Cuando somos niños, las citas con el odontólogo suelen deberse a la colocación de tratamientos de ortodoncia, a urgencias por golpes o dolor, a la existencia de caries o, incluso, a la necesidad de realizar una pulpotomía -el equivalente a una endodoncia en adultos-.
Cuando ya nos convertimos en adultos, las visitas suelen deberse a motivos similares, pero, además, los pacientes acuden debido a la necesidad de colocarse implantes dentales o al deseo de someterse a tratamientos de estética como las carillas.
Lo habitual, por tanto, es que los pacientes estén acostumbrados a acudir al dentista y que dicha cita no les cause ningún tipo de estrés o preocupación.
Miedo al dentista
Sin embargo, hay personas que, ya sea porque no están familiarizados con este profesional o porque han tenido una mala experiencia anterior, tienen mucho miedo al dentista.
Ante esto, la Odontología ha avanzado mucho y actualmente pone a disposición de los pacientes una serie de soluciones para que sus citas con los dentistas sean más agradables y, sobre todo, para que no experimenten ningún tipo de dolor.
Dicho esto, no hay que olvidar que el miedo al dolor y la ansiedad ante un tratamiento desconocido es el motivo principal por el que muchas personas se resisten a acudir a la clínica dental.
¿Existe el dentista sin dolor?
Definitivamente, sí. Con el objetivo de que ninguno de nuestros pacientes pase por una experiencia desagradable cuando acude a la clínica, hemos incorporado a los tratamientos que realizamos los avances en Odontología que existen actualmente en el mercado.
Vamos a repasar todos ellos a continuación. Algunos de éstos se aplican durante el propio procedimiento dental y otros ayudan a evitar el dolor con posterioridad.
- Anestesia local:
La aplicación de anestesia es la más antigua de todas las técnicas utilizadas para evitar el dolor y, por supuesto, uno de los mayores logros en Medicina.
A esto se le une el hecho de que también se han producido avances en las técnicas de anestesia local utilizadas. Por ejemplo, la anestesia ha sido aplicada tradicionalmente con el uso de la aguja.
Una vez que se aplica, la zona queda insensibilizada y se puede realizar el tratamiento sin ningún tipo de dolor.
Sin embargo, hay muchos pacientes que presentan fobia a la propia aguja y, ni siquiera, quieren sentir el pinchazo, a pesar de que les garanticemos que después de éste el tratamiento va a ser indoloro.
En estos casos, lo que hacemos es utilizar anestesia tópica, es decir, en spray o en crema. Esta anestesia en spray o en crema se puede utilizar en algunos tratamientos, como en las limpiezas dentales o, en la especialidad de Periodoncia, para los mantenimientos periodontales.
Y, además de esto, se puede usar en cualquier tratamiento antes de anestesiar con la aguja. De esta manera, se produce el adormecimiento de la zona y, después de esto, se anestesia de la manera tradicional.
Así, el paciente no sentirá la aguja como la sentiría si no hubiéramos utilizado anestesia tópica previamente.
- Sedación consciente:
La sedación consciente es otra de las técnicas que aplicamos en la clínica. No es una técnica anestésica en sí misma, sino que lo que hace es relajar a los pacientes que se van a someter a un tratamiento dental que les genera estrés o ansiedad.
La sedación consciente siempre se combina con anestesia local. Por tanto, una vez que el paciente está sedado, se le aplica la anestesia para insensibilizar la zona que se va a tratar.
Al estar bajo sedación, la persona no sentirá la aplicación de la anestesia y estará en estado semiinconsciente durante todo el procedimiento. Esto hará que no sienta nervios y que tenga una agradable sensación de bienestar.
Aunque la sedación consciente se puede aplicar en cualquier tratamiento dental si el paciente lo desea, se utiliza más frecuentemente en cirugías de implantes.
- Cirugía guiada por ordenador:
La cirugía guiada por ordenador es una técnica utilizada para la colocación de implantesdentales.
Mediante esta técnica, no es necesario dar puntos de sutura ni levantar la encía para colocar los implantes, ya que éstos se insertan con una guía quirúrgica diseñada por ordenador.
Al simplificar la intervención y, por tanto, el traumatismo causado, se consigue que el postoperatorio no provoque dolor y sea mucho más rápido e higiénico.
- Alineadores Invisalign:
En lo que respecta a esta última especialidad mencionada, los fabricantes de sistemas de ortodoncia también se han esforzado por crear métodos cada vez más cómodos para los pacientes.
Un ejemplo de esto sería la ortodoncia Invisalign, que consiste en unos alineadores transparentes -y prácticamente invisibles- que se renuevan cada dos semanas.
Estas férulas funcionan realizando unos micromovimientos en los dientes mucho más leves que los que realizan los aparatos de ortodoncia con brackets. De esta manera, al no ejercer tanta fuerza, este sistema resulta mucho menos molesto.
Además, los alineadores no llevan ningún elemento metálico, por lo que ni rozan ni causan las características llagas o heridas propias de los brackets.
Por ello, Invisalign cuenta con dos ventajas fundamentales: ni duele y es una opción mucho más estética que los tratamientos con brackets tradicionales.
- Microscopio quirúrgico:
A la hora de llevar a cabo una endodoncia, el microscopio quirúrgico también juega un papel fundamental a la hora de disminuir las molestias y las incomodidades propias de este tratamiento dental.
Esto es posible porque facilita la localización de los conductos radiculares que hay que limpiar y sellar.
En otras palabras, lo que hace el microscopio es aumentar la predictibilidad del tratamiento y que podamos llevar a cabo una odontología mínimamente invasiva, lo que repercute en menores molestias tras el procedimiento.
¿Cómo me tratarán si padezco odontofobia?
Una vez enumeradas todas las técnicas con las que contamos para llevar a cabo tratamientos dentales sin dolor, también es conveniente resaltar la necesidad de comunicar al dentista si tenemos algún miedo o fobia.
El equipo de profesionales que trabaja en nuestra clínica está acostumbrado a tratar pacientes con miedo y está muy sensibilizado con este aspecto, por lo que nos esforzamos en dar un trato aún más cercano y personalizado.
De esta manera, ofrecemos a la persona toda la información que necesite sobre su tratamiento, resolvemos las dudas que tenga para poder tranquilizarla y ponemos a su disposición cómodas y amplias instalaciones (con televisión, revistas…).
Esto, unido a las técnicas anteriormente mencionadas, garantiza que la experiencia en el dentista sea mucho más agradable y que, por supuesto, no cause dolor.
Aún así, si éste es tu caso y todo lo que te hemos contado no te resulta suficiente, también te ofrecemos otra opción: consultar con cualquiera de nuestros odontólogos la posibilidad de que te receten medicación para acudir a tu próxima visita más tranquilo.