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Profilaxis dental: ¿cómo se hace una limpieza bucal profesional?

Los especialistas no dejan de insistir en ello: si quieres gozar de una buena salud bucodental, es imprescindible que mantengas unas rutinas de higiene rigurosas.Sin embargo, con un cepillado tras cada comida y el uso de hilo dental o cepillos interproximales no es suficiente: de esta manera, por nosotros mismos no somos capaces de eliminar de forma eficaz la placa bacteriana y el sarro que se aloja en todos los recovecos de nuestra boca. Por este motivo, los especialistas recomiendan la realización de una limpieza bucodental profesional -o profilaxis- para mantener la boca en perfecto estado de salud. Pero, ¿en qué consiste este procedimiento y cuándo está indicada su realización?   ¿Qué es la profilaxis? Denominamos profilaxis a la realización de una limpieza bucodental profesional. Se trata de un procedimiento sencillo realizado en clínica por la Dra. Sánchez, y cuyo objetivo es eliminar de los dientes, la línea de la encía y los espacios interdentales toda la placa y el sarro acumulados. Pero, ¿cómo se realiza una higiene dental? Limpieza de boca paso a paso Para mantener tu boca completamente libre de placa bacteriana y, por lo tanto, evitar la afección de enfermedades periodontales o la aparición de caries, el especialista sigue una técnica que podemos resumir en una serie de pasos. En primer lugar, realizará una exploración bucal para valorar el estado de tus dientes y encías. De esta manera, el higienista localizará la presencia de la placa y la acumulación de sarro y verificará que no existen otros problemas dentales tales como enfermedades periodontales -gingivitis o periodontitis-, caries o movilidad dentaria. Para localizar este cúmulo, en muchas ocasiones se basan en un producto denominado eritrosina: un compuesto que, aplicado sobre la superficie dental, tiñe la placa bacteriana y facilita el trabajo del especialista. Una vez realizada esta evaluación, el tratamiento comenzará eliminando los depósitos de cálculo mediante una punta de ultrasonidos. Gracias a su sistema de agua a presión combinado con una leve vibración, ésta va dejando nuestros dientes y encías libres de sarro.   PUNTA DE ULTRASONIDOS A continuación, el higienista recurrirá al uso de seda dental y, si es necesario o el paciente así lo requiere, de cepillos interproximales para eliminar los residuos presentes en las superficies interdentales. Posteriormente, empleará tiras de pulir para eliminar las manchas presentes entre las piezas dentales. A continuación, erradicará las manchas que, con el paso del tiempo y la ingesta de determinados alimentos como el café, aparecen en las superficies de nuestros dientes. Para ello, el higienista pasará un cepillo con una pasta especial de profilaxis. Para casos de manchas más resistentes, el especialista empleará un aeropulidor de bicarbonato para eliminarlas de manera efectiva. Por último, se aplica una cubeta con un gel de flúor que remineraliza el esmalte de los dientes y se instruye al paciente en la correcta técnica de cepillado e higiene dental. ¿Cuánto tiempo dura una profilaxis? La duración de la cita de profilaxis depende de cada caso y, por lo tanto, del cúmulo de sarro y placa bacteriana y de la dificultad que suponga para el especialista mantener la boca libre de los mismos. Podemos afirmar que la duración de esta cita oscila entre los 50 y los 60 minutos, aproximadamente. La profilaxis elimina los cúmulos de cálculo y placa y previene la aparición de enfermedades periodontales ¿Cada cuánto tiempo está recomendada la realización de una limpieza de boca profesional? La higiene bucodental es especialmente importante en aquellos pacientes que padecen enfermedades periodontales: gingivitis o periodontitis. En un estado inicial, la enfermedad periodontal se manifiesta mediante la inflamación y sangrado de las encías -gingivitis-. En este estado, la enfermedad es reversible mediante la realización de una limpieza bucodental exhaustiva. PROCESO DE ENFERMEDADES PERIODONTALES   Sin embargo, en caso de que se encuentre en un periodo más avanzado, la enfermedad periodontal deriva en periodontitis. Se trata de una afección crónica que comienza con la inflamación de los tejidos de soporte y, en caso de no ser tratada, puede suponer movilidad de las piezas dentales e incluso suponer la pérdida de las mismas. La higiene bucodental es el principal factor de prevención de este tipo de patologías.Por este motivo, en pacientes periodontales, los especialistas recomiendan la realización de una limpieza bucodental cada 4 o 6 meses. Por el contrario, en personas que mantengan su boca en salud, el periodo se extiende hasta los 8 o 10 meses. ¿Duele la realización de una limpieza dental profesional? La profilaxis es un procedimiento indoloro que no precisa del uso de anestesia local y que no presenta ningún efecto secundario nocivo para nuestra salud dental. Sin embargo, debemos tener en cuenta que la profilaxis elimina los depósitos de sarro y placa presentes en nuestros dientes y a lo largo de la línea de las encías. De esta manera, algunas zonas que previamente no estaban acostumbradas a recibir estímulos quedan expuestas a los mismos y, por este motivo, las personas pueden padecer cierta sensibilidad dental. Esta sensación es leve y remitirá transcurridos unos días. ¿Qué beneficios tiene la profilaxis? Como hemos comentado con anterioridad, la higiene es la base de la salud de tus dientes y encías. Por este motivo, la profilaxis tiene numerosos beneficios de cara a mantener tu boca en buen estado. En primer lugar, la higiene bucodental profesional elimina el cúmulo de sarro y placa bacteriana, lo que previene la afección de enfermedades periodontales y erradica la inflamación de las encías. Además, una boca libre de bacterias supone el fin de los problemas de mal sabor de boca y halitosis -mal aliento-. Por otro lado, la profilaxis remineraliza el esmalte dental gracias a la aplicación de flúor. De esta forma, reduce de manera cuantiosa el riesgo de aparición de caries dentales que, en caso de no ser tratadas a tiempo, pueden llegar a comprometer la estabilidad de las piezas dentarias.   CUBETA DE FLÚOR Por último, supone una mejora estética al eliminar las manchas presentes en la superficie de nuestros dientes. Una dentadura limpia y sana nos aporta un aspecto más confiado y saludable. ¿Qué pasa cuando existe un cúmulo de placa en la línea subgingival? En algunos casos, el especialista detecta la existencia de cálculo subgingival -es decir, por debajo de la línea de la encía-. Este cúmulo debe ser eliminado para frenar tanto la

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¿Cuál es el precio de los puentes dentales? ¿Son más baratos que los implantes?

Aunque estemos ante un asunto relacionado con la salud, lo cierto es que el factor económico es un aspecto que tiene mucho peso a la hora de someternos a un tratamiento dental. En Odontología, es frecuente que nuestros pacientes se debatan entre un procedimiento u otro en función del precio. Por ejemplo, esto ocurre con asiduidad cuando una persona puede rehabilitar los dientes que le faltan mediante implantes o puentes dentales. Y es que, la mayoría de personas tiene en mente la idea de que un puente siempre es más barato que un implante. ¿Es más barato un puente dental que un implante? No existe una respuesta absoluta a esta cuestión, ya que el precio depende del tipo de puente dental. Por este motivo, en primer lugar, vamos a aclarar cuántos tipos de puentes dentales existen. ¿Cuántos tipos de puentes dentales hay? A la hora de rehabilitar la pérdida de dientes mediante puentes, existen dos tipos de opciones: Puente sobre diente Este es el tipo de puente más barato de los dos que existen. Sin embargo, en nuestra clínica dental no recomendamos su colocación. Esto se debe a que el puente se sostiene sobre los dientes naturales del paciente, los cuales deben tallarse previamente. El tallado implica reducir un diente que, en muchos casos, está sano. Además, dicha reducción es totalmente irreversible, por lo que el diente tallado tendrá que estar siempre cubierto por una corona. Pero, en segundo lugar, realizar un tallado implica, en muchos casos, tener que llevar a cabo una endodoncia, el cual es otro procedimiento muy agresivo para un diente que está sano. Dado que en nuestra clínica dental la filosofía es la de ser conservadores e intentar mantener en buen estado el máximo número de dientes de la boca, no recomendamos este tipo de puente. Por tanto, si los dientes vecinos al espacio vacío están sanos, aconsejamos la colocación de un implante unitario. PUENTE SOBRE DIENTE Puente sobre implante Al contrario que el anterior, este tratamiento se considera mucho más conservador. Esto se debe a que el puente se coloca sobre implantes. En estos casos, se han insertado un implante debido a que los dientes naturales se han caído o los hemos extraído previamente en la consulta. Dado que nuestra prioridad es la de ser conservadores, si en nuestra clínica extraemos un diente es porque se encuentra en un estado de salud tan precario que su permanencia en la boca es imposible. PUENTE SOBRE IMPLANTE Elige la opción más conservadora Además de valorar el precio, te recomendamos que, si te dan a elegir, optes por la alternativa más conservadora. Es decir, aquella que no exige tallar o endodonciar dientes sanos. ¿Por qué son más baratos los puentes sobre diente? Anteriormente ya hemos avanzado el por qué los puentes sobre dientes son más baratos que los implantes unitarios y no los recomendamos. Pero, a continuación, te ofrecemos una explicación mucho más detallada sobre este tipo de prótesis: Duración a largo plazo El implante es una solución mucho más estable a largo plazo, ya que no solamente sustituye la corona del diente, sino también su raíz. Por el contrario, un puente que se soporta sobre los dientes naturales del paciente depende de la estabilidad de dichas piezas dentales. Es decir, cualquier patología que afecte a los dientes naturales (caries, periodontitis…) puede comprometer la estabilidad de los puentes. Tallado Mientras que la colocación de un implante no afecta al resto de dientes del paciente, con los puentes no sucede lo mismo. Y es que, para poder colocar un puente es necesario tallar las piezas dentales adyacentes. Esto se debe a que es necesario restarles volumen para poder colocar la prótesis encima de ellas. Dicho todo lo anterior, podríamos decir que un implante es una solución mucho más conservadora que un puente dental.   TALLADO DE DIENTES Naturalidad El implante dental no solamente otorga a la sonrisa un aspecto más natural. Además de esto, sustituye de forma más fiel el diente perdido, ya que no solamente cumple una función estética con la corona. Además, simula la raíz. El precio de los puentes dentales depende mucho de la formación, experiencia, especialización y dedicación del dentista que realiza el tratamiento ¿De qué depende el precio de un puente dental? Dicho todo lo anterior, es de esperar que los precios de los puentes dentales varíen considerablemente en función de distintos factores. Los factores principales que afectan al precio son los siguientes: Tipo de puente Los puentes sobre dientes son más baratos que los puentes sobre implantes. Número de dientes afectados Cuantos más dientes sea necesario tratar, más caro será el tratamiento. Materiales utilizados Si los materiales son de calidad y la prótesis es fabricada en laboratorios muy avanzados, el puente tendrá un precio mayor. Profesional que realiza el tratamiento A mayor formación, experiencia, especialización y dedicación del dentista que realiza el tratamiento, más alto será el coste. En lo que respecta a nuestra clínica dental, podemos resaltar que la profesional que realizan este tipo de tratamientos, la Dra. Sánchez está especializada en Implantología y Prostodoncia con una experiencia de más de 10 años. Además, se dedican a dicha especialidad en exclusiva, por lo que realizan muchas veces al día el mismo tipo de tratamientos. Esto mismo hace que tengan mucha experiencia y una visión muy amplia de su área. Además, utilizamos materiales de primeras marcas: Straumann y trabajamos con laboratorios reconocidos. De esta manera, podemos garantizar que las prótesis que colocamos a nuestros pacientes sean estables a largo plazo.   IMPLANTE UNITARIO   Si quieres que llevemos a cabo una valoración de tu caso y obtener un presupuesto cerrado, estaremos encantados de recibirte en una primera consulta gratuita.

Cultura y curiosidades

Odontofobia: 9 consejos para vencer el miedo al dentista

Aunque sabemos que para algunos pacientes acudir a la consulta del dentista no es siempre agradable, la gran mayoría de ellos lo hace porque antepone los beneficios que una visita a tiempo al odontólogo tiene para su salud. Sin embargo, hay determinadas personas que se sienten literalmente “incapaces” de sentarse en el sillón del dentista debido al miedo o la ansiedad que les provoca. En estos casos, podemos llegar a afirmar que el paciente padece odontofobia. ¿Qué causa el miedo al dentista? Lo más habitual es que la odontofobia surja por una experiencia dolorosa anterior, que se ha podido tener de niño o posteriormente en la edad adulta. No obstante, también hay algunas personas que desarrollan el miedo al dentista por una experiencia ajena a ellas y que les han contado familiares o amigos. Sea cual sea el origen de la fobia al dentista, no debemos dejar que ésta nos impida acudir a dicho profesional para que lleve a cabo tanto las revisiones rutinarias como los tratamientos necesarios. PÁNICO AL DOLOR, SONIDO U OLOR ¿Qué problemas ocasiona la odontofobia? Es importante tener presente que la boca supone una puerta de entrada al resto del cuerpo, por lo que cualquier infección o enfermedad oral puede extenderse fácilmente por nuestro organismo si no actuamos a tiempo. Esto hace que las personas que no acuden a la consulta del dentista de manera regular por miedo estén comprometiendo seriamente su salud general. Y es que, no llevar a cabo los cuidados o tratamientos necesarios provoca daños que van más allá de la pérdida de dientes, los dolores constantes o el empeoramiento estético de la sonrisa. Esta falta de atención puede originar enfermedades periodontales, que afectan negativamente a la diabetes, el embarazo o al riesgo de sufrir un infarto. Confía en tu dentista Si tienes miedo, te recomendamos que visites varios odontólogos, trates con ellos tus preocupaciones y observes si son lo suficientemente pacientes, cercanos y amables como para tratar pacientes con odontofobia ¿Qué debo hacer si tengo odontofobia? Si te sientes identificado con lo que te estamos contando y eres una de esas personas que han desarrollado pánico al dolor, sonido o incluso al olor característico de la consulta dental, en este artículo te vamos a dar una serie de consejos para que tu próxima visita al dentista sea más agradable. Y es que en SanCal nos encontramos a diario con pacientes que acuden a nuestra clínica dental con miedo. Por este motivo, podemos decir que estamos acostumbrados a tratar con este tipo de situaciones y que nos esforzamos por ofrecer la máxima comprensión y confianza. Infórmate de los procedimientos que combaten el miedo Lo primero que hay que pensar es que el miedo podía estar más justificado hace años, cuando las técnicas y el instrumental en Odontología estaban mucho menos desarrollados que ahora. Sin embargo, hoy en día existen técnicas como la sedación consciente, que favorece la completa relajación de los pacientes que sienten un alto nivel de estrés ante un tratamiento. Aunque se puede utilizar para realizar cualquier procedimiento, lo más habitual es que recurramos a ella en las cirugías de implantes dentales. Trata con el dentista tus preocupaciones Antes de empezar cualquier tratamiento, es fundamental que tengas una cita con el odontólogo que lo va a llevar a cabo. De esta manera, podrá ofrecerte una explicación de tu diagnóstico y del tratamientoque va a realizar. Si, además, aprovechas esta cita para contarle tus miedos, no solamente reducirás la incertidumbre y estarás más preparado para lo que vaya a hacer, sino que el profesional también sabrá cómo tratarte.   Piensa bien el horario de la cita Si acudes al odontólogo por la mañana a primera hora, evitarás estar todo el día dándole vueltas. Consulta la posibilidad de tomar medicación para relajarte Si crees que te va a ayudar, te animamos a preguntar a tu dentista si puedes tomar algún tipo de medicamento para calmar los nervios. Eso sí, te recordamos que nunca debes tomar ningún medicamento sin consultar a tu médico u odontólogo. Ve acompañado Pide a un familiar o amigo –que no tenga miedo al dentista- que te acompañe a la cita. De esta manera, te podrá tranquilizar y mantener entretenido tanto en la sala de espera como en el gabinete. Tiempo de espera Una vez que estés en la sala de espera, intenta no pensar en lo que va a pasar cuando entres al gabinete. Como alternativa, procura tener la mente ocupada leyendo alguna revista, navegando por Internet con tu móvil o hablando con alguien. Aprende técnicas de relajación Cuando estés en el sillón del dentista, esfuérzate por respirar de manera profunda y por pensar en algo agradable que te permita mantenerte distraído. Esto te ayudará a estar más relajado, en lugar de concentrado en lo que te están haciendo. Llévate música El ruido del instrumental utilizado por dentistas y auxiliares puede ser muy incómodo para algunos pacientes, especialmente para aquellos que tienen miedo. Con el objetivo de no tener que escucharlo, llévate tu propia música y cascos para poder aislarte. Acuerda un gesto con el dentista por si estás incómodo o sientes dolor Si sabes que hay un gesto mediante el cual el profesional va a dejar de hacer lo que esté haciendo, te sentirás más seguro PIDE AYUDA A TU DENTISTA SI LA NECESITAS Pide someterte a un tratamiento menor para romper el hielo Si el procedimiento al que te vas a someter es complejo, puedes solicitar que te realicen una limpieza profesional, por ejemplo. De esta manera, podrás conocer un poco más la clínica que te va a tratar y sus profesionales, lo que te ayudará a ir más confiado a la siguiente sesión. Una vez dicho todo lo anterior, quizá el punto más importante sea el de escoger un profesional competente, cercano y que te entienda. Si estás en su búsqueda, nuestro mejor consejo es que te pongas en manos de un odontólogo en el que confíes, que te ofrezca un trato cercano, que sea sensible ante tu miedo y que se esfuerce para que estés a gusto. Hay muchos dentistas y cada uno tiene su personalidad, por lo que estás en el derecho de elegir uno que, además de ser buen profesional, te haga sentir bien.

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La importancia de la saliva para mantener una boca sana

La saliva es una secreción que producimos de manera natural formada, en su mayor parte -99%- por agua. El 1% restante lo conforman componentes tanto orgánicos como inorgánicos, que colaboran en mantener nuestra cavidad oral en salud.Desempeña un papel fundamental en nuestra salud bucodental: no sólo protege la boca de diferentes afecciones y colabora en la deglución y masticación de los alimentos, sino que también nos ayuda a detectar otras anomalías en nuestra salud. ¿Qué funciones tiene la saliva? Si bien la principal función es la de colaborar en la masticación y deglución de los alimentos, la saliva tiene muchas otras funciones beneficiosas para la salud de nuestra boca: Lubrica y protege las encías y las piezas dentales. Es capaz de arrastrar las bacterias y eliminar los microorganismos presentes en la boca. Además, tiene un efecto cicatrizante. Posibilita una mejor detección de los sabores de la comida. La saliva regula el pH de la boca, controlando el nivel de ácidos producidos por la placa y dificultando la aparición de caries en la boca. Contribuye, además, a la mineralización de los dientes, reforzando de esta manera su esmalte. Colabora en el proceso de diagnóstico de algunas patologías tales como la diabetes, el cáncer oral o enfermedades periodontales a través del análisis de las bacterias presentes en la misma.     Prepara el bolo alimenticio, facilitando el proceso digestivo, protegiendo el esófago y evitando atragantamientos.   Una persona suele segregar, de media, entre 1 y 1,5 litros de saliva al día. Esta producción alcanza su nivel más bajo durante la noche, por lo que la acción antimicrobiana se ve debilitada y, por ello, se le da una mayor importancia al cepillado nocturno para mantener una higiene dental correcta. Es de vital importancia para nuestra salud el hecho de mantener estos niveles de segregación de saliva para gozar de una buena salud bucodental. En caso contrario, podríamos sufrir xerostomía o, bien, sialorrea. ¿Qué es la xerostomía? La xerostomía –o síndrome de la boca seca- es una situación clínica que supone una disminución considerable de los niveles de segregación de saliva. Entre sus síntomas destacan una sensación de sed constante y de ardor en la boca, una alteración en la percepción de los sabores, fisuras y úlceras en la lengua y en las encías o dificultad a la hora de masticar. Te interesará »  Deglución atípica: ¿qué consecuencias tiene y cuál es su tratamiento? Entre las posibles causas de esta bajada podemos distinguir: La ingesta de determinados medicamentos tales como antihistamínicos, antidepresivos, antiasmáticos o medicamentos para controlar la tensión arterial. El padecimiento de enfermedades sistémicas como la diabetes, la artrosis o trastornos alimenticios –anorexia y bulimia-. Las situaciones de picos de estrés. Malos hábitos como una dieta poco equilibrada, el consumo de alcohol o el tabaquismo. Los tratamientos de radioterapia o quimioterapia. La xerostomía supone una disminución del nivel de segregación de saliva y no sólo causa molestias al hablar o al dormir, sino que también tiene efectos en nuestra salud dental ¿Qué consecuencias tiene la xerostomía? Una disminución del nivel salivar supone una bajada de la acción protectora de la salivay tiene consecuencias nefastas para la salud dental. Aquellos pacientes que padezcan xerostomía son más proclives a sufrir enfermedades periodontales como la gingivitis o la periodontitis, pues están más expuestos a la irritación de las encías. La merma de la capacidad de producir saliva también influye en la deglución y en la masticación, dificultando la digestión y llegando a dañar el esófago. Además, son más proclives a la aparición de caries o de manchas en el esmalte de los dientes y suelen padecer mal aliento. ¿Cómo se puede solucionar la xerostomía? Para atajar esta afección debemos clarificar en primer lugar la causa del problema y, una vez dilucidada, determinar si estamos ante un caso reversible o irreversible. En el caso de que esta situación clínica sea reversible o puntual, generalmente provocada por la ingesta de medicamentos o por hábitos como el tabaquismo, podemos colaborar en la segregación de saliva a través de la ingesta de líquidos y alimentos o con una higiene bucodental más exhaustiva.     En cambio, los casos de xerostomía irreversible, típicos en pacientes con cáncer oral o bien con un mal funcionamiento de las glándulas salivales, se pueden atajar mediante la ingesta de fármacos específicos. Además, está recomendado el uso de sustitutos de la saliva que humedecen temporalmente la boca y, sobre todo, estimulantes salivares. Sin embargo, tan perjudicial es una carencia de la misma como un exceso de segregación. Aquellas personas cuyo caso se encuentra en el lado opuesto padecen sialorrea. ¿Qué es la sialorrea? La hipersalivación –o sialorrea- supone un exceso en la cantidad de saliva que segrega una persona. La sialorrea suele ser frecuente en pacientes con enfermedades neuronales tales como la enfermedad de Parkinson, parálisis cerebral o esclerosis lateral amiotrófica. También es habitual en personas que hayan sufrido un infarto cerebral o que, en definitiva, tengan alguna enfermedad que merme la actividad de los músculos de la cara. Además, la hipersalivación suele atacar a personas que estén siendo sometidas a tratamientos médicos de trastornos psiquiátricos tales como, por ejemplo, la esquizofrenia. ¿Qué consecuencias tiene la sialorrea? La hipersalivación no sólo dificulta el habla y provoca molestias a la hora de comer o dormir, sino que también produce lesiones y úlceras en los labios y en las zonas adyacentes de la boca. Estas últimas son especialmente frecuentes en bebés.   ¿Cuál es el tratamiento de la sialorrea? La hipersalivación se puede atajar, en un inicio, con medicamentos que inhiban la segregación de saliva. En algunos casos, están recomendados procedimiento quirúrgicos como, por ejemplo, los destinados a eliminar algunas glándulas salivales –sublinguales o submandibulares- o a ligar los conductos a través de los cuales la saliva llega a la boca, controlando la liberación de la misma. La saliva desempeña un papel fundamental en nuestra salud bucodental. En caso de sentir anomalías en la segregación de la misma, no debemos ignorarlas: en muchas ocasiones son un claro indicador de la existencia de otras patologías. Para mantener unos niveles óptimos de segregación salivar y evitar problemas tales como la xerostomía o la sialorrea, debemos erradicar malos hábitos de consumo, tales como el tabaquismo, y, sobre todo, seguir unas pautas de higiene oral exhaustivas. Pide tu cita gratuita

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Leucoplasia oral: ¿son peligrosas las manchas blancas en la boca?

La leucoplasia oral es una de las enfermedades de la lengua más comunes de todas las que existen. En la mayoría de ocasiones no reviste gravedad. Sin embargo, siempre que advirtamos una señal nueva diferente en nuestra boca es necesario acudir a un médico o dentista. De esta manera, podrá examinar nuestra cavidad oral y determinar si dicha señal supone algún peligro para nuestra salud.   ¿Qué es la leucoplasia oral? La leucoplasia es un trastorno oral que se caracteriza por dar lugar a unas manchas o parches blancos en la boca. Dichas lesiones se desarrollan principalmente en la lengua y la cara interna de las mejillas. ¿Cuáles son sus síntomas? Aunque ya hemos mencionado el aspecto que provoca esta alteración, a continuación, vamos a concretar algo más sobre la apariencia de las manchas: Son blancas o grises Tienen un contorno desigual Presentan una ligera elevación Causan dolor o molestias No se eliminan con el raspado MANCHAS O PARCHES BLANCOS EN LA LENGUA ¿Cuáles son las causas de la leucoplasia? La causa exacta de la leucoplasia es desconocida. Sin embargo, sí que se conocen un par de detalles importantes. Por un lado, se sabe que este trastorno oral es más común entre los adultos mayores. Por otro lado, los estudios muestran que la leucoplasia tiene una prevalencia entre la población que oscila en torno al 1% y el 5%. Además, los expertos en medicina oral afirman que, en la mayoría de las ocasiones, estas manchas blancas tienen un origen irritativo. Dicha irritación puede estar causada por diferentes motivos: Asperezas en nuestros propios dientes Prótesis dentales que están mal ajustadas y rozan Fumar habitualmente o mascar tabaco Consumo excesivo de alcohol PRÓTESIS PARA LA BOCA Aunque las causas exactas de la leucoplasia se desconocen, se considera que los principales factores de riesgo son la irritación, el tabaco y el alcohol Tratamiento: ¿cómo se cura la leucoplasia? Lo más habitual es que la leucoplasia no necesite tratamiento. Esto se debe a que, si el origen es irritativo, las manchas comienzan a desaparecer una vez que se elimina la fuente de irritación. Por tanto, las recomendaciones de los expertos en medicina bucal serían las siguientes: Seguir unos hábitos de vida saludables que pasen por no fumar y beber alcohol de manera moderada Acudir al dentista si sentimos molestias relacionadas con cualquier prótesis bucal así como en nuestros dientes o encías Acudir al dentista regularmente, aunque, en apariencia, nuestro estado bucodental sea el adecuado. Lo ideal es que esta visita se produzca una o dos veces al año TABACO FAVORECE MANCHAS EN LA BOCA O LEUCOPLASIA ¿Debo acudir al médico o dentista si tengo manchas blancas? A pesar de que en la mayoría de ocasiones estos parches no revisten ninguna gravedad, es importante prestar atención a nuestra boca y tomarse en serio cualquier cambio inusual que apreciemos. Todo ello pasa por autoexplorarnos la boca con regularidad para que nos sea posible advertir cualquier cambio repentino. Y, además, pasa por acudir al dentista, médico de cabecera u otorrinolaringólogo en caso de que advirtamos algún signo inusual. Su criterio profesional nos servirá para salir de dudas y saber si las señales que hemos observado tienen importancia o no. PERSONA AUTOEXPLORÁNDOSE LA BOCA Vigila tu boca Realiza una autoexploración de tu boca regularmente y acude al dentista en caso de que adviertas alguna mancha o cambio significativo ¿Las manchas o parches pueden ser graves? Si te hemos hablado de la necesidad de realizar una autoexploración y de acudir a un especialista en caso de que adviertas algún cambio es porque hay lesiones que pueden indicar la existencia de un cáncer de boca. Tal y como ya hemos destacado, lo más probable es que las manchas o parches blancos se curen por sí solos y no representen ningún peligro para nuestra salud. Sin embargo, hay casos en los que pueden ser un indicador de cáncer de boca. Y, en este supuesto, el pronóstico será más favorable cuanto más incipiente sea la lesión.

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¿Quieres tener una buena salud dental? ¡Bebe agua!

Gozar de una buena salud bucodental no solo tiene beneficios a la hora de masticar, pronunciar los diferentes sonidos o evitar molestias durante el proceso de digestión. También contribuye a mejorar nuestro estado de salud general.   Una boca sana previene de la afección de dolores cervicales o de cabeza, y disminuye el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares o sistémicas -como, por ejemplo, la diabetes-.   Mantener unas buenas pautas de higiene bucodental, así como acudir de manera rutinaria al especialista para que revise el estado de tu boca, son actos que favorecen tu salud dental y previenen la incidencia de distintas afecciones dentales.   Pero, además, actos como mantener una dieta equilibrada o beber una buena cantidad de agua a diario colaboran a mantener nuestra boca en perfecto estado.   En el presente artículo te contaremos cuál es la importancia del agua en la salud bucodental, así como otros sencillos remedios que pueden influir de manera muy positiva en la buena conservación de tus dientes y encías.   Beneficios del agua para la salud Los especialistas inciden constantemente en la importancia de mantenernos hidratados a lo largo del día. El agua juega un papel fundamental en distintos procesos de nuestro día a día: Favorece el proceso de digestión, y facilita la absorción de los nutrientes de los alimentos. Colabora a reducir la sensación de fatiga. Elimina las toxinas presentes en nuestro organismo. Regula la temperatura de nuestro cuerpo. Actúa como un importante lubricante para nuestras articulaciones. Pero, además, el agua tiene una serie de beneficios para nuestra salud bucodental.   ¿Por qué es importante el agua para nuestros dientes y encías? El agua es una bebida saludable que no contiene azúcares. No sólo contribuye a mantenerte hidratado y a preservar una dieta equilibrada, si no que, además, evita la sequedad bucal y te ayuda a mantener nuestra boca limpia. IMPORTANCIA DE MANTENERSE HIDRATADO El agua, por lo tanto, tiene numerosos beneficios para nuestra boca. Entre ellos, colabora a segregar unos niveles óptimos de saliva y reduce la afección de caries dentales y enfermedades periodontales.   La importancia del agua para segregar los niveles óptimos de saliva La saliva es una sustancia que producimos de manera natural formada, en un 99% por agua. Desempeña una labor fundamental en nuestra salud bucodental, al tener numerosas funciones beneficiosas para la misma: Lubrica las encías y protege los dientes de la acción de los agentes patógenos, arrastrando las bacterias y los microorganismos presentes en la cavidad oral. Contribuye a mantener el pH de la boca neutro, evitando que la boca se convierta, por lo tanto, en un medio ácido que favorece la aparición de caries. Permite distinguir mejor el sabor de los alimentos, y contribuye en el proceso de deglución colaborando en la formación del bolo alimenticio. Favorece el proceso de cicatrización de heridas y pequeñas llagas. Ayuda a diagnosticar algunas patologías gracias al análisis de las bacterias presentes en la misma como, por ejemplo, el cáncer oral o enfermedades periodontales -a la hora de determinar las bacterias causantes de las mismas-. Te interesará »  Xilitol: ¿tu aliado contra la caries? Por este motivo, segregar unos niveles óptimos de saliva resulta de vital importancia. Y, para ello, una buena hidratación resulta indispensable. En caso contrario, corremos el riesgo de padecer xerostomía -o síndrome de la boca seca-. Esta afección no solo genera molestias a la hora de hablar o masticar, sino que también aumenta el riesgo de padecer la incidencia de caries o enfermedades periodontales, así como de sufrir mal aliento. El agua: tu aliado contra la caries La caries es una lesión de la estructura dental provocada por la acción de los ácidos liberados por la placa bacteriana. La caries debe ser tratada a tiempo, de tal manera que cuando sea abordada solo haya afectado al esmalte dental. En caso contrario, afectará a la dentina y, posteriormente, al nervio dental. CARIES DENTAL   De esta manera, podemos afirmar que una caries muy extensa puede llegar a comprometer la estabilidad de la pieza dental afectada.   A diferencia de otras bebidas azucaradas o ácidas como los zumos de frutas o los refrescos -que contribuyen a hacer de la boca un medio más ácido-, el agua lava con cada trago tu boca de posibles restos de comida y bacterias perjudiciales para tu salud dental.   Esto no significa que un buen enjuague con agua sustituya al clásico cepillado dental: debes seguir manteniendo el hábito de lavarte los dientes tras cada comida, y completar tu higiene oral con el uso de hilo dental o cepillos interproximales.   ¿Colabora el agua a evitar las enfermedades periodontales? La enfermedad periodontal cursa con la inflamación y sangrado reversible de las encías -gingivitis-. En caso de no ser tratada a tiempo, la enfermedad progresa a periodontitis: una patología crónica que comienza con la inflamación de los tejidos de soporte, continúa con movilidad dentaria y, finalmente, puede comprometer la estabilidad de las piezas dentales.   Una higiene bucodental rigurosa es el principal factor de prevención de estas patologías. Por este motivo el agua tiene una influencia muy positiva en la aminoración de la incidencia las mismas: reduce el riesgo de padecerlas, pues, como ya hemos comentado, colabora a limpiar la boca de restos de comida y agentes patógenos.   ¿Qué otros beneficios tiene el agua para nuestros dientes y encías? Además de los citados anteriormente, el agua es empleada como remedio casero en algunas dolencias relacionadas con nuestra boca. A continuación, te damos una serie de pautas que quizá puedan serte de utilidad en un futuro. ¿Te has quemado la lengua? Para reducir la sensación de irritación, es recomendable que te enjuagues con agua fría o leche. Recuerda que la aplicación directa de hielo puede contribuir a aumentar más la sensación de irritación. Si has iniciado un tratamiento de ortodoncia con un método fijo -brackets metálicos, brackets de zafiro o brackets linguales-, notarás que te es más complicado acceder a todos los recovecos de tu boca. Por ello, los especialistas recomiendan el uso del waterpik. Se trata de un cepillo que, mediante el uso de agua a presión, eliminará de manera satisfactoria todos los restos de comida que

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Absceso dental: ¿cuáles son sus causas y qué tratamiento es el más adecuado?

El absceso dental responde a la infección del tejido blando que supone un dolor agudo para el paciente que la padece.En el presente artículo te contaremos cuáles son las posibles causas de su aparición, qué consecuencias tiene para tu salud bucodental y cuáles son los tratamientos más adecuados para abordarlos.   Definición: ¿qué es un absceso periapical? Un absceso dental es una acumulación localizada de pus a causa de una infección bacteriana. El absceso periapical se diferencia con respecto al absceso periodontal por su localización: el primero afecta al ápice -punta de la raíz- de la pieza dental, mientras que, por el contrario, el segundo tiene su incidencia en las encías, en el área colindante a las raíces de los dientes. Síntomas del absceso periapical Los abscesos periapicales presentan una serie de síntomas inequívocos que, si bien empiezan a manifestarse de forma más leve, van agravándose con el tiempo. Los principales signos de los abscesos dentales son los siguientes: Dolor agudo en la zona. Aparición de un bulto o fístula en el área próxima a la zona en la que se localiza la infección que, en ocasiones, puede suponer la supuración de pus. Mal sabor de boca, especialmente amargo. Inflamación e hinchazón de las encías. Estado febril. Inflamación del área colindante a la pieza dental afectada: cara, mejillas o ganglios linfáticos. Sensación de sensibilidad a temperaturas extremas, sobre todo con la ingesta de alimentos demasiado fríos o calientes, o en el momento en el que se ejerce cierta presión sobre la pieza dental -sobre todo, a la hora de masticar o morder-. En caso de que el absceso no sea tratado a tiempo, la infección irradia al hueso maxilar. Si bien las molestias se reducen, la infección no ha remitido y el tratamiento continúa resultando igual de necesario. Frenar el proceso infeccioso es indispensable. En caso contrario, la infección podría extenderse a otras áreas del cuerpo. ESTRUCTURA DENTARIA ¿Cuáles son las causas del absceso dental? Una caries que no ha sido tratada a tiempo, un fuerte traumatismo, fractura de la pieza dental e incluso la enfermedad periodontal se postulan como las principales causas de los abscesos dentales. Absceso dental a causa de una caries dental o de un fuerte traumatismo Una caries extensa supone el daño de la estructura del diente. En casos de lesiones cariosas muy avanzadas o de traumatismos muy fuertes, las bacterias pueden llegar a alcanzar la pulpa -o nervio dental-. En este caso se produce una infección que se extiende hasta la raíz del diente, causando una inflamación de los tejidos internos del mismo. Una caries que no ha sido tratada a tiempo o un diento enfermo son las principales causas de la aparición de abscesos periapicales o dento-alveolares. Absceso dental a causa de la enfermedad periodontal Las enfermedades periodontales son afecciones que cursan con la inflamación y sangrado reversible de las encías -gingivitis- y, en caso de no ser tratadas a tiempo, derivan en una periodontitis. La periodontitis es una enfermedad crónica que comienza con la infección de los tejidos de soporte y, en caso de no ser abordada, continúa con la movilidad dental y, finalmente, puede llegar a suponer con la pérdida de las piezas. La enfermedad periodontal compromete la estabilidad de las encías, suponiendo una recesión de las mismas. En los casos más avanzados, se forman unas bolsas periodontales -surco que surge entre la pieza dental y la encía-, propiciando un hábitat perfecto para las colonias de bacterias presentes en la boca. PERIODONTITIS COMO CAUSA DE UN ABSCESO La enfermedad periodontal es la principal causa de los abscesos del periodonto. Factores de riesgo Una vez esclarecidas sus causas, podemos entender que existen ciertas condiciones que suponen una mayor propensión a padecer la afección de un absceso dental: Una higiene bucodental poco rigurosa, que favorece la aparición de lesiones cariosas o enfermedades periodontales. Una dieta poco equilibrada con alto contenido en azúcares. Enfermedades que suponen una debilitación del sistema inmunológico como, por ejemplo, la diabetes. Por lo tanto, entendiendo estos factores de riesgo, los especialistas recomiendan una serie de pautas que pueden ayudar a prevenir la formación de un absceso dental. Entre ellas, destacan las siguientes: Cuida la higiene de tu boca. Recuerda la importancia de cepillarte los dientes después de cada comida para eliminar de manera efectiva la placa bacteriana. Haz uso de elementos complementarios de higiene tales como el hilo dental o los cepillos interproximales. Solo así lograrás una limpieza oral completa. Mantén una dieta equilibrada y bebe una cantidad de agua aceptable. Así mantendrás los niveles de segregación de saliva adecuados. Acude a tus revisiones con el especialista para que verifique el buen estado de tus dientes y encías. Una caries extensa, un fuerte traumatismo o las enfermedades periodontales son las principales causas de los abscesos dentales. ¿Cómo se realiza el diagnóstico de un absceso dental? Ante los síntomas descritos, resulta de vital importancia una pronta visita al especialista. De esta manera, se podrá atajar de manera debida la infección y ésta no comportará mayores complicaciones. Para realizar un diagnóstico adecuado, el especialista examinará el tejido y la pieza afectados, y realizará una serie de radiografías para localizar el absceso y discernir el alcance de la infección. Te interesará »  Si es tan importante para nuestra higiene, ¿por qué no usamos nunca el hilo dental? Además, en algunas ocasiones el tratamiento antibiótico no resulta efectivo. En ese caso, está recomendada la realización de una serie de pruebas que detecten qué tipos de bacterias están afectando la zona. De esta manera, el odontólogo podrá cambiar la medicación y pautar un tratamiento adecuado. ¿Qué tratamiento es el más adecuado para el absceso dental? Los especialistas que bordan un caso de absceso dental tienen dos objetivos fundamentales: erradicar el proceso infeccioso y conservar la pieza dental afectada en boca. Para atajar la infección, el odontólogo prescribirá un tratamiento antibiótico. Frenando el proceso infeccioso, se evitan complicaciones posteriores de mayor envergadura. El tratamiento a base de antibióticos es más frecuente en aquellos casos en los que la infección se haya extendido a otras zonas más allá del absceso, o cuando el mismo afecta a personas con un sistema inmunológico debilitado. Con el fin de preservar la pieza en boca, está recomendada la realización de una endodoncia. Eliminando el tejido infectado y sellando

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¿Cómo cepillarse los dientes correctamente?

Aunque es un hábito que repetimos varias veces al día y que nos enseñaron a hacer cuando éramos niños, los datos demuestran que los españoles no nos cepillamos los dientes correctamente. Y que, por tanto, la higiene bucal diaria es una de las asignaturas pendientes tanto de pequeños como de mayores. Son muchos los estudios que han profundizado sobre este tema con el objetivo de concienciar a la población de la importancia de un buen cepillado de dientes.   ¿Nos cepillamos bien los dientes? El citado informe concluyó que los niños españoles suspenden a la hora de lavarse los dientes, tanto en lo que respecta al tiempo como a la forma de cepillarse. Una de las conclusiones más llamativas del estudio, en el que han participado mil familias, afirma que el 33,6 % de los niños se cepilla únicamente las piezas dentales delanteras, obviando el resto de dientes que hay en la boca. Además, sitúa el tiempo de cepillado inferior al adecuado, ya que el 43,1% de los niños emplea menos de dos minutos, que es la duración recomendada por los dentistas. En este punto, es especialmente importante tanto el ejemplo como los hábitos enseñados por los padres. Dado que muchos adultos también tienen dudas acerca de la frecuencia, duración y técnicas de higiene bucal adecuadas, en este artículo vamos a darte unas sencillas pautas para que puedas mejorar tu cepillado y enseñar una buena rutina a los más pequeños. Para prestar atención a todos los dientes y evitar olvidos, lo mejor es dividirlos en dos grupos (superiores e inferiores) y seguir siempre el mismo orden ¿Cómo cepillarse los dientes correctamente? Antes de explicar cómo debe realizarse el cepillado, es necesario resaltar la importancia del cepillo de dientes. En primer lugar, hay que aclarar que tanto el manual como el eléctrico son igualmente válidos. Lo que sí es importante es que el cepillo de dientes esté limpio y en buen estado. Como norma general, debe cambiarse cada tres meses, o incluso antes, si advertimos que está muy desgastado. En lo que respecta a la frecuencia y la duración, lo más recomendable es cepillarse los dientes después de cada comida (alrededor de tres veces al día) y durante aproximadamente dos minutos. Es frecuente que nos cueste llegar a los dos minutos y desistamos antes de tiempo. Para evitar esto, podemos recurrir a unos sencillos trucos, como pueden ser usar un reloj o hacer algo que nos entretenga mientras nos cepillamos, como, por ejemplo, ver la televisión. ¿Cuál es la mejor técnica de cepillado? Una vez que tenemos claro cuál debe ser la frecuencia y la duración, es importante recalcar cuál debe ser la técnica, lo que generalmente crea más dudas. En primer lugar, debemos añadir al cepillo una pasta de dientes con flúor (casi todas lo contienen). La pasta debe usarse de manera moderada, ya que si añadimos demasiada cantidad se generará exceso de espuma, lo que no favorece la limpieza. Para asegurarnos de que prestamos a todos los dientes la misma atención, podemos dividirlos en dos grupos (superiores e inferiores) y seguir siempre el mismo orden. De esta manera, crearemos una rutina, nuestro cepillado será minucioso y evitaremos olvidos.   PASTA DE DIENTES EN EL CEPILLO 1 – Dientes superiores Caras exteriores Para empezar a cepillar las caras exteriores de los dientes superiores, abrimos ligeramente la boca y colocamos el cepillo perpendicular al diente, levemente inclinado hacia la encía. De esta manera, realizamos varias veces movimientos circulares suaves para que las cerdas del cepillo abarquen dientes y encías. Al estar también en contacto el cepillo de dientes con la encía es muy importante que el movimiento sea suave y no ejerza presión sobre la misma. De hacerlo incorrectamente, ésta acaba sufriendo daños. Por ejemplo, hay muchas personas que vienen a nuestra consulta con las encías retraídas por culpa de un cepillado agresivo. A la hora de explicar cómo de suave debe ser este movimiento, se puede decir que cepillarse los dientes se asemeja a barrer. Es decir, no por no por barrer más fuerte, vas a barrer mejor y quitar más suciedad. Caras interiores Una vez que hemos terminado con las caras exteriores, pasamos a las caras interiores. Para cepillarnos las caras interiores tendremos que hacer dos movimientos diferentes: uno de colmillo a colmillo y otro para el resto de los dientes. Empezaremos por la parte posterior de la boca y seguiremos realizando pequeños movimientos circulares, para lo que utilizaremos únicamente la parte delantera del cepillo de dientes. Una vez que llegamos a los colmillos, comenzaremos a realizar un movimiento de barrido utilizando ya todo el cepillo. Caras triturantes Para terminar con los dientes superiores, cepillaremos las caras triturantes, que se limpian mediante movimientos de barrido horizontales. Este es el movimiento que menos problemas plantea ya que la mayoría de la gente lo hace así de manera natural. 2 – Dientes inferiores Una vez que nos hemos ocupado de la higiene de los dientes superiores, continuamos con los inferiores. La técnica que se va a utilizar es la misma que hemos descrito anteriormente. En primer lugar, colocamos el cepillo perpendicular al diente para hacer la limpieza en el mismo orden: caras exteriores, interiores y, por último, triturantes. 3 – Lengua Una vez cepillados todos los dientes, no debemos olvidarnos de limpiar la lengua, donde se acumulan gran cantidad de restos de alimentos. Para ello, lo más recomendable es utilizar un raspador lingual. Para proceder con la limpieza, lo primero que tienes que hacer es sacar la lengua y colocar el raspador en la parte más posterior que puedas. Si te decimos esto es porque a muchas personas el raspador lingual les genera náuseas. Por tanto, ten cuidado de no llevarlo demasiado atrás. Una vez que estés en la parte posterior de la lengua, haz un barrido desde atrás hacia delante. RASPADOR LINGUAL PARA LA LIMPIEZA DE LA LENGUA Complementos al cepillado: seda dental y colutorio Además del cepillo y la pasta dentífrica, es fundamental complementar la higiene conotros dos elementos: seda dental o cepillo interproximal y colutorio. En este punto es importante resaltar que aunque su uso sea importante, estos productos nunca deben sustituir a un cepillado minucioso. Por un lado, la seda dental debe utilizarse una vez al día para limpiar los restos de comida que hayan podido quedarse entre los dientes. En el caso de que los espacios entre los dientes sean grandes, debe utilizarse un cepillo interproximal. Por otro lado, el

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¿Qué relación hay entre una mala mordida y mi salud?

Corregir la sonrisa es la máxima prioridad en los tratamientos odontológicos como la ortodoncia, pero no sólo a nivel estético; también a nivel funcional. ¿Sabías que una mala mordida puede afectar a tu salud? ¿Qué relación tienen? La mala mordida es un problema muy habitual por el que muchos pacientes deciden acudir a la consulta. En estos casos la ortodoncia es la mejor opción. Y cada vez son más los pacientes que son conscientes de que la ortodoncia va mucho más allá de la estética. De hecho, según diversos estudios una mala mordida tiene diversas consecuencias sobre la salud. Pero, ¿Cuál es el origen de una mala oclusión? Estas son las causas más habituales: Hábitos en la infancia: chuparse el dedo, uso excesivo del chupete y el biberón… Pérdida prematura de dientes. Bruxismo. Factores genéticos. El tratamiento más habitual para solucionar estos problemas es la ortodoncia. En la actualidad existen muchos tipos de ortodoncia, en función de si queremos preservar o no la estética. Corregir estos problemas cuanto antes es fundamental para evitar diferentes consecuencias sobre la salud, que pueden alterar la calidad de vida diaria. ¿Cuáles son? ¿Cómo afecta una mala mordida a mi salud? Estos son algunos de los efectos de la mala oclusión sobre la mordida: Dolor de cabeza. La mala oclusión conlleva una serie de descompensaciones musculares que pueden provocar casos de cefalea intensa o migraña. Dolor cervical. Esto es especialmente grave en deportistas, ya que puede alterar su rendimiento. Desequilibrios posturales. Un estudio reciente de la Universidad de Barcelona y la Universidad de Innsbruck revela que la mala oclusión dental puede afectar al control de la postura, además de provocar fatiga. Dolor de mandíbula. No es la primera vez que hablamos de los efectos la salud bucodental sobre la salud general. Estas son otras complicaciones que también pueden alterar tu bienestar. El bruxismo es otro síndrome que puede provocar dolores de cabeza y contracturas musculares. Se trata del hábito inconsciente de apretar y rechinar los dientes. En general este hábito se produce por las noches, por lo que no somos conscientes de que lo padecemos. Y ese es el gran peligro del bruxismo: a la larga puede provocar, sin que nos demos cuenta: dolores de cabeza muy intensos y otras molestias musculares. El estrés y una mala oclusión son las principales causas del bruxismo, según diversos estudios. La salud bucodental y la salud general siempre han estado muy relacionadas. Por ello si queremos mantener una buena salud es importante cuidar nuestra boca, y viceversa. Si tienes cualquier duda sobre los efectos de la salud bucodental sobre la salud general pregunta a nuestros profesionales. En las clínica dental SanCal concebimos nuestros tratamientos como un todo para conseguir una sonrisa y también tu bienestar.

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Herpes labial: ¿qué es y cómo se cura?

Aunque haya quienes no lo han tenido nunca, todos sabemos lo que es un herpes labial e, incluso, conocemos personas que lo sufren de manera frecuente. Y es que éste es un virus que tiende a reaparecer una vez que lo hemos padecido una vez. Sin embargo, aunque ésta sea una afección con mucha prevalencia entre la población, lo cierto es que existe desconocimiento acerca de qué es exactamente un herpes labial y cuáles son sus causas. Por eso, en este artículo queremos despejar todas las dudas. Si padeces un herpes, vamos a explicarte cuál es el tratamiento a seguir y cómo evitar que vuelva a aparecer. En cambio, si eres de los afortunados que no lo han sufrido todavía, vamos a decirte cuáles son los primeros síntomas que se experimentan para que puedas identificarlo y cómo prevenirlo.  IMAGEN HERPES LABIAL El herpes labial se contagia por contacto directo con la saliva o la herida de la persona y dura entre una semana y quince días. ¿Qué es el herpes labial? El herpes labial es una infección común que, tal y como su nombre indica, aparece en la zona de los labios y se manifiesta con unas pequeñas ampollas, comúnmente llamadas calenturas. Estas ampollas, además de ser muy antiestéticas a simple vista, provocan dolor y molestias a la persona que las padece. Y, lo que es más importante, son un foco de contagio. Por tanto, si tenemos un herpes es necesario que sigamos una serie de precauciones para no contagiar a otra persona. En este punto, es conveniente recordar la diferencia entre un herpes y una llaga en la boca o afta, ya que es frecuente confundir ambos términos. La diferencia fundamental entre ellos es que las llagas son heridas de color blanco o amarillento que aparecen en cualquier parte de la boca y no son contagiosas. Lo que sí tienen en común es que, al igual que ocurre con las calenturas, hay personas que tienen más predisposición que otras a tener llagas en la boca.  LLAGA BLANCA EN LA BOCA Causas: ¿a qué se debe? El herpes labial está causado por el virus del herpes simple tipo 1 (VHS-1). Tal y como hemos adelantado previamente, es contagioso y se transmite a través de un contacto directo con la saliva o la lesión activa. Por ejemplo, una forma de contagio habitual es la de compartir objetos de uso personal con alguien que tiene un herpes (vasos, pintalabios, toallas, cuchillas de afeitar, pajitas…). Por lo general, el herpes aparece por primera vez en niños o menores de 20 años y luego reaparece posteriormente en la edad adulta. Hasta que se elimina por completo, la infección pasa por varias fases o etapas. Y, una vez que la persona se ha curado, el virus se vuelve inactivo durante un tiempo y permanece de por vida en los tejidos nerviosos de la cara. De esta manera, el herpes tiende a reaparecer posteriormente de manera espontánea o debido a una serie de factores desencadenantes. Dichos motivos pueden ser: Estrés, falta de descanso o enfermedad: Los problemas de salud, así como la falta de sueño o el estrés, contribuyen a la bajada de defensas, lo que facilita el desarrollo de cualquier virus. Cambios hormonales: Los cambios hormonales como los que ocurren durante la menstruación o el embarazo suponen cierto riesgo para las mujeres, ya que muchas veces el brote se produce en estos periodos. Exposición al sol: La exposición a los rayos ultravioletas a lo largo de nuestra vida daña la piel en general y la de los labios en particular, por lo que es importante utilizar protección solar. Frío: El frío y el viento propios del invierno secan los labios, por lo que también en esta época es necesario protegerlos con productos específicos. CONTAGIO HERPES POR CUCHILLA DE AFEITADO ¿Cuáles son los síntomas del herpes labial? El virus del herpes labial presenta una serie de síntomas. Algunos de ellos son muy visibles -la propia ampolla- pero otros pueden pasar inadvertidos, ya que corresponden a una fase muy inicial. Dado que saber identificarlos juega un papel importante, a continuación vamos a decirte cuáles son las señales más comunes: Hormigueo, quemazón o picazón en una zona en la que todavía no hay una ampolla: aparece en una fase inicial, cuando el herpes no es visible. Inflamación y enrojecimiento en la piel que rodea la zona de la ampolla: son los primeros signos visibles del herpes. Ampolla o pequeño conjunto de ampollas rellenas de líquido transparente. Tratamiento: ¿cómo curarlo? Las calenturas se curan de manera natural con el paso de los días. Sin embargo, si tienes dolor y molestias, puedes consultar a tu médico o acudir a la farmacia para comprar algún medicamento que alivie los síntomas. Dicho esto, es importante resaltar que las medicinas o productos que se utilicen -normalmente geles o cremas- sirven para aliviar el dolor y las molestias, así como para acelerar el proceso de cicatrización, pero no curan el virus como tal. La curación del virus sigue un proceso natural que tiene una duración de entre una semana y quince días. Por tanto, éste desaparecerá aunque no sigamos un tratamiento. A grandes rasgos, se puede decir que las fases del herpes labial son las siguientes: Aparición de la ampolla: tras los primeros síntomas, la mancha roja se convierte progresivamente en una o varias ampollas Rotura de la ampolla: la o las ampollas se rompen, empiezan a supurar un líquido transparente y se convierten en una herida abierta Formación de la costra: la lesión empieza a secarse y se forma paulatinamente una costra Cicatrización de la herida: la costra se cae y deja paso a la nueva piel que ha ido generando nuestro cuerpo. En este momento, el herpes está curado FASES DEL HERPES EN EL LABIO ¿Cómo prevenir el herpes labial? Como hemos mencionado con anterioridad, una vez que se ha tenido, el herpes tiende a reaparecer. Por eso, las personas que lo han padecido suelen sufrirlo varias veces en su vida. Dada la prevalencia que tiene

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