza podrá ayudarte, enseñándote la mejor técnica de cepillado dental para ti. Asimismo, un buen enjuague con poder antibacteriano es fundamental. Como sabemos ya, el sangrado de las encías es un signo inequívoco de que éstas están infectadas, y esta infección es causada por las bacterias. Los colutorios o enjuagues que cuentan con poder anti – bacteriano son muy útiles a la hora de reducir el número de bacterias que se acumulan en la boca, pese a que en ningún caso deberán emplearse como sustitutivos de las demás técnicas de higiene dental Otra parte fundamental es informarnos sobre el problema que padecemos. Resulta vital el conocimiento para saber qué nos ocurre, algo que, a la larga, te puede salvar tus amados dientes. Debemos saber que el sangrado de las encías es algo realmente serio, y está relacionado con un exponencial aumento de padecer enfermedades del corazón, diabetes, así como infecciones pulmonares y otros problemas de salud general. Esto quiere decir que, el tener las encías infectadas, literalmente puede acabar con tu vida. Ya lo sabes, cuidar tu salud oral significa vivir durante más tiempo y mejor. Como vemos, las encías no sólo son una parte de la boca, sino que además están relacionadas con el resto de nuestro cuerpo. Por norma general, el sangrado de las encías significa que existe una infección local, pero en algunas ocasiones también podría significar que existen problemas de salud que revisten más seriedad, como la presencia de un desequilibrio hormonal, la leucemia o un trastorno de coagulación de la sangre. Para tener una buena salud bucodental, deberás saber que mantener una dieta saludable resulta muy importante. Este aspecto no va a ayudarte a eliminar el sangrado de las encías si ya lo sufras, pero seguro que te será de una gran utilidad cuando hayas conseguido sanear las encías, ayudándote a prevenir la enfermedad periodontal. Debemos tener en cuenta que el consumo de verduras y frutas crudas nos dará las vitaminas y los minerales esenciales, con los que lograremos mantener una dentición y unas encías sanas. También resulta muy importante reducir el consumo de azúcares para evitar estas infecciones. Y hablando de restringir, tenemos que hacer hincapié en lo que ya todos sabemos: Fumar es malo para nuestra boca, y esto incluye las encías y los tejidos de periodontales en general. Dejando este mal hábito, lograremos acelerar el proceso de curación, y es que el humo del tabaco tiende a poner en problemas a nuestras encías, dificultando la curación y, en muchos casos, esconde los síntomas de la enfermedad periodontal hasta que ésta se encuentra en un estadio demasiado avanzado. Por último, tenemos que hablar de algo que no es menos importante, y que no se nos había olvidado. El empleo del hilo dental resulta el método higiénico más importante para lograr evitar la enfermedad de las encías, ya que este supone el mejor método para eliminar los restos de comida y de placa bacteriana que se alojan en los espacios interdentales y en la línea de la encía. En el caso de sufrir sangrado de las encías y buscas frenar este problema, deberás pasarte el hilo dental dos veces por día, teniendo mucho cuidado

Cultura y curiosidades

¿Qué efectos tiene el azúcar en mi boca?

El azúcar es un ingrediente muy presente en la alimentación diaria. En nuestro país se consume el doble de la cantidad de azúcar recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS). La cantidad que recomienda la OMS equivale a unas doce cucharillas de azúcar. Tomar azúcar en exceso puede provocar diferentes problemas de salud, como la obesidad. A nivel bucodental, el azúcar también puede causar varias patologías. Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) los españoles consumen cada día 94 gramos de azúcar. Además de ser el doble de la cantidad recomendada por la OMS, resulta cuatro veces superior a la cantidad considerada como ideal. En nuestro país se está valorando la posibilidad de sanciones en la industria alimentaria. Pero, ¿Qué efectos puede tener el azúcar en la boca? Consecuencias bucodentales del azúcar Cuanto más se exponen los dientes al azúcar, más susceptibles son de desarrollar diversas patologías bucodentales. El problema bucodental más importante provocado por el azúcar es la caries. Se ha demostrado que el azúcar es la causa principal de la caries, un problema que afecta especialmente a los niños. Los más pequeños son consumidores potenciales de alimentos que contienen altos niveles de azúcar: golosinas, pasteles, galletas… Además el azúcar concentrado en este tipo de alimentos también provoca la producción de ácidos en la cavidad oral. Estos ácidos actúan después de las comidas y pueden erosionar el esmalte. El exceso de azúcar también favorece la acumulación de biofilm oral entre dientes y encías. Existen varios consejos para prevenir los efectos del azúcar sobre los dientes. La clave está en moderar la alimentación. Así, se recomienda sustituir los alimentos con más azúcar por otros más saludables. También es recomendable beber agua en vez de zumos y evitar los refrescos. Además, es fundamental evitar picar entre horas. Normalmente entre horas se consumen alimentos poco saludables. Como no suele dar tiempo de realizar una buena limpieza oral, los ácidos atacan con más facilidad los dientes y las encías. Sorprendentemente, el azúcar no es la principal causa de las caries. Lo que provoca caries es el ácido, no el azúcar. Pero existe una relación entre el azúcar y el ácido. El azúcar hace que las bacterias en su boca produzcan el ácido que finalmente daña sus dientes. Es decir que cuanto más azúcar consuma, más ácido creará en su boca. Pero este proceso se produce debido a la placa. La placa es una película de bacterias que recubre sus dientes y encías. Se desarrolla constantemente y la elimina cuando se cepilla los dientes. Cada vez que la placa entra en contacto con el azúcar, se produce ácido que ataca a los dientes durante 20 minutos. Este ácido puede crear un pequeño agujero en el esmalte. ¿Qué debe hacer para ayudar a evitar que el azúcar dañe sus dientes? ¿Debe dejar de comer dulces para siempre? No, para nada. Su primera defensa es prestar atención a la cantidad de tiempo que sus dientes están expuestos al azúcar. Pasarse 10 minutos comiendo un trozo de tarta es mucho mejor para sus dientes que sorber una bebida azucarada durante tres horas. También debe prestar atención a los alimentos y las bebidas que contienen azúcares agregados. Las pautas alimentarias del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) alientan a limitar este tipo de alimentos; los refrescos son una de las mayores fuentes de azúcar agregado en la dieta de los estadounidenses. Los estadounidenses toman más refrescos que cualquier otra bebida, ¡incluso agua, café, leche y cerveza! Esto se traduce en grandes cantidad de azúcar que entran en contacto con sus dientes. Si le gustan los dulces, naturalmente sus dientes estarán expuestos al ácido con más frecuencia. Intente limitar los dulces poco saludables lo más posible. Elija alimentos saludables sin azúcar agregada y limite el consumo de bebidas azucaradas entre las comidas, tome agua en lugar de ello. Las mejores elecciones de alimentos para su salud general también son buenas para su salud dental. Estos alimentos incluyen vegetales y frutas crujientes, por ejemplo brócoli, zanahoria, pepino, manzana y pera. Estos alimentos tienen un alto contenido de agua y un bajo contenido de azúcar. También estimulan el flujo de saliva, lo que ayuda a eliminar los restos de comida y amortiguar los efectos del ácido. Otros alimentos con bajo contenido de azúcar que son buenos para sus dientes son las carnes, los quesos y los frutos secos. Los alimentos que debes evitar son todas las golosinas, galletas dulces, tortas, muffins, patatas fritas, caramelos masticables y otros alimentos que contiene azúcar. Las bebidas que debes evitar son todos los refrescos, jugos de fruta y bebidas azucaradas. Estos tienen un alto contenido de azúcar, que alimenta a las bacterias que provocan caries. Asegúrese de mantener una higiene dental adecuada para que la placa bacteriana esté bajo control. Esto le ayudará a reducir la cantidad de ácido que se produce cuando come y reducirá los efectos del azúcar en los dientes. Cepíllese los dientes dos veces al día, use hilo dental una vez al día y hágase limpiezas dentales regularmente para eliminar el exceso de placa. No podemos evitar todas las caries, pero podemos reducir las posibilidades de tener caries mediante el cuidado oral apropiado y pequeños cambios en la dieta. Recuerde reducir su consumo de azúcar, reducir la cantidad de tiempo que los dientes están expuestos al azúcar y realizarse limpiezas regulares. Su sonrisa se lo agradecerá y podrá satisfacer sus ansias de comer dulces sin dañar demasiado el esmalte de sus dientes. Moderar los niveles de azúcar consumidos ayudará a prevenir el desarrollo de patologías como la caries. En este sentido es muy importante acudir al odontólogo con frecuencia. El dentista podrá detectar a tiempo los primeros síntomas de la caries. Además, moderar el azúcar también permitirá mantener una mejor salud general. Además es muy importante mantener una buena higiene bucodental. Se recomienda cepillarse los dientes un mínimo de dos veces al día con una pasta dental que contenga flúor. También es aconsejable acompañar el cepillado con el uso del colutorio y el hilo dental. Una buena limpieza diaria ayuda a eliminar los restos

Cultura y curiosidades

Riesgos de los piercings bucales

El uso del piercing oral (lengua, labios, frenillo e incluso mejillas) puede tener importantes consecuencias para la salud bucodental, más allá del dolor, el posible rechazo y el alto riesgo de infección que implica su colocación, dada la elevada presencia de bacterias y la humedad propia del interior de la boca, que dificulta la cicatrización de los tejidos. Además, en su colocación también es importante el riesgo de causar lesiones importantes si al hacer el agujero se comprometen determinados vasos sanguíneos o nervios. Pero lo más importante es que, una vez puesto, el piercing oral puede provocar problemas de diversa índole: maloclusiones dentales, traumatismos en los dientes adyacentes, infecciones, retracción de las encías y pérdida de dientes. Ningún odontólogo recomendará la colocación de un piercing en la cavidad oral. Todo lo contrario. Pero, si pese a los riesgos se decide hacerlo, es muy importante visitar desde el primer momento y de forma regular la consulta del dentista para que éste realice un seguimiento de la pieza y de sus efectos en la salud bucodental. Localizaciones más frecuentes del piercing oral Los lugares de la cavidad oral en los que se suelen colocar los piercings son las siguientes: Lengua: suele hacerse en la parte central y se utilizan los denominados barbell (una barra limitada en cada extremo por una esfera), aunque también hay quien se coloca aros en las partes laterales y anteriores de la lengua. Labios: se utilizan habitualmente aros y labrettes (una barra con una esfera en la parte exterior y un disco plano que hace de cierre en la interior. Se colocan en cualquier parte del perímetro labial, aunque lo habitual es que se haga en la parte central del labio inferior. Otras: mejillas (aunque el piercing es externo, la perforación alcanza la mucosa yugal), frenillo lingual y la úvula (campanilla). Complicaciones del piercing oral Al hablar de complicaciones hay que comenzar por el mismo momento de la colocación del piercing. Las más habitaules son el dolor y la inflamación. Ésta última, que puedo afectar a los ganglios situados bajo el mentón y la mandíbula inferior, se inicia a las pocas horas de haberse colocado y se puede prolongar hasta 3 y 5 semanas. En el caso de la lengua, muy vascularizada y enervada, también puede producirse alguna hemorragia al hacer la perforación o la alteración del sentido del gusto y de alguna función motora si se afecta a algún nervio. La infección local del área en la que se coloca el piercing ocurre en aproximadamente un 15% de los casos y existe el riesgo de sufrir una bacteriemia, por lo que deberá acudirse al médico en caso de presentar fiebre, enrojecimiento acusado en torno a la perforación, temblores y escalofríos. La alergia, es otra de las posibles complicaciones, en función de la aleación con que se ha confeccionado el piercing. El níquel es el metal con que hay que tener especial cuidado. Finalmente, a medio y largo plazo, el impacto de un piercing en cualquier parte de la cavidad oral puede tener importantes consecuencias para la salud bucodental: Resección gingival: es una de las consecuencias más importantes de los piercings orales(especialmente de los colocados en los labios) en la estética y la salud bucodental. Se retraen las encías, dejando más superficie dental al descubierto, lo que favorece la pérdida de inserción del diente, lo que puede causar su movilidad y posterior pérdida. El riesgo de sufrir esta complicación es aún mayor si el portador del piercing es fumador. Traumatismos dentales: son las lesiones más frecuentes y pueden ir desde un simple desgaste por rozamiento del metal en el diente, hasta el astillamiento o fractura de alguna pieza dental. Enfermedad periodontal: el contacto continuo del metal del piercing oral puede causar al acúmulo de placa bacteriano, y por tanto la formación de sarro, en los dientes inferiores anteriores, lo que favorece la aparición de gingivitis y, como consecuencia de periodontitis. Halitosis: puede causarla la acumulación de placa bacteriana. Maloclusiones dentales: la introducción permanente de un cuerpo extraño en la cavidad oral, altera el equilibrio de fuerzas de la lengua y, consecuencia, la posición de los dientes, modificando la mordida. Alteraciones del habla: el piercing en la lengua altera la pronunciación de las palabras que contengan las letras R, S, T y L. Alteraciones del gusto. Ingestión del piercing oral. En el caso de llevar piercings bucales es muy importante realizar un seguimiento constante para evitar todos estos inconvenientes. Aun así, la mayoría de profesionales recomiendan no llevar estas piezas metálicas que pueden comprometer nuestra salud bucodental.

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