La elevación de seno maxilar es una de las técnicas quirúrgicas de implantología más versátiles para permitir la colocación de implantes dentales. Se utiliza cuando no hay suficiente altura ósea en el maxilar superior para colocar un implante dental.
La elevación de seno maxilar es una cirugía en la que se coloca hueso en la zona posterior del maxilar superior a nivel de molares y premolares, lo que le permite realizar un tratamiento de implantología donde antes no se podía por falta de hueso. Se añade el hueso sintético mezclado con hueso autólogo entre el suelo del maxilar y la membrana de sinusal que se mueve hacia arriba con el fin de hacer espacio para el hueso que se regenerará y permitirá fijar los implantes de titanio.
En Clínica dental SanCal, la elevación de seno maxilar es la técnica de elección para colocar implantes dentales en el maxilar superior cuando hay falta de hueso.
La principal ventaja de realizar el injerto de hueso mediante elevación de seno en el maxilar es que permite a la implantóloga de SanCal colocar los implantes en la posición correcta, con un adecuado eje axial que facilita la colocación de la prótesis sobre implantes.
La elevación de seno maxilar necesita una cirugía cuidadosa par intentar no rasgar la membrana sinusal. En caso de que esto sucediera existen técnicas para crear una pseudomembrana y poder colocar el injerto de hueso.
Colocación de implantes en el mismo momento de la elevación de seno
La colocación inmediata de implantes de titanio cuando hay falta de hueso en la zona posterior del maxilar superior, se puede hacer en el mismo momento de la elevación de seno maxilar.
Para ello es imprescindible que exista una altura remanente de la cresta ósea capaz de otorgar una estabilidad primaria a los implantes colocados, normalmente 5 milímetros.
La altura ósea del maxilar posterior atrófico puede verse comprometida por una neumatización aumentada de seno maxilar y por la reabsorción de la cresta alveolar acelerada por las extracciones dentales.
La altura ósea del maxilar posterior atrófico puede verse comprometida por una neumatización aumentada de seno maxilar y por la reabsorción de la cresta alveolar acelerada por las extracciones dentales.
Hay descritos diversos tipos de injertos y posibilidad de colocar implantes osteointegrados de manera simultánea o diferida con la elevación de seno maxilar, dependiendo de la altura ósea inicial.
Se requiere una altura de hueso inicial de 10 milimetros para que la colocación de implantes dentales resulte exitosa y predecible.
Los implantes colocados al mismo tiempo de la elevación de seno (cuando existe mínimo 5 milímetros de cresta ósea) tienen su estabilidad primaria da por el hueso que queda y la porción del implante que penetra en el seno maxilar es la que se recubre con el injerto de hueso. Cuando hay menos de 5 milímetros de hueso en la zona de la elevación sinusal es necesario hacer la técnica en dos tiempo realizando primero la elevación de seno y 6 meses después la colocación de los implantes dentales.