Clínica Sancal

Cultura y curiosidades

cirugía e implantes, Cultura y curiosidades

La calidad de los implantes

Si os veis obligados a poneros unos implantes dentales es importante que prestéis atención a la calidad de los mismos, ya que se trata de una operación importante y que debe durar para toda la vida. Para determinar la calidad de los implantes es importante prestar atención a tres variables. La calidad de los materiales Una de las primeras variables para conocer la calidad de los implantes, es la calidad de los materiales utilizados para la misma. En la Clínica SanCal solo utilizamos materiales de implantes Straumann Hi Tech. ¿Y qué les diferencia con aquellos que son low tech?   Los de alta calidad están basados en estudios realizados durante décadas de investigación y experimentación para ofrecer el implante con mejor calidad. Fabricados con una precisión máxima. Su cadena de producción está sometida a exámenes de calidad muy estrictos. Tiene poca tasa de rechazo o fallo del implante dental. Disponen de una garantía si se rompen o estropean. Que los materiales del implantes sean de calidad, evitará que tarde o temprano se tenga que realizar la reimplantación. La reimplantación es un proceso altamente complicado y doloroso para el paciente.   Dra. Sara Sánchez Una profesional implantóloga de calidad Pero no solo se debe atender a la calidad del material de los implantes, sino también hay que tener en cuenta que la persona que va a llevar a cabo el tratamiento sea la adecuada. Los requisitos que debe cumplir un implantólogo de calidad son: Amplia experiencia profesional en la realización de implantes dentales. Que sea un especialista en la clínica dental donde trabaja, es decir, que se dedique de forma exclusiva a la realización de implantología oral. Que lleve a cabo una formación continuada, para adaptarse a los cambios y mejoras de los tratamientos. Nuestra profesional implantóloga, Sara Sánchez. Tiene una amplia experiencia en la realización de este tipo de operaciones y ha llevado a cabo una gran cantidad de tratamientos con éxito. La calidad de la Clínica dental En cuanto a la calidad de la clínica dental es vital que el paciente de implantes dentales se sienta tranquilo y relajado en la clínica en la que va a llevar a cabo su tratamiento. Entre los puntos que destacamos están: Trato personalizado: Es importante que tengas un mismo doctor especializado en implantes dentales, a lo largo de todo tu tratamiento. De esta forma él podrá conocer tus necesidades y ayudarte en todo lo que necesites más fácilmente. Garantía de calidad: que los tratamientos tengan garantías de calidad es importante para saber qué hacer en caso de rechazo de los implantes dentales. Claridad informativa: que la explicación del tratamiento y el postoperatorio sea clara y precisa para que no te queden dudas acerca del tratamiento, ni del presupuesto facilitado. Facilidades de pago: que la clínica disponga de varias formas de pago (tarjeta, domiciliación, financiación…), para que el paciente pueda iniciar su tratamiento lo antes posible. ¿Necesitas saber más? Ve a nuestra página de implantes dentales y te contamos más. Pide tu cita

Buenos hábitos, Cultura y curiosidades

Tabaquismo: ¿Son los vapeadores inocuos?

Hace unos años vimos como una moda estallaba en nuestras calles: el vapeo. El cigarrillo electrónico nos promete dejar de fumar tabaco normal para cambiarlo, y fuera de que éste tenga e efecto prometido o no, lo que nos preocupa es cuán saludable es uso de los vapeadores. Tras algunos años se han publicado determinados estudios por parte del sector académico odontológico. Como en el resto de los campos, cuando se detecta que una novedades es potencialmente peligrosa y podría ser nociva para la salud de los pacientes, se busca realizar ensayos para determinar la inocuidad del producto. Durante el 2012 se realizó una encuesta sobre los vapeadores. Los datos decían que tan solo un 9% de los fumadores había sustituido el tabaco por el vapeador, y un 40% ni siquiera había oído hablar acerca del vapeador. Fue un poco más tarde cuando se desataría la explosión en el mercado, con cada vez más y más tiendas de vapeadores abiertas con agresivas técnicas de marketing. Si bien prácticamente todas las tiendas no duraron mucho más que la propia moda en sí (modas como hemos podido ver que van apareciendo cada cierto tiempo y desaparecen tan rápido como aparecieron) sí que muchas personas han abandonado el tabaco de forma definitiva para pasarse a este tipo de dispositivo. Vapeadores: ¿Qué sabemos de ellos? Los abanderados de los vapeadores nos dicen que el propio vapeo en sí no es más nocivo que un cigarrillo normal y que hay ciertas personas que confeccionan los líquidos en sus propias casas, pero aun y así no tenemos claros cuales son los efectos secundarios tras una exposición de décadas. Lo que sí se supone que está confirmado es que no existen los vapeadores pasivos, eso es al menos lo que dice un estudio realizado en España. Este nos indica que después de haber analizado la presencia de sustancias presentes en ambos productos (tanto en tabaco como en cigarrillo electrónico) determinan que la presencia de la nicotina en los cigarros electrónicos es ínfima si la comparamos con la presencia que deja el tabaco. Esto es una buenísima noticia si tenemos en cuenta que se estima que aproximadamente, uno de cada dos fumadores terminará falleciendo debido a complicaciones debidas al tabaquismo. Además, fumar se calcula que reduce la esperanza de vida aproximadamente en unos 10 años. En el mercado podemos encontrar todo tipo de líquidos, incluidos aquellos que también contienen nicotina. Dependiendo de la marca encontramos diferentes concentraciones de esta nociva sustancia, por lo que no podemos hablar de una determinada peligrosidad. Será la marca la responsable de la formulación de los líquidos. La cantidad de nicotina que contiene este producto es variable, ya que dependerá del líquido que estemos consumiendo. Usualmente y al ser un método para dejar de fumar encontramos concentraciones sensiblemente más bajas que en aquellos cigarrillos tradicionales, pero no por haber menos deja de ser perjudicial para nuestra salud oral. Nicotina: La gran enemiga de la boca Recordemos que la nicotina es extremadamente perjudicial para la sonrisa: esta afecta tanto a la boca, la lengua y las encías. También tiene un impacto negativo relativo al desarrollo de patologías periodontales además de causar problemas como halitosis e inflamaciones orales. Dejar el tabaco debe ser una prioridad para todos aquellos que cuiden su salud., ya no sólo de su sonrisa, sino en general. Pasaremos a explicar de forma rápida y sencilla alguno de los problemas que el tabaquismo causa en nuestra boca. Recesión gingival: La recesión gingival tiene un estrecho vínculo con el tabaquismo. Recordemos que este hábito tiene un impacto negativo en las defensas del cuerpo para combatir la enfermedad de las encías. Además, la combustión del cigarrillo causa algunos cambios en el tejido bucal que pueden favorecer una acumulación de bacterias, por lo que también estaremos favoreciendo el acúmulo de placa. Los fumadores también sufren una disminución de la capacidad de respuesta de los vasos sanguíneos. Esta combinación hace a los fumadores pacientes muy susceptibles a la recesión gingival, y cuando aparece hace que también se multipliquen los efectos. Mal aliento: La presencia de nicotina en el cuerpo también inhibe la secreción salival normal, por lo que es muy normal encontrar a pacientes que sufren de sequedad oral. También puede irritar las mucosas y las vías respiratorias, por lo que muchos pacientes fumadores refieren este malestar general. Por otro lado tanto las sustacias del vapeador como la del tabaco tradicional se adhieren a las mucosas de la cavidad oral, por lo que se genera un olor característico en el aliento. Bruxismo: SI bien sabemos que la causa principal del bruxismo es psicológica, también puede verse afectada incrementando su problema debido a estimulantes como la nicotina, la cafeína u otro tipo de drogas. La cafeína está considerada un estimulante capaz de disparar los músculos, por lo que se aumenta el rechinamiento dental, lo que causa un desgaste oral considerable en la boca. Enfermedades orales y tabaco: Las consecuencias son graves Sabemos que es muy extraño que pacientes no fumadores usen el cigarrillo electrónico, de hecho como antes comentábamos este es usado por pacientes que fumaban más de una cajetilla al día y lo que buscan es reducir el consumo o directamente dejar este hábito. Todavía falta mucho por estudiar y descubrir si realmente existen efectos nocivos derivados del uso del cigarrillo electrónico más allá de los propios de la nicotina, por lo que se recomienda cautela y precaución, siempre utilizar líquidos de marcas de calidad contrastada y una vez dejemos de fumar tabaco tradicional, tratemos de dejar el cigarro electrónico. Aproximadamente en España encontramos 2000 nuevos casos de cáncer oral, una patología cuya tasa de mortalidad es de aproximadamente el 50% a los 5 años. La mejor medida que podemos tomar para evitar esta patología tan grave es dejar de fumar, no sólo el bolsillo nos lo agradecerá enormemente, también nuestra salud mejorará nada más dejar este hábito, y rápidamente notaremos los cambios. Si quieres dejar de fumar pregúntale cómo a tu dentista de confianza, él te explicará los pasos adecuados para que

Buenos hábitos, Cultura y curiosidades, Prevención

Tengo infección de muela: ¿cómo la curo y qué complicaciones puede dar?

Quienes lo han padecido, dicen que el dolor de muelas es uno de los peores dolores que se pueden padecer. Se caracteriza por ser especialmente intenso, persistente y punzante. Y, hasta que se cura, tiene un gran protagonismo en la vida de la persona que lo sufre. El dolor de muelas puede responder a diferentes motivos. Lo más frecuente es que se deba a la aparición de las muelas del juicio -también llamadas cordales- o a la existencia de una infección. En este artículo, vamos a centrarnos en el dolor de muelas a causa de una infección.  A su vez, las infecciones a las que hacemos referencia pueden producirse en cualquier molar, incluidas las muelas del juicio. ¿Por qué se infecta una muela? La infección de cualquiera de nuestras piezas dentales se debe a un problema bacterianoque puede tener, a su vez, diferentes causas: Caries Si la caries no se trata, avanza y se complica su pronóstico. Es decir, las bacterias penetran en el interior del diente (pulpa) y llegan, incluso, a afectar al nervio. En el caso de que se produzca la afectación del nervio, la solución para tratar una caries ya no es un empaste dental -que sería lo habitual- sino una endodoncia o tratamiento de conducto. Enfermedad periodontal (gingivitis y periodontitis) Cuando la gingivitis no se trata, se transforma en una periodontitis, que es una patología que requiere un tratamiento más complejo. Si, a su vez, no nos ponemos en manos de un odontólogo especializado en Periodoncia, la periodontitis avanzará. Dicha enfermedad dará lugar a la destrucción del hueso mandibular -que causa la pérdida de dientes- y a lo que conocemos como bolsas periodontales. Éstas son depósitos que se forman en las encías y se hacen cada vez más grandes para acumular mayor cantidad de bacterias. Traumatismo Cuando un diente se rompe o se astilla por un golpe, también se vuelve vulnerable ante las bacterias. Esto sucede porque en la pieza dental se crea una grieta o un orificio que permite la contaminación de agentes externos. Es decir, esta abertura facilita la entrada de bacterias.   Lesión con objeto punzante En ocasiones, se tiene la costumbre de utilizar palillos o de mordisquear bolígrafos. Sin embargo, este tipo de hábitos -a menudo inconscientes- pueden dañar la salud de la boca. Si nos hacemos una herida, la zona queda expuesta y las bacterias pueden entrar en contacto con nuestra cavidad oral. El tratamiento para curar una muela infectada suele pasar por eliminar la infección mediante antibióticos, realizar una endodoncia o recurrir a una extracción (si es una muela del juicio) ¿Cuáles son los síntomas una infección? La infección de una muela se manifiesta con un absceso (inflamación y acumulación de pus) en la zona donde se encuentra dicha pieza dental.   Unido a ello, la persona experimenta un dolor agudo, persistente y punzante. Pero, además de estas consecuencias, que son compartidas en todos los casos, las muelas infectadas dan lugar a los siguientes síntomas: Dolor al masticar Sangrado de encía Dolor de oído Sabor amargo en la boca Halitosis o mal aliento Fiebre Sensibilidad de los dientes al calor y/o al frío Dolor de garganta Inflamación de los ganglios del cuello Mandíbula inflamada (si es una muela de la arcada inferior) Mejilla inflamada (si es una muela de la arcada superior)   Tratamiento: ¿cómo curar la infección de muela? Los tratamientos para curar las infecciones pueden variar en función de cuál sea el origen de ésta. Sin embargo, el primer paso -una vez contamos con un diagnóstico- es siempre controlar la infección para evitar mayores complicaciones. Y, de esta manera, calmar el dolor ybajar la hinchazón. Para eliminar la infección es necesario el uso de antibióticos recetados por el dentista. En este punto, es necesario recordar que no se debe tomar un antibiótico, o ningún otro tipo de medicamento, sin que haya sido prescrito por un médico u odontólogo. Además de antibióticos, nuestro dentista nos puede pautar medicación analgésica y recomendar enjuagues bucales para calmar el dolor. Una vez que tenemos la infección controlada, en la mayoría de los casos será prioritario tratar de conservar el diente. Para ello, se puede recurrir a una endodoncia o tratamiento de conducto. En cambio, habrá otras ocasiones en las que recurramos a la extracción. Esto puede suceder porque el dentista determina que la muela no se puede salvar o porque la infección afecta a una muela del juicio. Dado que las muelas del juicio no desempeñan un papel relevante en nuestra boca, lo habitual cuando causan problemas es extraerlas. Remedios caseros: ¿qué es bueno utilizar? En algunas ocasiones, nos sentimos tentados de buscar a través de Internet remedios caseros para nuestras dolencias. Sin embargo, es importante saber que no es recomendable intentar solucionar la infección de muelas sin un tratamiento supervisado por un odontólogo. Algunos de los remedios naturales que puedes encontrar en Internet pueden ser colocar sobre la zona algo de lo siguiente: aspirina, clavo en especia, bolsas de té, agua oxigenada, bicarbonato o alcohol.   Si embargo, muchos de estos remedios caseros pueden quemar los tejidos blandos de la boca (encía, parte interna de la mejilla, interior del labio y zona del paladar) si se colocan directamente en el área donde se encuentra la muela infectada. La aspirina es, probablemente, uno de los remedios más conocidos. Sin embargo, es importante saber que este medicamento es ácido acetilsalicílico, por lo que su componente ácido es especialmente peligroso para dichos tejidos blandos. Por su parte, hay otros remedios naturales como las bolsas de té o el clavo que pueden aliviar el dolor momentáneamente pero no sirven para curar la muela infectada. Por tanto, el tratamiento debe ser siempre profesional. Y, en el caso de que recibas alguna recomendación sobre un remedio casero, nuestro consejo es que consultes su uso con tu dentista antes de probarlo.   Complicaciones: ¿qué puede desencadenar una muela infectada? Una vez mencionados los tratamientos con los que se cura la infección de muela, es importante saber que sea cual sea el procedimiento adecuado, éste debe llevarse a cabo cuanto antes. De esta manera, estaremos tratando de evitar peligros y futuras complicaciones. Y es que, las consecuencias más habituales que conlleva la infección de una pieza dental son las siguientes: Pérdida de la muela La pérdida de la pieza dental se produce debido a la destrucción que causan las bacterias en las encías y el hueso maxilar.

Cultura y curiosidades, Prevención

La anorexia y la bulimia afectan a los dientes: 5 consecuencias en tu salud bucodental

Los datos son cada vez más preocupantes. La cifra de personas que padece un trastorno relacionado con la conducta alimentaria –anorexia y bulimia- continúa en aumento en todos los países desarrollados, incluido España. A pesar de la dificultad para obtener un porcentaje totalmente fiable, ya que no todos los casos están tratados o figuran en algún registro, se calcula que la anorexia y la bulimia afectan a más de 400.000 jóvenes y adolescentes en nuestro país. Y es que aunque ningún sexo o grupo de edad se encuentre totalmente a salvo de estas enfermedades, las estadísticas estiman que las chicas de entre 12 y 25 años son el público más vulnerable. RIESGO DE ANOREXIA Y BULIMIA Consecuencias de la anorexia y la bulimia Ninguna de las citadas enfermedades necesita presentación. La prevalencia de la anorexia y la bulimia en la sociedad hace que sus síntomas y las terribles consecuencias que provocan sean conocidos por todos nosotros. Ambos trastornos causan estragos físicos y psicológicos no solamente en quienes los padecen, sino también en aquellos que se encuentran alrededor del enfermo, especialmente sus familiares. De hecho, en casos extremos, la anorexia y la bulimia tienen como peor consecuencia la muerte de la persona que las padece. Sin embargo, y a pesar de que en algunos casos estos trastornos muestren su peor cara, afortunadamente la mayoría de personas que se someten a tratamiento profesional se recuperan. En este punto, conviene aclarar que la curación no puede asociarse únicamente al restablecimiento del peso corporal. Tanto la anorexia como la bulimia son enfermedades psiquiátricas y deben tratarse como tal. Por ello, la recuperación total del paciente pasa por un largo y complejo tratamiento. Éste incluye, además de la recuperación del peso, un proceso que debe tener como objetivo la total autoaceptación de la persona. Asimismo, será fundamental inculcar al paciente unos hábitos de vida saludables y conseguir que tenga un control responsable sobre su alimentación. DEPORTE Y HÁBITOS DE VIDA SALUDABLES Aunque finalmente el paciente se recupere completamente, es posible que la enfermedad deje consecuencias irreversibles en su cuerpo. Dichos efectos dependen, fundamentalmente, de la severidad con la que hayan actuado la anorexia y la bulimia. ¿Cómo afectan la anorexia y la bulimia a la salud de la boca? La boca es una de las partes de nuestro cuerpo que más sufre con la anorexia y la bulimia. Esto se debe, principalmente, al acto de vomitar y al estado de desnutrición que caracterizan a estos desórdenes alimenticios. Mientras que la anorexia consiste en autoimponerse restricciones excesivas con la comida, la bulimia se distingue por comer compulsivamente para luego vomitar. Sin embargo, cuando una persona padece un trastorno en la conducta alimentaria, es habitual que estas enfermedades no se presenten de manera aislada. Es decir, la anorexia y la bulimia suelen combinarse, alternarse o sucederse. Dicho esto, vamos a explicar cuáles son las principales consecuencias que provocan la anorexia y la bulimia en la boca, especialmente en los dientes: Desgastes y roturas en los dientes: Los desgastes en los dientes están causados principalmente por el hábito de vomitar. Cuando esto sucede, los ácidos del estómago llegan a la boca a través del vómito y van mermando el esmalte del diente. Aunque, en un principio, la parte que más sufre es la cara interna de la pieza dental, progresivamente el ácido acaba dañando toda su superficie. Esto hace que los dientes se vayan debilitando y, por tanto, perdiendo tamaño. Y, a medida que los dientes se van haciendo más débiles y pequeños, aumentan las posibilidades de que lleguen a romperse. DESGASTES EN LOS DIENTES Hipersensibilidad: Además, la pérdida de esmalte provocada por la acción de los ácidos hace que la dentina -capa del diente- quede al descubierto, lo que causa mucha sensibilidad. Dicha sensibilidad se manifiesta especialmente cuando el diente entra en contacto con alimentos muy fríos, calientes, ácidos o que contienen grandes cantidades de azúcar. Además, es habitual que la persona sienta molestias con el cepillado. Caries: La bajada de defensas debida a la desnutrición combinada con el consumo de bebidas con alto contenido en azúcares crean el terreno propicio para la aparición de caries. Hacemos referencia a este tipo de bebidas debido a la costumbre que tienen los enfermos de anorexia y bulimia de recurrir a ellas para “llenar el estómago”. Además de refrescos azucarados, las personas que padecen anorexia y bulimia se caracterizan por consumir una alta cantidad de bebidas ácidas. Al igual que en el caso anterior, esto lo hacen porque tienen el convencimiento de que les ayuda a tener una mayor sensación de saciedad e, incluso, a provocar el vómito. Encías retraídas: Es frecuente que los pacientes que sufren bulimia se cepillen los dientes muchas veces al día para no oler a vómito. Esta acción repetida numerosas veces, de manera muy agresiva y durante muchos minutos cada vez, puede provocar retracción de encías. La retracción provoca que la raíz del diente quede descubierta, lo que genera hipersensibilidad y que, a su vez, es muy antiestético. RETRACCIÓN DE ENCÍAS POR CEPILLADO AGRESIVO Caída de dientes: El estado de desnutrición al que es capaz de llegar el enfermo hace que el organismo no reciba los nutrientes que necesita. Esto a largo plazo puede provocar osteoporosis, que se caracteriza por debilitar progresivamente los huesos de nuestro cuerpo. En el caso de la boca, la osteoporosis ataca directamente a los huesos maxilares que actúan de soporte del diente. Y esta degeneración progresiva de los huesos puede provocar la pérdida de la pieza dental, ya que ésta pierde su elemento de sujeción. ¿Puede el dentista advertir estas enfermedades? Debido a su experiencia, conocimiento y al nivel de detalle con el que observa los dientes, el odontólogo es, en muchas ocasiones, la primera persona en advertir la anorexia y la bulimia en uno de sus pacientes. De todas las señales que hemos detallado anteriormente, la más clara es la del desgaste de los dientes. Existen otras problemáticas que pueden causar desgaste, como el bruxismo o el reflujo gástrico nocturno. Sin embargo, sus signos son ligeramente distintos. La diferencia principal entre el desgaste originado por el bruxismo y la bulimia es que apretar o rechinar los dientes da lugar a un desgaste regular, mientras que vomitar provoca daños más irregulares y con socavones. Por su parte, el reflujo gástrico que se produce por la noche ocasiona desgaste en la cara interna del diente, mientras que la bulimia acaba provocando daños en toda la superficiedental. Tratamientos dentales para el paciente recuperado Una vez

Cultura y curiosidades

Wasabi: tu gran aliado contra la caries

Si te gusta la gastronomía japonesa, estás de enhorabuena. Diversos estudios han demostrado que el wasabi tiene efectos beneficiosos para nuestra salud, y también para el buen estado de nuestra boca. Pero, ¿qué es el wasabi y de qué consecuencias positivas estamos hablando? ¿Qué es el wasabi? El wasabi es una planta de la familia de las crucíferas, al igual que el rábano o la col, de origen asiático. Dadas las exigentes condiciones que requiere para ser cultivado y la dificultad que supone reproducirlas, crece de manera exclusiva en la isla japonesa de Sajalí. Hace años era utilizado para conservar el pescado, dadas sus propiedades antibacterianas y antisépticas. En la actualidad se trata de un condimento esencial en la gastronomía japonesa del cual se aprovecha, únicamente, la raíz. Resulta común verlo no solamente como complemento del sushi, sino también de diversos platos de la gastronomía japonesa o snacks variados. De sabor picante, se puede servir tanto en pasta como rallando directamente la propia raíz. Es de esta última forma, y únicamente catándolo en los primeros quince minutos tras su ralladura, como apreciaremos mejor su sabor. ¿Por qué es recomendable para nuestros dientes? Como ya hemos mencionado, el wasabi tiene propiedades antibacterianas. Es decir, evita la formación de cadenas microbianas en nuestra boca y nos previene de afecciones bucales como, por ejemplo, la caries. Esto se debe a que posee un alto contenido en isotiocianato. El isotiocianato es una molécula que, según han demostrado diferentes estudios, dificulta la formación de la placa bacteriana que daña el esmalte de los dientes y provoca la aparición de caries. Además, dadas sus cualidades antisépticas, ayuda a mitigar la inflamación tanto de heridas como de llagas –o aftas bucales-. De igual manera, los efectos positivos del wasabi no se centran únicamente en la boca: su acción tiene consecuencias beneficiosas en nuestra salud general. ¿Qué efectos positivos tiene el wasabi en nuestra salud? Como ya hemos mencionado anteriormente, el wasabi es conocido por sus propiedades antiinflamatorias. Su uso está especialmente extendido, mediante inhalación, para aliviar la inflamación de los senos paranasales. Además posee un alto contenido en vitamina C, lo que favorece la absorción de hierro y refuerza nuestras defensas. Por ello, nos previene contra catarros, gripes o contagios de otras enfermedades provocadas por virus. Por último, varios estudios han demostrado que evita la formación de coágulos de sangre, actuando favorablemente en la prevención de la formación de trombos. Además, en la actualidad diversas investigaciones tratan de dilucidar si también tiene efectos positivos en la prevención de formación de células cancerígenas en el estómago. El wasabi no es el único alimento que puede tener efectos positivos para nuestra salud bucal. Hay otros tantos, como las zanahorias o el apio, que resultan igualmente beneficiosos para nuestros dientes. ¿Qué otros alimentos son beneficiosos para nuestra salud bucal? Hay multitud de alimentos que nos ayudan a mantener el buen estado de nuestros dientes y encías. Los productos lácteos como, por ejemplo, los yogures o el queso, tienen un alto contenido en calcio que ayuda a fortalecer los dientes. Además contienen caseína, una proteína que repara el esmalte dental. Las verduras de hoja verde, tales como las coles de bruselas, los grelos o las acelgas, poseen un alto contenido en fibra. Para ser capaces de triturarla debemos hacer un mayor ejercicio de masticación, lo que favorece la segregación de saliva. Ésta última no sólo facilita la masticación y la deglución, sino que evita la acumulación de bacterias en la boca. Los alimentos ricos en vitamina D fortalecen nuestros dientes y encías frente a enfermedades periodontales, pues favorecen la absorción de fósforo y calcio. Un ejemplo de alimentos ricos en vitamina D sería el huevo o los pescados grasos como, por ejemplo, el salmón o el atún. Por último, la masticación de frutas y verduras crudas como, por ejemplo, las zanahorias o las manzanas, ayudan a mantener limpios los dientes y las encías. Si bien estos alimentos colaboran a mantener en buen estado nuestra salud dental, hay muchos otros que resultan perjudiciales para la misma. ¿Hay alimentos que pueden dañar mis dientes? Como sabrás, el hecho de mantener unas rutinas adecuadas de higiene oral es clave a la hora de gozar de una buena salud dental. Pero, además, para tener una boca sana es importante evitar la ingesta de ciertos alimentos que pueden provocar daños en los dientes. Los caramelos duros, por ejemplo, suponen una exposición alargada en el tiempo al azúcar y la posibilidad de que, al masticarlos, se astillen las piezas dentales. Esta exposición es igualmente visible en casos de personas que beben, de manera habitual, refrescos carbonatados: son bebidas ácidas que atacan al esmalte dental, favoreciendo la aparición de caries. Otros alimentos que propician la formación de caries son aquellos ricos en almidón, tales como la pasta, el arroz o las patatas fritas. Éstos se adhieren con facilidad a las paredes de los dientes y aceleran la formación de placa dental. Por otra parte, para mantener el blanco de nuestros dientes es esencial dejar de lado la ingesta habitual de bebidas como el té, el café o el vino tinto que provocan manchas de tinción en el blanco de los dientes. Y, por último, se debe romper el mito de que aquellas sustancias que no son azucaradas o ácidas no tienen por qué dañar los dientes. Un hábito tan extendido como la masticación de hielo puede provocar lesiones en los dientes y dañar el esmalte. El wasabi, al igual que otros alimentos, favorece la eliminación de bacterias y nos ayudan a calmar el dolor causado por pequeñas heridas o llagas bucales. Incorporar estos alimentos a nuestra dieta y tener una higiene oral adecuada nos ayuda a mantener una buena salud bucodental.

Cultura y curiosidades, Prevención

¿Qué debes saber sobre la placa bacteriana?

La acumulación de placa bacteriana es una de las principales causas de las enfermedades periodontales y de afecciones bucales muy comunes como, por ejemplo, la caries. Sin embargo, siguiendo unas pautas de higiene exhaustivas podemos evitar esta formación y, por lo tanto, mantener nuestra boca en salud. ¿Qué es la placa bacteriana? La boca es una cavidad séptica; es decir, una zona en la que conviven diferentes bacterias perfectamente adaptadas a vivir en ese entorno. La presencia de estos microorganismos es frecuente desde que somos niños, resultando perjudiciales para la salud de nuestra boca. La placa bacteriana es una fina película transparente compuesta por las proteínas presentes en la saliva, sobre la cual se adhieren las bacterias presentes en nuestra boca. En caso de no tener una buena higiene bucodental, la mineralización de esta placa da lugar la formación de sarro –o cálculo dental-. El sarro supone, a su vez, un mayor depósito de placa en la boca, pues su superficie es más adhesiva que la de los propios dientes. Su acumulación es la responsable de la aparición de enfermedades periodontales, como la gingivitis y la periodontitis, y de las caries dentales. Podemos distinguir varios tipos de placa en función de las bacterias de las que esté compuesta y del lugar en el que se acumule. En función del tipo de bacterias que formen la placa bacteriana, podemos distinguir dos tipos de la misma que difieren en los efectos que tienen sobre la salud de nuestra boca: Denominamos placa cariogénica a aquella formada por bacterias que, tras metabolizar los azúcares de los alimentos, liberan ácidos en la superficie de las piezas dentales. Estos ácidos dañan el esmalte de los dientes, siendo las causantes, por lo tanto, de las caries. Por el contrario, llamamos placa periodontopatogénica a la conformada en por bacterias que liberan sustancias primarias tras metabolizar los azúcares de los alimentos. Son, por tanto, las causantes de las enfermedades periodontales. A esta clasificación, podemos sumarle una nueva clasificación que no resulta excluyente con respecto a la primera en función del lugar en el que se acumule la placa bacteriana. Hablamos de placa supragingival cuando las bacterias se acumulan en las piezas dentales. Normalmente, este tipo de bacterias son cariogénicas. Por el contrario, la placa subgingival se acumulan en el surco gingival y en la bolsa periodontal. Este tipo de placa es, generalmente, periodontopatogénica, y para su acumulación es habitual que, en primer lugar, haya habido acumulación de placa supragingival en las piezas dentales. ¿Cómo eliminar la placa bacteriana? Manteniendo unas buenas rutinas de higiene dental podemos eliminar fácilmente la placa bacteriana. Mediante el cepillado tradicional y el uso de otros complementos de higiene oral tales como, por ejemplo, el hilo dental, evitamos la acumulación de la misma. Por el contrario, la acumulación de sarro sólo podrá ser eliminada a través de una higiene bucodental profesional llevada a cabo en clínica. Es un procedimiento inocuo para el cual no se precisa de anestesia. Mediante el uso de la punta de ultrasonidos, el higienista eliminará las formaciones de sarro presentes en las piezas dentales y por debajo de las encías. ¿Se puede prevenir la formación de placa bacteriana? Para evitar la formación de placa bacteriana es de vital importancia seguir unas buenas pautas de higiene oral. Tan importante es tener en cuenta la frecuencia del cepillado dental como la técnica del mismo. Se debe tener en cuenta que mediante un cepillado después de cada comida no somos capaces de eliminar satisfactoriamente todas las bacterias y los restos de alimentos que causan la placa bacteriana. Por ello, debemos recurrir a otros complementos de higiene que nos aseguren una correcta limpieza oral. El hilo dental está recomendado para eliminar la placa de los espacios interdentales estrechos; es decir, en aquellos casos en los que los espacios entre ambos dientes es reducido. De forma complementaria, y para espacios interdentales más anchos, nos podemos valer de los cepillos interproximales. De cabezal cilíndrico, la elección de uno u otro viene determinada por el ancho del espacio interdental. Están recomendados en aquellos casos en los que la acción del hilo dental resulta insuficiente. El irrigador bucal –o waterpik- es un sistema que, mediante el uso del agua a presión, elimina las bacterias y los restos de comida que se alojan en los dientes y en los tejidos de la boca. Está especialmente indicado en personas que lleven implantes o bien que se estén sometiendo a un tratamiento de ortodoncia. Por último, no debemos olvidarnos de la importancia de la limpieza de la lengua. El uso del raspador lingual debe ser parte de la rutina de higiene diaria, pues la lengua es la parte de la boca que más bacterias acumula. Los especialistas recomiendan, además, evitar el consumo de productos con alto contenido en azúcares, usar enjuagues bucales dos veces al día tras el cepillado y acudir al especialista a realizarse una higiene bucodental cada 8-10 meses. La higiene bucodental es esencial para conservar nuestra boca en salud. La acumulación de placa no sólo provoca caries y enfermedades periodontales, sino que la presencia de bacterias en la cavidad oral puede generar enfermedades sistémicas o suponer el empeoramiento de diagnóstico de personas que padezcan enfermedades respiratorias, cardiopatías o diabetes. Si quieres saber más sobre la técnica del cepillado, te invitamos a visitar la siguiente página. Si, por el contrario, consideras que necesitas una higiene bucodental profesional, puedes ponerte en contacto con nosotros a través de nuestra página web o bien llamando al 91 599 64 39.

Buenos hábitos, cirugía e implantes, Cultura y curiosidades, Estética dental

¿Qué tipos de prótesis dentales hay?

Las prótesis dentales son una opción recomendada en caso de perder una o varias piezas dentales. Permiten sustituir los dientes perdidos y además rehabilitar la estructura dental. Pero hay diversos tipos de prótesis, en función de las necesidades de cada paciente. ¿Cuáles son? Hay diversos factores que condicionan la pérdida dental. En muchos casos se debe a traumatismos o bien enfermedades bucodentales muy avanzadas. La caries y la periodontitis son algunas de las patologías que pueden provocar la pérdida de un diente. En este sentido es fundamental realizar una buena prevención oral tanto en casa como en la consulta. Detectar estas enfermedades orales a tiempo es clave para evitar consecuencias como la pérdida dental. Pero en caso de perder un diente existen varias opciones para recuperar tanto la estética como la funcionalidad de la sonrisa. De hecho muchos profesionales recomiendan los implantes dentales, ya que a pesar de tener más coste son el tratamiento más seguro y duradero en caso de pérdida dental. Pero las prótesis son una opción muy recomendada para sustituir una o varias piezas dentales perdidas. Tipos de prótesis dentales En función de las necesidades de cada paciente es preferible optar por un tipo de prótesis concreto: Prótesis fija. Es la dentadura postiza fija. Se trata de prótesis dentales que quedan adheridas a los dientes naturales, de modo que se respeta la estética y la naturalidad de la sonrisa. Prótesis removible. En general este tipo de prótesis se usa en pacientes que han perdido todas las piezas naturales. Se trata de una estructura completa que sustituye todas las piezas dentales y aporta un aspecto uniforme a la sonrisa. Prótesis sobre implantes. Es una prótesis fija que se coloca encima de los implantes dentales. Aunque es el método más seguro y duradero, también suele ser el que tiene más coste. Los pacientes portadores de prótesis deben mantener una rutina de higiene completa y adaptada a las prótesis. La acumulación de placa bacteriana en las prótesis dentales puede comprometer la salud del resto de dientes y causar el desarrollo de infecciones en las encías. Además también es fundamental visitar con regularidad a la Dra. Sánchez para realizar un seguimiento profesional. En la clínica dental SanCal realizamos un estudio personalizado para adaptar nuestros tratamientos a las necesidades de cada paciente y conseguir los mejores resultados con cada sonrisa. Gracias a estos tratamientos podrás recuperar una sonrisa estética y funcional tras perder uno o varios dientes.

Cultura y curiosidades, Prevención

7 efectos de la menopausia en tu salud bucodental

Con una esperanza de vida de 85 años, a las mujeres españolas no les queda otra opción que sufrir las consecuencias de la menopausia durante el 40% de su vida. De hecho, el aumento en dicha esperanza de vida provoca, a su vez, un aumento en la incidencia de enfermedades asociadas a esta etapa. El descenso en la producción de hormonas que comienza a producirse entre los 45 y 55 años de edad, además de los ya conocidos síntomas como los sofocos, los dolores de cabeza y la irritabilidad, provoca una mayor propensión a sufrir problemas bucodentales. Así, la bajada de los niveles de estrógenos hace que disminuya el efecto inflamatorio de éstos en el cuerpo, lo cual afecta directamente en las encías; del mismo modo que la reducción de progesterona provoca una disminución de la densidad ósea de la mandíbula, poniendo en riesgo el sustento de nuestros dientes. A pesar de todo, y gracias a los avances de la tecnología y la concienciación social, las mujeres de hoy en día pueden disponer de una dentadura sana hasta la ancianidad. Sin embargo, para ello, será necesario un cuidado especial de la higiene y visitar con regularidad al dentista ya que durante la menopausia se pueden eden padecer algunos de los siguientes problemas: Dolencias bucodentales asociadas a la menopausia 1. Gingivitis descamativa Se caracteriza por la separación de las capas externas de las encías hasta el punto de dejar la raíz del diente expuesta, provocando sensibilidad ante agentes externos como bebidas o comida caliente o fría. También presenta el tejido gingival enrojecido y dolorido con probabilidad de sangrado. Una gingivitis descamativa no tratada a tiempo, puede derivar en una grave periodontitis, por lo que es recomendable mantener un control del estado de las encías. 2. Xerostomía o sequedad bucal Durante la menopausia las glándulas salivales producen menos saliva por lo que se presenta sequedad bucal. La secreción salival es importante debido a su función de mantener los tejidos húmedos y a que favorece que la boca esté más limpia, regulando la cantidad de bacterias presentes en la boca. Su ausencia puede producir dificultades a la hora de saborear alimentos, tragar o incluso al hablar. 3. Síndrome del ardor bucal Se trata de uno de los problemas posmenopáusicos más comunes. Se caracteriza por presentar un fuerte ardor y sensación de quemazón o picor que afecta principalmente a la lengua, y en ocasiones, a las encías y labios. 4. Adelgazamiento de la mucosa bucal Como consecuencia de la reducción en la producción de hormonas, las mucosas de la boca, al igual que las de todo el cuerpo, se vuelven más frágiles y su función protectora se debilita. 5. Caries radiculares Como consecuencia de la gingivitis descamativa, al quedar la raíz del diente expuesta a agentes externos, y agravado por la sequedad bucal, existe una mayor probabilidad de desarrollar caries de origen radicular. De no ser tratadas, podrían llegar a provocar la pérdida de piezas dentales. Una gingivitis descamativa no tratada a tiempo, puede derivar en una grave periodontitis, por lo que es recomendable mantener un control del estado de las encías. 6. Deterioro dental El envejecimiento va unido a una pérdida de brillo y opacidad en los dientes, que además hace que se vuelvan más amarillos. Pueden, también, presentar desgaste y apiñamiento, lo que contribuye a que la boca aparezca deteriorada, en general. 7. Enfermedades periodontales y pérdida de hueso Existen numerosos estudios que demuestran que existe una relación directa entre las enfermedades periodontales y la osteoporosis. Y es, precisamente, durante la menopausia cuando estos problemas se agravan, ya que la reabsorción de hueso que suele afectar a todo el organismo, afecta de igual modo a la boca, poniendo en riesgo la supervivencia de los dientes con motivo de la merma de hueso maxilar. Es por ello, que será importante llevar un control por parte de un especialista para evitar, en la mayor medida posible, la pérdida de piezas dentales. Algunas recomendaciones y la importancia de la prevención Si bien puede que la prevención no evite por completo la aparición de algunos de los problemas mencionados, es seguro que en gran medida mejorarán. Es por ello, que será vital realizar una buena higiene diaria para mantener bajos los niveles de placa bacteriana, para lo que se aconseja el uso del hilo dental y los enjuagues bucales además del clásico cepillado 3 veces al día. Y además: Realiza al menos una visita semestral a tu clínica dental para que el especialista realice las revisiones pertinentes para controlar los posibles cambios que surgen en esta etapa de la vida. Además, una profilaxis o limpieza dental profesional ayudará a mantener las bacterias a raya. Evita el tabaco, especialmente en los casos de sequedad bucal o síndrome de ardor bucal. Consume alimentos ricos en calcio y con vitaminas A, E y C que fortalecerán tanto tus huesos como la piel y las mucosas. Bebe mucha agua y, en aquellos casos de sequedad bucal, recurre al uso de sprays hidratantes o colutorios. Escoge una pasta de dientes con índices de abrasividad bajos para que no dañe tus encías y recurre a filamentos suaves en el cepillo de dientes para proteger el esmalte de tus dientes.

Scroll al inicio