Unas encías sanas son fundamentales para una boca sana. Por muy blancos y sin caries que podamos tener los dientes, lo que no se ve bajo las encías es tan importante para nuestra boca como lo que sí se ve.
La periodoncia es la rama de la odontología que trata sobre la prevención, diagnóstico y tratamiento de todos los tejidos que dan soporte a los dientes o a aquellas prótesis que eventualmente los sustituyen.
Las enfermedades de las encías más frecuentes
En España, más del 50% de la población con más de 35 años ha tenido alguna vez gingivitis y una de cada tres, periodontitis.
Gingivitis
La patología más leve en el campo de la periodoncia es la gingivitis, o inflamación de las encías.
Entre las causas que la producen podemos citar virus, bacterias y factores genéticos. pero sin duda la más frecuente es una deficiente higiene dental que motiva la aparición de sarro.
Tratar la gingivitis no sólo es fácil con el diagnóstico, tratamiento y prescripciones adecuados sino que es fundamental para evitar que una leve inflamación se convierta en algo realmente grave en el futuro.
Piorrea o periodontitis
Si la acumulación de sarro en nuestros dientes aumenta y se introduce debajo de nuestras encías puede aparecer la periodontitis o piorrea dando con ello inicio a la destrucción de los tejidos de soporte al diente.
Si sigue evolucionando sin tratamiento alguno, los dientes comenzarán a moverse y al final podemos acabar perdiendo la pieza, bien porque se caiga o porque necesite se extraída.
Tratar la piorrea pasa por la eliminación de los cálculos de sarro, logrando con ello desinflamar los tejidos circundantes al diente y deteniendo con ello la destrucción de los que lo soportan.
Tal y como recogen los datos ofrecidos por la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración, la gingivitis con casi un 60% y la piorrea con más del 25% son dos de las enfermedades más comunes en adultos de entre 35 y 44 años. Pero el auge de las nuevas técnicas en implantes ha traído consigo también el de otras dolencias tales como la mucositis periimplantaria o la periimplantitis.
Mucositis periimplantaria
Es la inflamación de la mucosa y resto de tejidos que rodean un implante. Es sólo eso y por tanto reversible con el tratamiento adecuado, sin embargo, caso de no tratarla puede evolucionar a patologías más graves como la periimplantitis.
Periimplantitis
Como ya hemos dicho, es en muchos casos la consecuencia de una mucositis periimplantaria. En esta dolencia no sólo se ve afectada la mucosa que rodea al nuevo implante, sino que la afección llega mucho más adentro, produciendo una pérdida del hueso que da soporte al implante y, eventualmente, al fracaso de la intervención.
Cómo es el examen en la consulta.
Una vez se haya acudido a la consulta, el profesional hará un examen detallado de boca y dientes en el que se prestará especial atención a las encías blandas, inflamadas o más enrojecidas de lo normal.
Sonda periodontal
Hay que tener presente que las encías sanas generalmente no duelen o son poco sensibles, por lo que, si no es así, tenemos un problema. Se utilizará un explorador para examinar minuciosamente las encías con el fin de determinar la gravedad de la situación y su concreta patología. Normalmente no se requieren más exámenes; sin embargo, para estar más seguros de hasta dónde llega la afección se pueden tomar radiografías de los dientes.
En qué consiste el tratamiento y cuál es su pronóstico
El tratamiento de una dolencia de este tipo va principalmente enfocado a reducir la inflamación.
Así, el higienista te hará una limpieza profesional y en profundidad de los dientes, para lo que empleará diversos instrumentos con el fin de eliminar los depósitos de sarro de los dientes que son casi siempre los causantes del problema.
Pero tan importante como la eliminación del sarro acumulado es la posterior higiene oral tras una limpieza dental profesional. En SanCal te mostraremos cómo cepillarse adecuadamente y usar la seda dental.
Otras recomendaciones que suelen realizarse son:
- Hacerse una limpieza profesional dos veces al año (o con más frecuencia para casos más graves).
- Uso de enjuagues bucales antibacterianos.
- Ortodoncias o reparación de dientes desalineados.
- Reemplazo de aparatos dentales.
Todo lo anterior, por supuesto, deberá estar en coordinación y perfectamente conectado con cualquier otro tratamiento que se esté llevando a cabo al mismo tiempo, por lo que lo aquí comentado debe tomarse exclusivamente a modo de indicación general.
Pronóstico
Hay quien siente incomodidad al serle retirado el sarro de los dientes. Sin embargo, tanto el sangrado como la irritación de las encías deberían disminuir drásticamente tras una o dos semanas de haberse llevado a cabo la limpieza por el higienista y siempre que hayamos seguido unas pautas correctas de higiene bucal en casa.
De hecho, la buena higiene oral es algo que deberá mantenerse para siempre, si no queremos volver a padecer este tipo de dolencia.
En SanCal tratamos todo lo relacionado con tus encías, de una manera experta avalada por nuestros años de experiencia.