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Ortodoncia

Brackets metálicos: ¿son adecuados para mí?, ¿cuáles son sus ventajas e inconvenientes?

Los brackets metálicos han sido, durante muchos años, el sistema de ortodoncia más utilizado y, por tanto, también el más conocido. Tradicionalmente, se han relacionado con los niños y adolescentes, ya que eran los pacientes que solían someterse a este tipo de tratamientos. Sin embargo, hoy en día los aparatos metálicos también son llevados por adultos, dado el interés de muchas personas más mayores por solucionar los problemas de alineamiento y mordida de los dientes. Y, con ello, mejorar la apariencia de su sonrisa. ¿Cómo funcionan los brackets metálicos? La función de los brackets metálicos es la de mover los dientes a la posición funcional y estética correcta. Es decir, por un lado tienen como objetivo colocar los dientes para que el proceso de masticación sea el adecuado y para que no haya piezas dentales que se interpongan entre otras y dificulten la higiene. Por otro lado, y como ya hemos adelantado, la ortodoncia también tiene una función estética, la de hacer la sonrisa más bonita. Para conseguir los objetivos mencionados, el tratamiento cuenta con una serie de partes o elementos fundamentales. Estos son el arco, las ligaduras y los brackets. Arco: su misión es la de aplicar presión sobre los dientes con la ayuda de las ligaduras Ligadura: sirve para unir el bracket al arco y, con esta unión, permitir que el arco pueda aplicar la fuerza. Existen dos tipos de ligaduras: metálicas y de goma. Las primeras se usan para aplicar mayor presión y las segundas se utilizan cuando la fuerza que necesitamos para realizar los movimientos es menor. Además, estas últimas pueden ser de colores Bracket: se utiliza para marcar la dirección o el giro que se le va a dar al diente. Para ello, es necesario cementarlo en el lugar adecuado. Es decir, el bracket no se coloca en el centro de la pieza dental, sino que el ortodoncista debe elegir dónde situarlo exactamente Además de estos elementos, que son comunes a todos los tratamientos con brackets metálicos, también se pueden utilizar gomas. Las gomas se usan cuando es necesario corregir la mordida, además del alineamiento de los dientes. Se colocan de arriba abajo y lo que hacen es unir la arcada superior y la arcada inferior. La principal ventaja de la ortodoncia metálica convencional es el precio, ya que es mucho más barata que los brackets transparentes, los linguales o Invisalign ¿Cómo se colocan los brackets? Aunque existen otros métodos de colocación de brackets, en nuestra clínica dental nos decantamos por la técnica de cementado indirecto, ya que ofrece muchas ventajas para el paciente. Este procedimiento se caracteriza por utilizar unos moldes sobre los que se colocan los brackets. Una vez que éstos se han colocado sobre el molde, se transfieren a la boca del paciente. De esta manera, el procedimiento de colocación es mucho más rápido, cómodo y preciso. Por concretar un poco más, el cementado indirecto hace que la persona esté menos tiempo en el sillón del dentista con la boca abierta y ayuda a situar los brackets en el lugar adecuado en menos tiempo. Esto último se hace más fácil ya que el ortodoncista no cuenta con elementos que puedan dificultar su colocación, como la lengua, las mejillas o la saliva. Ventajas y desventajas de la ortodoncia metálica Para algunas personas, los brackets tradicionales presentan más inconvenientes que beneficios y, por tanto, descartan este método para corregir sus dientes. Este pensamiento viene dado porque la ortodoncia de metal es el sistema más antiguo y el menos estético de todos los que existen actualmente. Por ello, muchos pacientes prefieren otros tratamientos que realizan la corrección de los dientes de manera mucho más “disimulada”. Esto quiere decir, sin interferir tan directamente en el aspecto de la sonrisa durante el tiempo de tratamiento. Dicho esto, vamos a analizar las principales ventajas y desventajas de los brackets tradicionales: Pros Precio: es el tratamiento de ortodoncia más barato de los que se utilizan actualmente (entre ellos, brackets transparentes de zafiro, brackets linguales Incognito e Invisalign) Resistencia: son más resistentes que algunos tipos de brackets transparentes. Mientras que el zafiro sí es un material de gran dureza, existen brackets de cerámica (porcelana) o plástico que se rompen con más facilidad Contras Escasa estética: son muy visibles ante los ojos de los demás y no es fácil disimularlos. Aunque cada vez sean más pequeños, hay personas que no desean pasar meses con “hierros” en los dientes   BRACKETS TRANSPARENTES E INVISIBLES Cuidados para los brackets de metal Dentro del apartado de cuidados, es importante tener en cuenta tanto la alimentación como la higiene. Siguiendo a cabo una serie de recomendaciones en ambos aspectos, no tendremos por qué tener ningún problema con el tratamiento. O, si los tenemos, serán más leves y menos numerosos. En cambio, si el paciente no sigue estos consejos será más probable que tenga que acudir a la consulta del dentista debido a diferentes urgencias: un bracket que se cae, un arco que se despega y se clava en la encía o la mejilla, etc. CUIDADOS Y LIMPIEZA DE BRACKETS METÁLICOS Dicho esto, vamos a decirte qué instrucciones deberías tener en cuenta: Alimentación Es importante tener cuidado al comer determinados alimentos que pueden dañar el aparato de ortodoncia, como aquellos que son muy duros o pegajosos. Ejemplos de ellos serían algunos frutos secos (kikos) o snacks (garbanzos tostados), determinados turrones, bocadillos o manzanas que se comen a mordiscos… Higiene En lo que respecta a la higiene, es fundamental cepillarse los dientes después de cada comida, ya que los restos de alimentos tienen a almacenarse entre los brackets. El hecho de que se queden habitualmente estos restos hace que, con el tiempo, aparezcan la caries o la enfermedad periodontal (gingivitis o periodontitis).   Otras preguntas frecuentes sobre el tratamiento ¿De qué material están hechos los brackets metálicos? Los brackets metálicos están fabricados con una aleación de acero inoxidable y níquel. Esta composición es, para la mayoría de las personas, irrelevante. Sin embargo, aquellas que tienen alergia al níquel no pueden llevar este tipo de ortodoncia. Por tanto, si tienes alergia al níquel -algo que no es común- es necesario que informes a tu ortodoncista. ¿Duelen los brackets? Todo tratamiento de ortodoncia requiere un periodo de adaptación, y esto no iba a ser menos con los brackets de metal. Por tanto, es habitual que sientas molestias después de que te

Buenos hábitos, Estética dental, Prevención, Prótesis

10 cuidados que debes tener si quieres que tus carillas dentales duren mucho tiempo

Las carillas, ya sean de porcelana o de composite, son actualmente muy demandadas en las consultas de Estética Dental. Esto se debe a que ofrecen una solución natural, rápida y personalizada para mejorar la sonrisa. Pero, además de esto, las carillas dentales ofrecen otra ventaja igualmente importante: son muy duraderas. Sin embargo, para que esta última característica se cumpla, es fundamental que el paciente tenga una serie de cuidados con ellas. No hay que olvidar que por mucha resistencia que ofrezcan las carillas hoy en día, éstas son, en definitiva, unas finas láminas de porcelana o composite. Es decir, son una parte añadida -pegada- al diente. Por tanto, debemos cuidarlas tanto o más que a nuestras piezas dentales naturales. ¿Qué tipo de carillas dura más tiempo? Antes de meternos de lleno en los cuidados que se deben llevar a cabo, es importante avanzar que las carillas de porcelana son las más duraderas. Por un lado, las carillas de porcelana tienen una duración de 10 ó 15 años aproximadamente. Dentro de las carillas dentales de porcelana solemos distinguir entre e.max y Lumineers, ya que son las principales marcas comerciales. Sin embargo, su duración es la misma. Por otro lado, las carillas de composite duran cinco años como máximo aproximadamente. Como dentista, te aconsejo que tengas con las carillas el mismo cuidado que tendrías con el resto de tus piezas dentales, o incluso más, ya que a pesar de ser muy resistentes, no debes olvidar que van pegadas a tus dientes ¿Cómo cuidar las carillas dentales? Una vez dados los plazos de los dos tipos de carillas, vamos a dar una serie de consejos para que éstas duren el tiempo máximo mencionado. Dichas indicaciones están relacionadas con los siguientes aspectos: 1.  Comidas y bebidas con coloración Si bien este punto no es importante tenerlo en cuenta en el caso de llevar carillas de porcelana, sí juega un papel fundamental en el supuesto de que tengamos carillas de composite. Este último es un material que se tiñe con el paso del tiempo y con el consumo de alimentos y bebidas que tienen mucha coloración. Ejemplos de dichos alimentos o bebidas podrían ser los siguientes: café, vino tinto, té, refrescos de cola, chocolate negro, frutos rojos, curry, salsa de soja… En caso de que lleves carillas de composite y no quieras eliminar completamente estas comidas y bebidas de tu dieta, nuestro consejo es que restrinjas su consumo lo máximo que puedas. Por el contrario, la porcelana no plantea este tipo de problemas, ya que es un material que no se tiñe y que conserva sus propiedades estéticas durante muchos años.     ALIMENTOS Y BEBIDAS QUE TIÑEN 2. Tabaco Al igual que ocurre con los alimentos y bebidas con coloración, fumar también mancha las carillas de composite. Por tanto, si llevas este tipo de carillas dentales te recomendamos tener especial cuidado con dicho hábito y evitar su consumo lo máximo posible. Aparte de esto, el tabaco es muy perjudicial para los dientes naturales y, sobre todo, para nuestra salud general. Y, en este punto, tenemos que decir que aunque fumar sea muy perjudicial, no supone un problema para la porcelana, ya que no se tiñe. 3. Alimentos muy duros Este aspecto es muy importante tenerlo en cuenta, independientemente del material con el que estén hechas nuestras carillas. Cualquier alimento muy duro -o incluso pegajoso– supone un peligro para ellas, ya que pueden despegarse o, peor aún, romperse. Ejemplos de estos alimentos podrían ser determinados frutos secos o snacks (kikos, garbanzos tostados…), turrón duro, zanahoria cruda, cubitos de hielo… Además de esto, es necesario tener cuidado cuando comamos bocadillos o manzanas. Este tipo de alimentos no se deben comer a mordiscos, sino partiéndolos en trozos. 4. Higiene bucodental Este también es un punto importante, aunque no llevemos carillas, ya que con una buena rutina de higiene podemos mantener los dientes sanos durante toda la vida. Pero, además, unos buenos hábitos de higiene no solamente hacen que las carillas duren más años, sino que también conserven sus propiedades estéticas durante más tiempo. Los consejos que te damos para tener una buena rutina de higiene son los siguientes: Cepíllate los dientes después de cada comida Usa el hilo dental después de cada cepillado o, al menos, en el último del día (antes de dormir) Utiliza un enjuague bucal en el último cepillado del día Acude a tu dentista o higienista para que realice una limpieza bucodental profesional al menos una vez al año 5. Morder objetos duros Tal vez no sea tu caso pero hay muchas personas que tienen pequeños “vicios” o hábitos que, aunque parecen inofensivos, pueden dañar mucho sus piezas dentales o sus carillas. Unos ejemplos de estos “vicios” o hábitos serían, por ejemplo, mordisquear bolígrafos o morderse las uñas. Así es que, si éste es tu caso, trata de evitar estas costumbres. 6. Usar los dientes como herramienta Al igual que en el caso anterior, hay muchas veces en las que utilizamos nuestros dientes como si fueran herramientas para abrir o romper distintas cosas, tales como embalajes, cáscaras de frutos secos… De la misma manera: ten cuidado con esto, ya que te puede costar que una carilla se despegue o se fracture. 7. Férula de bruxismo Si tienes bruxismo, es importante que te acostumbres a llevar una férula de descarga por las noches. De esta manera, los músculos de tu cara se relajarán y evitará que éstos se tensionen, provocando que aprietes los dientes. Además de evitar el dolor y el desgaste de las piezas dentales que contactan entre ellas, la férula de descarga evitará que se rompan las carillas.   FÉRULA DE DESCARGA TIPO MICHIGAN 8. Protector bucal Los protectores bucales están indicados en personas que practiquen deportes de contacto como el fútbol, el baloncesto, el rugby, el hockey, el boxeo, el kickboxing o cualquier arte marcial (jiu jitsu, karate, judo, taekwondo…). Es decir, nuestro consejo es que los utilices aunque no te hayas sometido a ningún tratamiento de estética dental. De esta manera, podrás evitar que los dientes o las carillas se fracturen en las caídas o choques accidentales que se producen en este tipo de deportes. 9. Mantenimientos Aunque las carillas de porcelana no necesiten mantenimientos periódicos, las de composite sí los requieren. Los mantenimientos consisten en acudir al especialista en Estética Dental; la Dra. Sánchez, para que lleve a cabo un pulido de las carillas. El

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Claves sobre los brackets metálicos

Los brackets metálicos han sido durante mucho tiempo la única opción para corregir la alineación de la sonrisa. Son el tratamiento más tradicional en ortodoncia y permiten corregir problemas severos de posición y mordida. ¿En qué consiste el proceso de ortodoncia con brackets?  La ortodoncia es una especialidad de la odontología que se centra en corregir la posición defectuosa de los dientes, con fines tanto estéticos como funcionales. Así, puede conseguir una sonrisa perfectamente alineada, corregir problemas de mordida, apiñamiento dental, falta de espacio… Unos dientes mal alineados pueden alterar la calidad de vida del paciente. Sobre todo en procesos como la masticación o la mordida, incluso el habla. Además una sonrisa mal alineada puede generar complejos a nivel estético. Una forma de corregir la posición de las piezas dentales es mediante los brackets metálicos. Este tratamiento consiste en elementos adheridos a los dientes y unidos con arcos elásticos que mueven de forma progresiva los dientes hasta que adquieren la posición deseada. Generalmente son metálicos, aunque también hay brackets de porcelana si queremos preservar la estética durante el tratamiento. En ambos casos son aparatos fijos y sólo pueden ser manipulados por el odontólogo. Brackets metálicos tradicionales: las claves ¿Cuánto dura el tratamiento? La duración del tratamiento puede variar en función de las necesidades de cada paciente. Normalmente se prolonga de 12 a 24 meses, pero la duración es variable en función de los problemas de cada sonrisa. En general estos tratamientos con ortodoncia suelen iniciarse durante la adolescencia. No obstante, los brackets también son habituales en adultos, quienes suelen utilizar los de porcelana, buscando procesos más estéticos. La higiene con brackets metálicos La limpieza diaria es fundamental, ya que los aparatos pueden generar zonas de retención de placa bacteriana. Por ello debe ser muy constante, para evitar complicaciones durante el tratamiento. Se recomienda cepillarse los dientes después de cada comida. Conviene hacerlo con un cepillo de cerdas suaves y cepillando desde las encías hacia los bordes. También es aconsejable enjuagarse los dientes con un colutorio que contenga flúor. Además es fundamental realizar una serie de cuidados para mantener los brackets en buen estado. En este sentido se deben evitar los alimentos duros y pegajosos, ya que pueden dañar los brackets metálicos. También es recomendable acudir al odontólogo con regularidad, para realizar un seguimiento de la ortodoncia. ¿Y después de los brackets qué? Después de retirar los brackets, el tratamiento no ha terminado. De hecho se pasa a una parte muy importante: la fase de retención. Esta fase puede determinar el éxito o el fracaso de los brackets. El paciente lleva unos retenedores hechos a la medida de su boca, que ayudan a mantener los buenos resultados conseguidos con la ortodoncia. En general, los retenedores suelen llevarse por las noches. Lo más común es llevar una funda transparente en la arcada superior y unos retenedores metálicos apenas perceptibles en los incisivos.

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