Clínica Sancal

Clínica dental SanCal

Estética dental

Diferencias de coronas dentales de zirconio y porcelana

La corona dental es la parte visible del diente, un implante o un puente dental, se puede colocar por varios motivos; para proteger al diente, si el diente está dañado (roto, con caries, desgastado…), manchado o por otros motivos estéticos. Mucho sabemos acerca de las ventajas que las coronas dentales traen, tanto para nuestra salud como para la estética de nuestra boca. Sin embargo, el hecho de que su uso esté hoy tan difundido, ha ocasionado que existan muchos tipos diferentes de coronas dentales. Coronas dentales, ¿de qué material? Muchos son los motivos que nos pueden llevar a requerir de la aplicación de coronas dentales. Ya sea que el diente esté dañado o que necesitemos utilizarlas luego de un procedimiento de endodoncia, se trata de uno de los tratamientos más frecuentes. Por esto, es importante que conozcamos las diferencias entre los distintos estilos de coronas dentales que podemos llegar a encontrar. Dos están en el centro de nuestra atención hoy y vamos a hablar al respecto.   Las coronas dentales de porcelana  La primera característica que podemos destacar acerca de las coronas dentales de porcelana – también conocidas como coronas dentales de cerámica – tiene que ver con su valor estético. Se trata del estilo que más fácil se asemeja al color de los dientes blancos naturales. Dentro de las principales ventajas de estas, podemos destacar las siguientes: Debido a que no están fabricadas a base de ningún tipo de metal, no generan coloración grisácea en el área de las encías con el paso del tiempo. Ofrece uno de los mejores resultados estéticos, debido a que se asemeja a la perfección a los dientes naturales, logrando que no se note posteriormente la diferencia entre el diente tratado con corona y los demás. No generan tipo alguno de alergia y son altamente biocompatibles. Por su parte, no todo son beneficios con este estilo. Dentro de sus desventajas, podríamos destacar, principalmente, su resistencia. A diferencia de las coronas dentales de materiales más duros como el metal, éstas son un tanto más proclives a romperse si se presentan golpes fuertes en la zona de la boca. El zirconio en las coronas dentales Siendo su uso relativamente nuevo, este material es el que ha permitido a muchos especialistas diseñar coronas dentales sin necesidad de acudir a las aleaciones de metal. Se trata, en este sentido, de uno de los materiales más innovadores en lo que a coronas dentales refiere. Entre sus ventajas, podemos hablar de las siguientes: Se trata de un material íntegramente blanco y traslúcido, lo que brinda un aspecto mucho más natural, permitiendo que la luz pase a través del diente. Su superficie lisa limita considerablemente la adhesión de las bacterias a la dentadura. Reducen las sensaciones de sensibilidad ante las diferentes temperaturas de los alimentos y las bebidas. Son mucho más resistentes que las coronas dentales fabricadas en base a 100% porcelana o cerámica, pero sin necesidad de acudir al metal. Al igual que en el caso anterior, éstas no generan coloración grisácea en las encías con el paso del tiempo.     Diferencias entre coronas porcelana 100% y Zirconio El zirconio a diferencia de la porcelana 100%, permite aumentar la resistencia hasta el punto de poder igualarse a las coronas de metal-cerámica. El zirconio puede igualarse al color y traslucidez exacto de un diente natural, en cambio las coronas de porcelana pura son trasparentes y no pueden reemplazar los dientes oscuros con una tonalidad gris. Ambos tipos de coronas, tanto 100% porcelana como zirconio, al no tener estructura metálica debajo, nunca se verán bordes grises en el caso que la encía se retraiga con el paso del tiempo.

Ortodoncia

Paladar ojival o estrecho: ¿a qué edad debe tratarse? ¿Qué problemas ocasiona el no tratarlo?

Hay determinados problemas de salud o cuestiones relativas a nuestro desarrollo sobre los que debemos actuar a edades tempranas, cuando somos niños. De esta manera, podrán ser solucionados de forma más sencilla, rápida y eficaz. Como no podía ser de otro modo, esto sucede en Odontología y es particularmente evidente en lo que respecta a las maloclusiones que tratamos en la especialidad de Ortodoncia. Dentro de este área, las maloclusiones con las que nos encontramos con más frecuencia son la mordida cruzada, la mordida abierta, la sobremordida o los dientes apiñados. Pero, además de éstas, también hay otra alteración muy frecuente en el desarrollo bucodental de los niños: el paladar ojival o estrecho.   ¿Qué es el paladar ojival? Antes de comenzar a detallar qué es exactamente el paladar ojival, cuáles son sus causas o cómo se trata, es necesario entender cómo funciona esta parte de la boca. El paladar se encuentra en la zona superior de la cavidad oral. Tiene una forma abovedada y puede ser alcanzado por la lengua cuando movemos ésta hacia arriba. Está dividido en dos partes: la parte anterior (paladar duro) y la parte posterior (paladar blando). Mientras el primero está formado por dos huesos (el maxilar y el palatino), el segundo corresponde a tejido muscular. Si, por el motivo que sea, los huesos no se desarrollan correctamente durante la etapa de crecimiento y son más estrechos de lo debido, el paladar se curva aún más y su forma abovedada se vuelve más pronunciada. De esta manera, nos encontraríamos ante un paladar ojival o estrecho cuya estructura ósea necesitaría ser ensanchada mediante un tratamiento de ortodoncia interceptiva.     PARTES DEL PALADAR ¿Cuáles son sus causas? Las causas del paladar estrecho pueden ser de origen congénito o deberse a hábitos adquiridos cuando somos niños o bebés. Los tres motivos principales son los siguientes: Respiración oral, es decir, por la boca, en lugar de por la nariz. Este hábito surge como consecuencia de una obstrucción nasal crónica causada por vegetaciones, desviación del tabique nasal, etc. Succión del dedo pulgar  Uso prolongado del chupete     SUCCIÓN DEL DEDO PULGAR EN NIÑOS ¿Cómo se detecta el paladar estrecho? Los padres pueden detectar anomalías en la respiración de sus hijos así como ser conscientes de hábitos teóricamente perjudiciales para ellos, como chuparse el dedo o usar el chupete de manera prolongada en el tiempo. Te interesará »  Tipos de ortodoncia para adultos Sin embargo, es complicado que sean éstos los que detecten el paladar ojival. Por eso, es recomendable llevar a los niños a una clínica dental para que sean revisados por el ortodoncista a los seis años de edad. La edad de seis años no es casual, sino que se considera adecuada ya que permite comenzar, en caso de que sea necesario, con un tratamiento de ortodoncia interceptiva. Es habitual que el paladar estrecho vaya acompañado de otras maloclusiones dentales como la mordida cruzada, los dientes torcidos o el apiñamiento. ¿Qué problemas ocasiona? El paladar ojival tiene una serie de consecuencias en el resto de la boca. Por tanto, cuando un paciente presenta esta deformidad, tendrá, casi con toda probabilidad, problemas en la oclusión y el alineamiento de sus dientes. Dicho esto, el paladar estrecho suele ir acompañado de: mordida cruzada, dientes apiñados, piezas dentales torcidas, etc.   Tratamiento: ¿cómo se corrige el paladar ojival? Tal y como hemos avanzado al inicio de este artículo, es posible corregir un paladar estrecho cuando somos niños, entre los seis y los doce años de edad. Esto se debe a que hasta los doce años aproximadamente es posible actuar contra los huesos, ya que no han terminado su fase de crecimiento y aún son moldeables. Por ello, la corrección de esta alteración consiste en ensanchar el paladar aplicando fuerzas laterales mediante un aparato de ortodoncia interceptiva: el expansor o disyuntor palatino.   DISYUNTOR DEL PALADAR ¿Cómo funciona el expansor o disyuntor palatino? El expansor o disyuntor palatino se ancla en los dientes de la arcada superior, concretamente en los molares posteriores. Este aparato tiene en el centro un mecanismo que permite realizar fuerza hacia los ladosdel maxilar superior. Así, poco a poco consigue el ensanchamiento deseado del hueso del paladar. El disyuntor palatino se coloca de manera fija en la boca y suele llevarse entre siete meses y un año. Sin embargo, el tiempo de tratamiento depende del caso concreto de cada niño, del grado de estrechamiento de su paladar y de cómo responda a la ortodoncia. Una vez que se haya conseguido la expansión planificada, el niño tendrá un paladar que se desarrollará correctamente durante el resto de su etapa normal de crecimiento.   EXPANSOR PALATINO: ANTES Y DESPUÉS ¿Es necesario un tratamiento posterior al expansor palatino? El hecho de que el paladar cuente con el desarrollo adecuado, no quiere decir que no sea necesario llevar a cabo un tratamiento de ortodoncia posterior. Por ejemplo, es posible que, aunque las dimensiones del paladar sean las adecuadas, sea necesario corregir el apiñamiento de los dientes y, por tanto, alinearlos. Te interesará »  Precio de la Ortodoncia Invisible La corrección del apiñamiento dental se llevará a cabo en la adolescencia del paciente, es decir, a partir de los doce años. En este momento, ya se podrán utilizar los tratamientos propios de adultos, como aquellos basados en distintos tipos de brackets o los alineadores Invisalign. Acude con tu hijo al ortodoncista. Te recomendamos que lleves a tu hijo al ortodoncista por primera vez cuando tenga seis años. Los tratamientos dentales en niños son mucho más sencillos, rápidos y baratos que en adultos. ¿Qué consecuencias tiene no tratar un paladar estrecho? Si no tratamos el paladar ojival cuando el paciente es aún un niño, es decir, cuando sus huesos están todavía en crecimiento, el tratamiento cuando sea un adulto será mucho más complicado. Esto se debe a que el expansor del paladar no puede utilizarse en personas adultas, ya que sus huesos están completamente desarrollados. Es decir, en los adultos, en lugar de utilizar un simple aparato como es el disyuntor palatino durante unos meses, tendremos que recurrir a la cirugía ortognática. Esto es un tipo de operación maxilofacial que sirve para mover y recortar los huesos de la cara en personas adultas cuyos huesos ya no son moldeables. Como no podía ser de otra manera, el tratamiento quirúrgico

cirugía e implantes

Implantes y prótesis dental provisional

Las prótesis dentales provisionales son una de las últimas soluciones en implantología oral, y es que en la actualidad, puedes recuperar tu sonrisa desde el primer día en el que sales de la clínica. ¿Cuándo se colocan los implantes y prótesis provisionales? Si te gustaría saber si puedes ponerte o no las prótesis dental es necesario primero hacer una exploración de tu estado bucal para saber si tienes alguna enfermedad periodontal o si no tienes suficiente hueso dental. En el caso en el que el hueso es el adecuado y la distribución del implantes favorable, se pueden colocar los dientes provisionales en la misma cita en la que se colocar tanto el implante propiamente dicho, cómo su funda dental.   Ventajas de las prótesis provisionales Este tipo de tratamientos tiene gran cantidad de beneficios, tanto estéticos cómo de salud: Disfrutas de tus dientes desde el primer día, ya que al colocar una funda provisional puedes hacer vida normal, hasta la colocación de la corona definitiva. Se evita, en parte, el colapso de los tejidos blandos (que se hunda la encía). Se empieza a trabajar sobre la estética de la encía y del diente. Acortando el tiempo total de tratamiento. Permite  acostumbrase a los nuevos dientes. Ya no sientes complejos al sonreír (este tipo de implantes inmediatos, están especialmente indicados para aquellas personas con pérdidas de piezas dentales en la zona de la sonrisa).   DOLOR POSTOPERATORIO IMPLANTES DENTALES   Así, el paciente sale de la consulta con dientes que puede usar y disfrutar desde el primer momento en que se colocan los implantes, mejorando enormemente su calidad de vida. Pero cuidado, cómo decimos son provisionales Es cierto que este tipo de tratamiento son ideales para que recuperes la funcionalidad mandibular rápidamente, pero es indispensable que tengas claro, que su duración tiene fecha de caducidad y que si no los cambias una vez hayan terminado de cicatrizar los implantes (unos 3 meses), y se sustituyan por los definitivos de porcelana, estos podrán romperse. Esto se debe a que las piezas provisional están hechas de resina, con lo cuál duran mucho menos. Si tienes más dudas sobre las prótesis provisionales no dudes en ponerte en contacto con nuestra especialista en implantes. La Dra. Sánchez revisará tu caso concreto para que conozcas mejor este tratamiento en tu caso en concreto a partir de la realización de un diagnóstico y un plan de tratamiento. Además no tendrás que dejarlo pasar por mucho tiempo, pues contamos con facilidades de pago disponibles para ti. Pide tu cita

Estética dental

Gingivectomía estética: solución rápida, sencilla y eficaz para la sonrisa gingival

Hay algunas personas que al sonreír muestran una cantidad de encía que resulta antiestética, ya que es mayor de lo habitual. Es decir, la encía tiene un protagonismo excesivo y el diente parece muy corto o pequeño. Esto es lo que se conoce con el nombre de sonrisa gingival. Dado que para muchas personas dicho exceso de encía supone un problema complejo, existe una pequeña intervención quirúrgica que permite disminuir la cantidad de encía que mostramos cuando sonreímos. Dicha operación es la gingivectomía estética. ¿Qué es la gingivectomía estética? La gingivectomía es un sencillo procedimiento quirúrgico que consiste en recortar ligeramente la encía que rodea el diente. De esta manera, se descubrirá más la pieza dental y se conseguirá una mejora notable en la sonrisa, que será más proporcionada y estética. Con ello, los dientes parecerán más grandes, más largos y menos cuadrados. La gingivectomía estética es un tratamiento muy agradecido: rápido, previsible e indoloro. Además, consigue unos resultados muy visibles y satisfactorios ¿Cuándo se realiza una gingivectomía estética? Se puede recurrir a la gingivectomía estética cuando la causa del exceso de encía se debe a alguno de los tres supuestos siguientes: 1. Erupción pasiva alterada (EPA) La erupción pasiva alterada (EPA) es un trastorno que se produce cuando tiene lugar el crecimiento natural de los dientes, el cual termina entre los 14 y los 16 años de edad. La EPA provoca una alteración en la erupción de las encías, que hace que éstas no se retiren lo suficiente y, por tanto, cubran demasiado esmalte dental. 2. Sobrecrecimiento del maxilar superior   SOBRECRECIMIENTO DEL MAXILAR SUPERIOR  Otra de las causas dela sonrisa gingival es el sobrecrecimiento del maxilar superior. Dicha alteración en el crecimiento de los huesos maxilares va acompañada, habitualmente, de una erupción pasiva alterada a menor escala. Dicho esto, una gingivectomía estética serviría para mejorar, en parte, la estética de la sonrisa. Sin embargo, para conseguir la mejor solución estética tendríamos que recurrir a la cirugía ortognática. Esto sucede porque la causa principal del exceso de encía es un crecimiento óseo mayor de lo normal. Por tanto, dicho hueso debe ser reducido y la única forma de hacerlo es recortándolo mediante una intervención quirúrgica que realiza el cirujano maxilofacial. La cirugía ortognática siempre se combina con ortodoncia. Primero se lleva a cabo una fase de ortodoncia para colocar los dientes en la posición adecuada. Esto se hace porque el sobrecrecimiento del maxilar superior va acompañado de una clase II, en la que los dientes superiores están adelantados. Por tanto, la ortodoncia servirá para solucionar la posición de las piezas dentales. 3. Bruxismo Las personas bruxistas tienen el hábito de apretar los dientes, lo que provoca en los mismos un desgaste. Este desgaste continuado en el tiempo hace que los dientes se vayan erosionando y haciendo más pequeños. Y, por tanto, que se exponga la encía. Además de esto, los dientes superiores tienen una tendencia natural a buscar el contacto con los de la arcada inferior para poder realizar una correcta oclusión. Al ser cada vez más pequeñas, las piezas dentales de la arcada superior tienden a erupcionar llevando consigo la encía. En estos casos, y debido a que se ha producido un desgaste irreversible del diente, será necesario cubrir la pieza dental con carillas o coronas de porcelana. Antes BRUXISMO (ANTES DE LA GINGIVECTOMÍA) Después   BRUXISMO (DESPUÉS DE LA GINGIVECTOMÍA) La técnica quirúrgica En la Clínica Dental SanCal realizamos la gingivectomía estética mediante un bisturí eléctrico. Dicha intervención también puede llevarse a cabo con un bisturí láser. Sin embargo, nuestros periodoncistas utilizan el bisturí eléctrico ya que hace que el procedimiento sea más preciso, indoloro y cause menor sangrado. Además, consigue algo muy importante: evitar el retorno de la encía. Este tratamiento de cirugía gingival se realiza con anestesia local, por lo que el paciente no siente ningún tipo de dolor. Por otro lado, conlleva unos puntos de sutura muy finos (utilizados comúnmente en oftalmología) que se quitarán al cabo de una semana. En ocasiones, además de recontornear el tejido blando (encía), es necesario realizar una osteotomía, es decir, un recontorneado del hueso. Esto se realiza en aquellos casos en los que el periodoncista considera que se puede producir una recidiva, es decir, que con el tiempo la encía volviera a ocupar la posición previa a la intervención. En cambio, realizando un recorte tanto del tejido gingival como del hueso -de unos 2 milímetros- se conseguirá que los resultados sean siempre permanentes. Animación 3D de una gingivectomía Postoperatorio de la gingivectomía estética El tratamiento de gingivectomía tiene uno de los mejores postoperatorios de todas las cirugías orales que pueden realizarse. Al día siguiente de la intervención el paciente ya puede cepillarse los dientes con un cepillo quirúrgico que ayudará a deshacer el coágulo de sangre que tiende a formarse en el margen gingival. Y, a pesar de que la operación produce un hematoma y una inflamación en las encías, estas señales empiezan a desaparecer en una semana. Así, en el plazo de dos semanas, se conseguirá una recuperación total de las encías. Además de esto, podemos decir que el postoperatorio no resulta doloroso para el paciente, ya que las molestias que pueda padecer podrá paliarlas simplemente con un analgésico. Posibles complicaciones La gingivectomía estética es una cirugía muy predecible por lo que resulta muy poco común que surja algún tipo de complicación. Además, no existen importantes contraindicaciones que impidan a un paciente someterse a esta intervención estética. Por ello, decimos que es un tratamiento muy agradecido. Por un lado, es sencillo, rápido, predecible y no presenta complicaciones importantes. Por otro lado, ofrece unos resultados altamente visibles y satisfactorios. Es por todo lo anterior por lo que someterse a una gingivectomía compensa claramente debido a que presenta grandes ventajas. Su única desventaja pasa por tener la zona de las encías amoratada. Sin embargo, este pequeño inconveniente se solventa en aproximadamente dos semanas. Gingivectomía como solución a problemas de salud Hay algunas ocasiones en las que se produce una excesiva inflamación de las encías por acumulación de sarro. En estos casos, además de tomar cierta medicación, es posible tratarse con una gingivectomía. Esto suele realizarse en aquellos pacientes que llevan brackets y cuya salud de las encías hace peligrar el tratamiento de ortodoncia.   Gingivectomía estética: antes y después En nuestra clínica dental, la doctora

Ortodoncia

Cirugía ortognática: el tratamiento paso a paso

En uno de nuestros últimos artículos abordábamos los principales conceptos del tratamiento combinado de ortodoncia y cirugía ortognática: qué es, en qué consiste y en qué tipos de casos se practica. Por eso, una vez que tenemos claros los aspectos mencionados, vamos a ver en qué se basa, paso a paso, la cirugía ortognática. Los cuatro pasos que llevamos a cabo para someter a un paciente a este tipo de tratamiento son: planificación, intervención quirúrgica, postoperatorio y, por último, seguimiento y ortodoncia.   1. Planificación Aunque todas las etapas del proceso son importantes, la planificación y el protocolo en la preparación del paciente para el día de la cirugía pueden suponer la diferencia entre un caso de éxito y otro que no lo es. El profesional encargado de programar esta fase y, por tanto, el responsable de que el paciente llegue en óptimas condiciones a dicha intervención es el ortodoncista. Esto se debe a que la planificación para la cirugía maxilofacial comienza con un tratamiento de ortodoncia de un año de duración. Dicho tratamiento ortodóncico tiene como objetivo llevar los dientes a una posición adecuada respecto a sus bases óseas. En este punto, conviene recordar las diferencias entre la ortodoncia y la cirugía ortognática. Mientras que la primera actúa sobre los dientes y tiene como objetivo corregir el apiñamiento y alinearlos, la segunda actúa sobre los huesos. Por tanto, dicha operación maxilofacial tiene como objetivo mejorar la oclusión (mordida) de la boca y la armonía de un rostro con proporciones inadecuadas debido al crecimiento anormal de alguno de sus huesos. Debido a que dichos huesos (maxilar superior y mandíbula) se han desarrollado de manera irregular, los dientes se han ido adaptando a ellos, por lo que no están bien alineados. Por eso, cuando se realice la cirugía ortognática y el hueso se establezca en la posición y el tamaño correctos, los dientes no encajarán. Igualmente, es imprescindible recalcar que una intervención de este tipo supone cambios importantes en la estructura ósea del rostro. Dado que dichos cambios se ven reflejados en el aspecto final de la cara del paciente, es fundamental que el ortodoncista lleve a cabo un estudio facial minucioso. De esta manera, se podrá conseguir que la persona que se somete a la cirugía bucal consiga una mejora funcional, de salud y estética. Para realizar dicho análisis, el odontólogo se basará en un estudio radiológico así como en las fotografías y modelos de los dientes del paciente. Una vez haya obtenido el mencionado material, se encargará de hacer las mediciones y cálculos oportunos, que presentará al cirujano maxilofacial el día de la cirugía. La cirugía tiene una duración de cuatro horas y se realiza mediante incisiones intraorales. De esta manera, no se dejan cicatrices visibles. 2. Intervención quirúrgica Al tratarse de un tratamiento combinado en el que están implicados dos profesionales -el ortodoncista y el cirujano maxilofacial-, es fundamental una buena comunicación y coordinación entre ambos. El día de la cirugía, el odontólogo deberá estar presente y el médico interpretará las medidas presentadas por el ortodoncista. De esta manera, podrá aplicarlas a los huesos y realizar así la intervención. La operación tendrá una duración de cuatro horas aproximadamente y se realizará bajo anestesia general. En ella, lo que hará el cirujano será actuar sobre el maxilar o la mandíbula, realizando cortes y movimientos en los huesos. Todo ello lo hará mediante incisiones intraorales para no dejar ninguna cicatriz visible. Una vez que ha colocado dichos huesos maxilares en una posición y un tamaño armónicos, los fijará en el nuevo lugar mediante miniplacas y tornillos de titanio.     MINIPLACAS Y TORNILLOS DE TITANIO Piensa a largo plazo Aunque los primeros días tras la intervención sean duros, te recomendamos que no desestimes el tratamiento por este motivo. Una vez pasado este periodo, los pacientes aseguran que merece la pena debido a la notable mejora que experimentan durante el resto de su vida. 3. Postoperatorio La recuperación del paciente desde que termina la cirugía bucal hasta que puede llevar una vida relativamente normal dura aproximadamente un mes. Y, más concretamente, la baja laboral se extiende por un periodo de dos a tres semanas, aunque depende del tipo de trabajo desempeñado por cada paciente. Si la persona ejerce una ocupación muy activa, que conlleva cierto riesgo o que requiere hablar mucho, necesitará un tiempo de recuperación mayor. Es decir, un deportista, un policía o una persona que trabaje hablando de cara al público tendrá una baja mayor que alguien que está en una oficina y no necesite hablar obligatoriamente. Dentro de esta etapa postoperatoria, las dos primeras semanas son las más complicadas. Eso sí, a los profesionales nos resulta relativamente sorprendente el hecho de que los pacientes aseguren que no sienten dolor. Sin embargo, sí presentan hinchazón facial y encuentran algunos inconvenientes en su rutina diaria: Apenas pueden comer: solamente ingieren alimentos fríos mediante pajitas y jeringas Necesitan llevar puestos unos elásticos durante todo el día Tienen dificultades al respirar, por lo que no se pueden tumbar completamente No hablan con normalidad Transcurridas las dos primeras semanas comienza a notarse la progresión. Es decir, los pacientes pueden empezar a ingerir dieta blanda y solamente necesitan usar los elásticos unas horas al día. Por tanto, su rutina se vuelve más cómoda. Aunque leyendo estas líneas el proceso de recuperación pueda parecer lento y excesivamente incómodo, lo cierto es que las molestias se manifiestan durante un periodo corto de tiempo. Es decir, los primeros días son duros para el paciente. Sin embargo, una vez pasado este periodo, las personas a las que hemos tratado aseguran que la intervención maxilofacial merece la pena si se tiene en cuenta la notable mejora que experimentan durante el resto de su vida.   4. Seguimiento y ortodoncia El siguiente paso una vez realizada la cirugía y superado el postoperatorio consiste en la continuación del tratamiento de ortodoncia durante dos años más. En este punto, lo más importante es conseguir la estabilidad de la oclusión y evitar la recidiva. Es decir, que la boca no vuelva al estado que tenía antes de comenzar la primera fase de ortodoncia. A rasgos generales se puede afirmar que la recuperación de los pacientes con clase III o prognatismo suele ser más rápida que la de las personas con clase II o retrognatia. Asimismo, la recuperación en mujeres se caracteriza por ser más lenta que en hombres.     Sin

Ortodoncia

Tengo sobremordida: ¿qué problemas genera y cómo puedo corregirla?

Dentro de los problemas de maloclusión dental por los que cada día tratamos a nuestros pacientes, la sobremordida es uno de los más comunes. Aunque depende de su grado, la sobremordida no es una de las maloclusiones más visibles, ya que no tiene por qué percibirse al sonreír debido a que no siempre mostramos los dientes inferiores cuando lo hacemos. Y es que se considera que una persona tiene sobremordida cuando sus dientes superiores están más adelantados que los inferiores e, incluso, llegan a cubrirlos -ya sea total o parcialmente-. Por tanto, depende cómo afecte esta posición incorrecta al aspecto estético y funcional del paciente se debe determinar si la sobremordida se soluciona con un tratamiento de ortodoncia o con una combinación de ortodoncia y cirugía ortognática. ¿Qué es la sobremordida? Como acabamos de avanzar, la sobremordida se caracteriza porque los dientes superiores llegan a cubrir verticalmente los dientes inferiores. Ésta suele ser consecuencia de una maloclusión de clase II, en la que el maxilar se encuentra adelantado respecto a la mandíbula. Dado que puede estar presente en diferentes grados, en algunas ocasiones la sobremordida es muy leve y apenas se aprecia. Sin embargo, hay casos de sobremordida profunda en los que, al morder, los dientes superiores tapan totalmente los inferiores. De hecho, se considera sobremordida profunda cuando los incisivos superiores cubren un tercio de los inferiores. SOBREMORDIDA PROFUNDA ¿Qué problemas genera? Ya que existen diferentes grados de sobremordida, cuanto mayor sea éste más importantes serán los problemas que provoque o que lleve aparejados: Apiñamiento en incisivos y/o caninos (colmillos) superiores Mayor probabilidad de caries debido al apiñamiento, que dificulta la higiene bucodental Mayor probabilidad de padecer una enfermedad periodontal debido a la dificultad para mantener la higiene Tensión excesiva en la mandíbula, lo que se traduce en bruxismo y desgastes en los dientes ¿Cómo puedo evitar la sobremordida? Antes de comenzar a detallar en qué consisten los tratamientos para solucionar la sobremordida, es importante destacar que, en muchas ocasiones, la sobremordida no se puede evitar. Esto se debe a que en, en este caso, la herencia genética juega un papel fundamental. De hecho, la mayoría de personas con este tipo de maloclusión tienen antecedentes familiares de sobremordida. Dicho esto, también es verdad que hay hábitos que tienen lugar en la infancia y que pueden contribuir a que los niños desarrollen sobremordida. Estos son la succión del dedo pulgar o el uso del chupete durante un tiempo prolongado. NIÑO SUCCIONANDO EL PULGAR ¿Cómo se puede corregir? En función de la edad del paciente y del grado de sobremordida podemos aplicar diferentes soluciones: Ortodoncia interceptiva (niños): Llamamos ortodoncia interceptiva a aquellos aparatos que colocamos en niños con edades comprendidas entre los 6 y los 11 años aproximadamente y que sirven para guiar el desarrollo de sus huesos maxilares cuando aún están en fase de crecimiento. Dadas las edades tempranas con las que se coloca la ortodoncia interceptiva, con estos aparatos nos centramos únicamente en los huesos. Es decir, no realizamos ninguna corrección en la posición de los dientes. Esto se debe a que entre los 6 y los 11 años por lo general no han erupcionado aún todos los dientes definitivos. Una vez que este proceso ha concluido se podrá comenzar un tratamiento de ortodoncia para corregir la posición dentaria. Ortodoncia (adolescentes y adultos): La diferencia fundamental entre la ortodoncia interceptiva y la que llevamos a cabo en adolescentes y adultos es que con esta última solamente podemos corregir la posición de los dientes. Es decir, ya no podemos realizar modificaciones en los huesos. Los tratamientos de ortodoncia que se pueden llevar a cabo para solucionar la sobremordida son mediante brackets (metálicos, de zafiro o linguales Incognito) o a través de los alineadores Invisalign. Como hemos mencionado anteriormente, cuando existe sobremordida es muy frecuente que también haya apiñamiento. Debido a las diferentes opciones de tratamiento ortodóncico y a que cada problemática debe estudiarse de manera personalizada, el ortodoncista es el profesional adecuado para determinar cuál es la alternativa más indicada.   INVISALIGN: ORTODONCIA SIN BRACKETS Cirugía ortognática (adultos): Aunque lo más frecuente es que la sobremordida pueda ser corregida únicamente mediante ortodoncia, existen casos en los que la causa de esta maloclusión es esquelética. Esto significa que dicha causa se debe a la posición de los huesos maxilares, es decir, a que el problema de mordida no se ha tratado adecuadamente durante la infancia. En los casos en los que la ortodoncia con brackets o con Invisalign no sea suficiente para corregir la mordida, se deberá recurrir a un tratamiento que combine la ortodoncia (normalmente con brackets) y la cirugía ortognática. La cirugía ortognática es una especialidad dentro de la Medicina que tiene como objetivo realizar correcciones en los huesos maxilares de pacientes adultos. Es decir, permite realizar cortes en los huesos para modificar su tamaño o posición. De esta manera, podemos adelantar la mandíbula o retrasar el maxilar superior. En cualquier caso, nuestra recomendación es la de acudir al ortodoncista en cuanto se aprecien los primeros síntomas de sobremordida. De hecho, nunca es demasiado pronto para acudir al ortodoncista, aunque no se haya advertido ningún síntoma. En caso de no advertir ninguna señal, mi consejo personal es llevar a los niños al ortodoncista a los seis años de edad. Si el desarrollo de los huesos es el adecuado, se podrá pautar una revisión un tiempo después para valorar si sigue siéndolo. Y, si se aprecian anomalías en el crecimiento, siempre será más sencillo solucionar cualquier problema de mordida en niños que en adultos, cuando sus maxilares están en fase de crecimiento. Como acabamos de ver, también es posible solucionar la sobremordida en adultos, pero la duración y la complejidad del tratamiento serán siempre mayores.

Sin categoría

¿Duele la ortodoncia?

Si estás pensando en iniciar un tratamiento de ortodoncia, que no sea el miedo al dolor el que te quite la idea de lanzarte a ello. Es cierto que, a lo largo del tratamiento, puedes sentir una serie de molestias, pero los beneficios de la ortodoncia superan con creces el dolor que puedes experimentar. En este artículo te contamos por qué duele la ortodoncia, si existe un método de ortodoncia menos doloroso que el resto y qué puedes hacer para aliviar estas molestias a lo largo del tratamiento. ¿Por qué duele la ortodoncia? El objetivo de los tratamientos de ortodoncia es corregir cualquier tipo de problema de maloclusión. Para ello, se realizan pequeños movimientos de los dientes en las arcadas de manera gradual. De esta forma, las piezas dentales se van colocando en la posición correcta gracias a la presión que ejercen los aparatos en las mismas. Por ello, es importante distinguir entre la sensación de presión que tendrás una vez te hayan colocado el aparato –o en las sucesivas revisiones, en las que se hacen determinados – y el hecho de que la ortodoncia duela. Si el proceso de ortodoncia fuera tan doloroso como nos hacen ver, ¿podrían entonces los niños someterse a este tratamiento? Es importante que desmitifiquemos este dolor y le pongamos el nombre que le corresponde. ¿Cuándo duele la ortodoncia? Si bien el proceso de colocación de los aparatos de ortodoncia es completamente inocuo –sólo generará ciertas molestias derivadas de tener la boca abierta durante un periodo de tiempo más largo al que estamos acostumbrados-, una vez colocados es habitual que la ortodoncia “duela”. Como hemos comentado anteriormente, este dolor es la expresión de la experimentación de una presión a la que no estamos habituados. Estas molestias están causadas por una tensión acentuada en los dientes. Estos dolores se producen, sobre todo, a la hora de morder y en la mayor parte de los casos remiten transcurridos de 2 a 3 días. Serán habituales tanto en el momento de colocación del aparato como después de las revisiones del ortodoncista, cuando éste realiza los reajustes necesarios en los aparatos de ortodoncia. Más allá de sentirte incómodo por la presión que ejercen los aparatos de ortodoncia, es habitual que surjan pequeñas heridas o aftas debido al roce del aparato con la mucosa. Esto es especialmente frecuente en los tratamientos de ortodoncia con brackets y su incidencia se ve disminuida en los procedimientos con Invisalign. ¿A qué otras causas asociamos el dolor en los tratamientos de ortodoncia? En algunas ocasiones, están recomendadas las extracciones dentarias, especialmente en casos severos de apiñamiento. Si este es tu caso, debemos aclarar que las extracciones se realizan bajo los efectos de la anestesia y que, durante el procedimiento, sólo sentirás un ligero pinchazo inicial. Una vez ha remitido el efecto de la anestesia, es habitual que empieces a sentir ligeras molestias. Para mitigar el efecto de las mismas, está recomendada la ingesta de analgésicos. Te interesará »  Efectos de la ortodoncia en 60 segundos De todas formas, no debes preocuparte: el dolor remitirá transcurridos unos tres días aproximadamente desde la extracción. Otro de los procedimientos que pueden generar cierto temor en los pacientes es la colocación de microtornillos en ortodoncia.   Los microtornillos son unos pequeños implantes que se ubican de manera temporal en el hueso con el fin de realizar movimientos más complejos que los aparatos de ortodoncia, por sí mismos, son incapaces de hacer. Se trata de una intervención muy sencilla que, al igual que las extracciones, se realiza bajo anestesia local. El paciente podrá hacer una vida perfectamente normal y, en caso de sentir alguna molestia, podemos recurrir de nuevo a la toma de analgésicos.     INGESTA DE ANALGÉSICOS ¿Todos los sistemas de ortodoncia generan las mismas molestias? Siempre que iniciamos un tratamiento de ortodoncia, asumimos la presencia de un agente externo en la boca. Por este motivo, siempre se requiere un periodo de adaptación del paciente cuya duración depende del tratamiento de ortodoncia elegido. La ortodoncia con alineadores transparentes –Invisalign- requiere un periodo de adaptación más corto, y la incidencia de pequeñas heridas y llagas bucales es bastante menor que en aquellos casos abordados con brackets. Además, es un método que apenas tiene urgencias dentarias derivadas de la caída de un bracket o del roce de un alambre con la mucosa. En el extremo opuesto, encontraríamos los brackets linguales. Si bien este es el método más estético que existe, su colocación supone un periodo de adaptación de unas 2-3 semanas aproximadamente.   APARICIÓN DE LLAGAS POR EL ROCE DEL APARATO DENTAL Es habitual que aparezcan pequeñas aftas bucales o heridas que se curarán transcurridos 3 días, así como roces en la lengua o molestias en el habla. ¿Cómo se pueden calmar las molestias derivadas de los tratamientos de ortodoncia? En función de la causa de esta molestia, podemos distinguir dos tipos de soluciones diferentes: En aquellos casos en los que el dolor esté provocado por la presión que realizan en los dientes los aparatos de ortodoncia, y siempre que el ortodoncista así lo recomiende, se puede recurrir a la toma de analgésicos –paracetamol-.También existen geles anestésicos que podemos aplicar directamente sobre la superficie afectada. Éstos adormecen la zona y reducen la incidencia de las molestias. Si, por el contrario, nos han salido pequeñas llagas o heridas debido al roce de aparato con las mejillas o encías, es recomendable el uso de cera especial para ortodoncia. Aplicando únicamente una pequeña porción y posicionándola en la parte del aparato que nos incomoda, acabaremos con esta molestia.Además, el especialista nos puede recomendar el uso de enjuagues bucales especiales para reducir la incidencia de las aftas bucales y ayudar a su cicatrización. ¿Qué remedios caseros existen para aliviar el dolor causado por la ortodoncia? A lo largo de todo el tratamiento de ortodoncia, te recomendamos seguir una serie de pautas que reducirán las molestias. Te interesará »  ¿Cómo cambia mi sonrisa y mis labios la Ortodoncia? La primera –y más importante- es que seas especialmente cuidadoso con la higiene de tu boca. De esta manera, erradicarás la incidencia de afecciones bucales como, por ejemplo, la caries o de enfermedades periodontales como la gingivitis o la periodontitis. Un buen

Scroll al inicio